Cómo adelgazar la grasa del vientre caminando: seis sencillas técnicas que funcionan
Se puede adelgazar la grasa del vientre mientras andamos siempre y cuando sigamos ciertos trucos que impulsarán nuestra pérdida de peso
Adelgazar la grasa del vientre no es sencillo, pero, al final, lo que cuesta casi siempre merece la pena. Por ello, si poco a poco vamos haciendo ajustes en nuestro día a día, conseguiremos perder peso en esta zona.
Uno de estos cambios que podemos comenzar a implementar desde ya mismo es salir a andar, ya que las investigaciones han corroborado que caminar puede reducir el índice de masa corporal (IMC) y la circunferencia de la cintura, así como la incidencia de padecer afecciones de salud mental, como ansiedad y depresión, entre otros muchos beneficios.
La calorías que pierde cada persona depende del peso corporal y del metabolismo. Aunque, unas pautas generalizadas puede orientarnos a todos.
Así, podríamos quemar entre 700 y 1000 calorías en una caminata de 16 kilómetros. Haciendo cuentas, y teniendo presente que se necesitan unos 13 minutos en avanzar un kilómetro a paso lento, para quemar entre 700-1000 calorías deberíamos caminar casi cuatro horas a este ritmo, pero podemos acortar el tiempo si avanzamos más rápido, como es obvio.
Cómo adelgazar la grasa del vientre mientras caminas
Pensarás que andar no tiene mucho secreto, pero si lo que queremos es adelgazar la grasa del vientre, hemos de llevar a cabo ciertas técnicas:
1. Cambiar velocidades
Esta es la forma más fácil y sencilla de aumentar la intensidad de la caminata: caminar más rápido, pero no durante todo el tiempo, sino a intervalos, así desafías a tu cuerpo mientras te das la oportunidad de recuperarte y mejorar tu resistencia con el tiempo. Por ejemplo, puedes caminar dos minutos seguidos muy rápido y luego uno a ritmo normal.
2. Caminar cuesta arriba
Caminar en una pendiente es una excelente manera de aumentar la intensidad del entrenamiento de manera suave y segura. También es bueno para la postura, utilizarás más músculos de las caderas y los isquiotibiales. Trata de buscar una ruta que vaya cuesta arriba o camina con pendiente en la cinta de correr.
3. Agrega ejercicios de resistencia
Otra forma de adelgazar la grasa del vientre mientras caminas es agregar algunos ejercicios de tonificación cada pocos minutos. De esa manera, la caminata se vuelve más como un entrenamiento completo en lugar de un paseo.
Por ejemplo, cada pocos minutos, puedes parar y hacer diez sentadillas o diez flexiones. Así, quemarás más calorías, trabajarás más músculos y aumentarás tu trabajo cardiovascular.
4. Ponte un chaleco con peso o bandas con lastre en los tobillos
Los chalecos con peso son excelentes para andar, ya que agregan resistencia ligera y fortalecen tus músculos, huesos y articulaciones sin mucho impacto.
También podemos usar pesas para los tobillos, ya que así aumentaremos la masa muscular en las piernas, fortaleciendo los cuádriceps y músculos femorales o isquiotibiales.
5. Camina por la naturaleza
Una cosa es caminar por una acera pavimentada y otra muy diferente hacerlo por un sendero en plena naturaleza, con pendientes y declives y una variedad de terrenos. Esto último es más recomendable para adelgazar la grasa del vientre, ya que aumentará la quema de calorías y mejorará la fuerza de la parte inferior del cuerpo.
6. Aliméntate correctamente tanto antes como después de salir a caminar
Una buena forma adelgazar la grasa del vientre es combinar el hecho de empezar a caminar con alimentarnos correctamente. Al respecto, el Colegio Americano de Medicina del Deporte advierte que no debemos hacer ejercicio con el estómago vacío, aunque cada vez haya más gente que lo hace: «Se deben consumir alimentos y líquidos antes, durante y después del ejercicio para ayudar a mantener la concentración de glucosa en la sangre, maximizar el rendimiento y mejorar el tiempo de recuperación».
Así, pues, antes de salir a andar es recomendable comer carbohidratos saludables como cereales integrales, tostadas integrales, yogures bajos en grasa, frutas o verduras. Hemos de evitar las grasas saturadas y las proteínas saludables, porque este tipo de combustibles se digiere más lentamente en el estómago y puede resultarnos molesto a la hora de estar caminando.
Para después de la caminata, y si queremos perder peso, sí que hemos de consumir proteínas (carne magra, pescado o verdura) y beber mucha agua.