Los problemas con el peso de Tamara Falcó salen a relucir tras 'adelgazarse' en una foto
Tamara Falcó engordó mucho en 2016 y luego adelgazó 20 kilos. Un duro proceso que ahora vuelve a la actualidad por lo que ella misma ha hecho
Tamara Falcó en 2016 (extremos) y ahora (centro) | Gtres
Inmersos en los preparativos de su boda, que se celebrará en el palacio El Rincón el próximo 8 de julio, Tamara Falcó e Íñigo Onieva se han tomado un descanso para disfrutar de unas vacaciones de Semana Santa en Bali. La pareja se ha alojado en un exclusivo resort de 5 estrellas, con habitaciones a partir de 3.000 euros la noche.
Días en los que no han faltado los paseos por la playa, las jornadas de turismo para conocer este idílico destino y las noches románticas.
La polémica del Photoshop de la marquesa
Unas idílicas vacaciones que no han estado exentas de polémica. En concreto, porque la marquesa de Griñón ha sido pillada ‘adelgazándose’ en una foto.
Todo se descubrió porque ella subió una foto con Íñigo Onieva y luego este publicó la misma foto. Al comparar ambas, quedó evidenciado que Tamara Falcó había usado el Photoshop para parecer más delgada y para aumentar el músculo de los brazos de su prometido:
Los problemas con el peso de Tamara Falcó
Como no podía ser de otra manera, el hecho de que Tamara Falcó se haya quitado unos kilos a golpe de Photoshop ha sido muy criticado y ha traído de nuevo a la actualidad los problemas con el peso que ha tenido en los últimos años.
En 2016, de hecho, la marquesa engordó muchos kilos en poco tiempo. En concreto, fueron 8 kg:
La hija de Isabel Preysler no estaba a gusto con su peso, así que se puso en manos de los médicos de la clínica Buchinger-Wilhelmi en Marbella para someterse a un tratamiento para adelgazar basado en el ayuno.
«Ella no se siente bien con su cuerpo actual, porque siempre ha estado delgada. Los amigos le dicen que está bien, pero tener una madre como la suya o una hermana como Ana no ayuda demasiado», dijo entonces su entorno.
Tras el tratamiento, adelgazó los 8 kilos que había subido y 12 más. Además, tonificó su cuerpo:
¿Estrés?
Tras adelgazar los 20 kilos, ella misma desveló que había tenido problemas de tiroides y que lo estaba pasando muy mal. «Era un momento de mucho estrés emocional para mí. Ese verano me quedé en casa pensando que todos los problemas eran míos y solo comía filetes y tortilla de patatas», contó ella misma en 2020.
Ahora, con todo lo de la boda, parece que está sufriendo mucho estrés, pues se observa que ha subido ligeramente de peso y que ella misma no está cómoda con cómo luce, pues incluso se retoca en las fotos para parecer más delgada.
En fin, esperemos que esto no le esté causando ningún quebradero de cabeza.
