Las fotografías del rey Juan Carlos en Abu Dabi que han molestado a Zarzuela
Se han publicado las imágenes de su 87 cumpleaños junto con unas declaraciones muy intencionales de su biógrafa

Juan Carlos I celebró en Abu Dabi su 87º cumpleaños. | Gtres
Se van a cumplir cinco años desde que Juan Carlos I se marchase a Abu Dabi. Los escándalos personales y financieros del emérito iban manchando la imagen del reinado de su hijo y esta decisión trataba de alejar, junto con el monarca, los comentarios negativos sobre la institución. Cumplió años el pasado 5 de enero, rodeado de sus amigos y familiares, pero no ha sido hasta este miércoles que se han publicado las imágenes de la fiesta. De nuevo se ha convertido en noticia por las pocas fotografías que circulan últimamente del monarca, llamando demasiado la atención según el gusto de Zarzuela.

La revista ¡HOLA! ha llevado en portada el reportaje casero que realizó Laurence Debray durante los festejos. La biógrafa oficial del emérito asistió a la celebración por el 87º cumpleaños de Juan Carlos I y se ha hecho eco del ambiente que se vivió en aquella finca arábiga. Al publicar las imágenes del Rey junto a las infantas y sus nietos se ha roto el pacto de discreción que venían manteniendo Casa Real y el emérito desde su marcha en 2020. Los reyes ya se han pronunciado al respecto de esta fiesta, de su publicación y del cambio de actitud de Juan Carlos, que podemos adelantar que no ha gustado nada.
La publicación estuvo revisada por Juan Carlos

Esta exhibición de alegría dirigida a Juan Carlos no ha sido vista con buenos ojos por Zarzuela. Fuentes cercanas a palacio han expresado este disgusto a la revista Semana. «En Zarzuela no ha gustado nada que, una vez más, estas imágenes hayan visto la luz. No favorecen al reinado de su hijo y que interfieren en el trabajo que desde Casa Real se viene realizando para cuidar la imagen de la Corona en España», escriben en el medio. Dejan claro que esta publicación no ha sido fortuita y detrás de ella se esconde una intención que no ha pasado desapercibida, para palacio y para los lectores del medio español.
Don Juan Carlos se siente dolido por no poder pasar las Navidades en Madrid. Por poder puede, Felipe no se lo prohibe, pero sería bajo unas condiciones que el emérito no quiere aceptar. La escritora francesa ha dejado caer en su reportaje que tendría que dormir en un hotel y no sería bienvenido en su antigua casa más que para las celebraciones concretas. Sus palabras son claras, «tener que dormir en un hotel, como un turista de paso, le resulta doloroso». Esta declaración tan contundente se deja leer entre líneas con gran facilidad. El que fuera rey hasta 2014 pide pasar las siguientes pascuas en Madrid a través de las palabras de su escritora de confianza. Vanitatis ha confirmado que todo el texto que se envió a la revista había pasado el visto bueno del emérito.
«Hay un gran ausente, el Rey Felipe»
Así, Juan Carlos se apropia del duro discurso que se ha hecho público esta semana. Usa a su biógrafa para soltar frases muy bien dirigidas a su hijo: «Incluso a 5.000 kilómetros de su reino, sigue llevando a España en el corazón. Eso nadie se lo podrá arrebatar», «Dado que no puede estar en España, España viene a él» o «Durante un fin de semana, don Juan Carlos dejó de ser ese hombre retirado, apartado de sus raíces y del afecto de los suyos». La más clara hasta nombra al monarca directamente: «Hay un gran ausente, el Rey Felipe, cuya falta su padre lamenta en silencio». Toda la familia del rey, que no la familia real, asistió al cumpleaños en Adu Dabi. Las infantas Cristina y Elena, todos sus hijos e incluso sus parejas acompañaron a Juan Carlos en su aniversario. Mientras, la reina Sofía, Felipe, Letizia, Leonor y Sofía se quedaron en Madrid y siguieron con normalidad las tradiciones familiares: la pascua militar y el roscón de reyes con la familia Ortiz.

Se ha insistido en el dolor que siente Juan Carlos por el rechazo de su hijo. Estos sentimientos tan íntimos no suelen hacerse públicos en lo que se refiere a la corona, por lo que sería una medida extrema para conseguir los propósitos del emérito. Vanitatis firma que, a pesar de las contraindicaciones que recibía, «dio por hecho que este año podría pasar algunos días de Navidades en Madrid, porque consideraba que había sido ‘obediente’ durante 2024 y que no había dado nada de qué hablar con sus visitas discretas a España». Esto al final no ocurrió para su pesar y sus hijas se empeñaron en compensar la falta con una gran fiesta de cumpleaños que ahora ha disgustado a Zarzuela. Habrá que esperar al año que viene para ver cómo celebran las Navidades y el cumpleaños de Juan Carlos, juntos o separados, en Madrid o en Abi Dabi.