Francia reclutará personal para poner fin al caos provocado por la huelga en las gasolineras
Además, el Gobierno ha prohibido en al menos 24 departamentos franceses la venta y compra de combustible en un contenedor de tipo bote o bidón
La primera ministra de Francia, Élisabeth Borne, ha informado de que el Gobierno francés reclutará personal para forzar el fin de la huelga en el sector del combustible anunciada por los empleados de Exxonmobil y TotalEnergies que se prolonga desde hace once días.
Así, Borne ha anunciado que ha pedido a los «prefectos» la «requisición del personal esencial para el funcionamiento de los depósitos» ante una huelga que ha provocado cortes en el suministro desde este fin de semana.
Ante las dificultades de suministro en las estaciones de servicio, el Ministerio de Transición Energética ha ordenado a todos los «prefectos» en al menos 24 departamentos franceses la prohibición de la venta y compra de combustible en un contenedor de tipo bote o bidón.
El movimiento huelguístico, que afecta a la mayoría de las refinerías de Francia, se ha renovado este martes en TotalEnergies y Esso-ExxonMobil, a pesar del llamamiento del Gobierno a suspender el conflicto «sin demora».
Las dos refinerías de Notre Dame de Gravenchon, en el departamento del Sena Marítimo, y de Fos sur Mer, en el departamento de Bocas del Ródano, han votado a favor de continuar la huelga a pesar de la firma de un acuerdo salarial de dos organizaciones mayoritarias, según ha recogido Franceinfo.
El Gobierno francés, criticado por la escasez de un tercio de las estaciones de servicio, ha pedido este martes, a través del portavoz presidencial Olivier Véran, la liberación «inmediata» de los depósitos de combustible, al tiempo que ha amenazado con «intervenir».
Durante las últimas dos semanas, cinco de las ocho refinerías francesas han enfrentado a un movimiento social liderado por la CGT, que exige un aumento salarial del 10% y un 3% en el reparto de la riqueza, según ha explicado el coordinador de CGT en TotalEnergies, Eric Sellini, tal y como ha señalado el diario Le Figaro.
Según las cifras presentadas el lunes por la ministra de Transición Energética, Agnès Pannier-Runacher, una de cada tres estaciones tienen dificultades. En Hauts-de-France, la proporción alcanza el 48,4%.
La situación empeoró el fin de semana
Durante el pasado fin de semana, la situación en las gasolineras se complicó lo suficiente como para comenzar a provocar las primeras grandes preocupaciones por escasez de combustible.
El Ministerio de Transición Ecológica señaló que el 29,7% de las gasolineras experimentaron dificultades –cortes de suministro– hasta la tarde del pasado domingo.
La presidenta francesa, Elisabeth Borne, aseguró que las tensiones de suministro de combustible «mejorarán a lo largo de la semana», a medida que lleguen «entregas», algo que a la vista de los hechos no ha sucedido.
«Hemos liberado stocks estratégicos para abastecer a las estaciones de servicio y estas entregas llegan paulatinamente», declaró Borne, según recoge la cadena BFMTV.
Por su parte, la ministra de Transición Energética, Agnès Pannier Runacher, demandó «responsabilidad» a los ciudadanos, ya que, insiste, en que «no hay necesidad de sobreabastecerse».
«Hay que apelar a la responsabilidad de todos, estamos ante un aumento del consumo de más del 30% en algunos lugares respecto del consumo habitual, en cualquier caso este consumo no lo pone más fácil», explicó la ministra al citado canal de televisión.
La ministra, además, indicó que en cada región se han reservado estaciones de servicio para vehículos de emergencia o sectores que tengan que seguir trabajando, como el pesquero.