Tamara Falcó e Íñigo Onieva: destinos, detalles y el (elevado) precio de su lujosa luna de miel
Los recién casados han elegido Sudáfrica como primer destino de su particular vuelta al mundo
Tamara Falcó e Íñigo Onieva | Gtres
Tamara Falcó e Íñigo Onieva ya disfrutan (al fin) de su esperadísima luna de miel tras jurarse amor eterno hace menos de una semana. El recién convertido matrimonio ha elegido Sudáfrica como país para visitar en esta primera etapa de sus vacaciones nupciales, si bien no se descarta que puedan viajar a más lugares. Es hora de celebrar en privado su gran día.
Lo que se sabe de momento es que ya han aterrizado en el continente africano. La hija de Isabel Preysler y su marido han estado un total de 20 horas en el aire. Un viaje que comenzó el pasado 11 de julio en Madrid y que tuvo como primer destino Dubái. En la ciudad de Emiratos Árabes aterrizaron, pero no para quedarse sino para hacer escala, tal y como contó Sandra Aladro en El Programa de Ana Rosa.
En tan solo unas horas volvieron a embarcar en un segundo avión que los llevaría hacia Johannesburgo, la ciudad en la que ha comenzado su primera experiencia como casados. Lo primero que les ha sorprendido es la climatología adversa que les esperaba en Sudáfrica ya que han aparecido las nieves después de una década.
El look en chándal de Tamara Falcó
Las primeras imágenes de Tamara Falcó e Íñigo Onieva en suelo africano nos ha permitido ver en totalidad el comentado estilismo de ella. La marquesa de Griñón escogió lo que en el argot de moda se denomina un ‘look de aeropuerto’ o comfy. Buscó la comodidad y por eso lució un chándal en color azul navy, con rayas blancas en ambos lados de la chaqueta, el pelo recogido en una coleta baja y gafas de sol.
Nada más descender del avión había dos personas esperándolos mientras sujetaban un cartel con sus nombres y la expresión «recién casados».
Por delante tienen unos días de aclimatación a este exótico destino en el que podrán realizar multitud de planes. Entre los atractivos turísticos que posee Sudáfrica y sus países vecinos se encuentran: las cataratas Victoria, Ciudad del Cabo y sus famosos viñedos, los safaris de lujo, Isla Mauricio, Zanzíbar o las Islas Seychelles.
Sudáfrica a cambio de 100.000 euros
Los programas del corazón de Telecinco han querido hacer una aproximación a lo que les va a costar la luna de miel a Tamara Falcó y al empresario. Uno no se casa todos los días y por eso están dispuestos a no escatimar en nada, a tirar la casa por la ventana y hacer de este viaje una experiencia inolvidable.
Se espera que en Johannesburgo estén en torno a dos noches, en hoteles de hasta 2.500 euros por cada una de ellas. Los safaris de lujo suelen costar de 6.000 a 8.000 euros por persona, y la estancia en Isla Mauricio unos 15.000 por persona. El cálculo eleva el gasto de Tamara e Íñigo a 66.000 euros, sin contar los vuelos, por lo que la cifra global de coste se dispara hasta los 100.000 euros.
Esta astronómica cantidad no es tanto para Tamara Falcó ya que hay que recordar que habría recibido cerca de un millón de euros por vender la exclusiva de su boda a su revista de confianza.
«Es amortizable por el millón de euros que les habría pagado ¡HOLA! Además, Tamara colabora con una agencia de viajes, la misma que llevó a la pareja en sus otros viajes antes de casarse, al Polo Norte o Maldivas. Intuyo que ahora, será el mismo mecanismo de intercambio publicitario», comentó Aladro en El Programa de Ana Rosa.
Vuelta al mundo
Lo voluminoso de su equipaje a su llegada a Sudáfrica anticipaba que este no va a ser su único destino. Se espera que Tamara Falcó vaya a Miami para visitar a su hermano Enrique Iglesias, después de la polémica suscitada por su plantón al no acudir a la boda.
Por último, se ha apuntado a Bali (Indonesia) como siguiente destino. La marquesa y su esposo se han propuesto visitar todos los continentes. Una vez de vuelta en Madrid, Tamara seguirá disfrutando de vacaciones hasta el mes de septiembre, cuando volverá a trabajar en El Hormiguero. No obstante, una vez en suelo patrio retomará sus otros negocios pendientes. Echen cuentas, si pueden.
