El cacao, una hipotética herramienta contra el deterioro cognitivo
Más allá del snack, el cacao podría ser mucho más que un placer gustativo
Cacao.
Conocido desde tiempos inmemoriales en Hispanoamérica y considerada bebida de los dioses, el cacao es un elemento vertebrador de las culturas precolombinas, especialmente las mesoamericanas. Producto que, curiosamente, podría ser el cacao una poderosa herramienta para frenar el deterioro cognitivo.
Convertido en uno de los grandes retos de las sociedades occidentales, cada vez más envejecidas y con una mayor esperanza de vida, el amejoramiento de la calidad de esta a las personas mayores es ahora trascendental. Salpicado por determinadas patologías que se asocian al envejecimiento, si hablamos de deterioro cognitivo resulta evidente mencionar algunas.
El mal de Alzhéimer, la propia enfermedad de Parkinson o la demencia forman parte de estas preocupaciones. Aunque la demencia, como ya te explicamos en THE OBJECTIVE, no es una enfermedad ad hoc, sí conviene identificarla dentro de estos cambios asociados al envejecimiento. Razón por la que conviene comprender que puede haber más herramientas para frenar o limitar el deterioro cognitivo de las que pensamos.
Y aquí, siglos después, es donde aparece de nuevo el cacao. En culturas como la maya o la azteca, el cacao —la bebida preparada con él— sorprendió a los conquistadores españoles al ver que sus rivales parecían infatigables y no paraban a comer. Aquella mezcla de cacao, agua y otras especias siempre se tuvo como un elemento estimulante. Ahora, además, un estudio apunta a la relación que el cacao puede tener con el deterioro cognitivo.
La vinculación entre el cacao y el deterioro cognitivo
Un estudio conjunto de dos instituciones estadounidenses, entre ellas la Harvard Medical School, ha encontrado resultados alentadores al vincular cacao y deterioro cognitivo. Aunque se deben coger con ciertas reservas y quedan más investigaciones pendientes, podría suceder que el extracto de cacao reduzca el deterioro cognitivo en un cierto grado.
Con casi 600 participantes —con una edad media de 70 años—, el estudio incluyó dos años de ingesta de extracto de cacao. Entre las conclusiones, la más relevante es que aquellas personas que tenían una dieta de baja calidad vieron, dos años después, mejorados sus resultados cognitivos tras la suplementación.
La parte negativa del estudio, como también apunta, es que no se produjo una mejora en las personas que ya tenían una buena dieta. Una contraprestación que indicaría que, partiendo de un estándar dietético equilibrado, la inclusión del extracto de cacao no tendría beneficios extra. De esta manera, abre una puerta a persistir en la investigación de los hipotéticos beneficios del cacao frente al deterioro cognitivo.
No es además la primera vez que un estudio avala las posibles ventajas del extracto de cacao en estos términos. En cualquier caso, cabe recordar que el estudio cuenta con distintas fuentes de financiación, entre ellas Mars Edge —una de las filiales de la compañía Mars—, aunque no han intervenido en el análisis de los datos.
Tampoco en la interpretación de resultados o en la publicación del estudio. No obstante, como indicábamos, hay más estudios sobre el cacao que merece la pena refrescar. Algunos indican que el extracto de cacao mejoraría cierto tipo de memoria en personas mayores con dietas de baja calidad. Por contra, también hay investigaciones que habrían constatado que el extracto de cacao no mejoraría la cognición en términos generales.
La clave está en los flavanoles
El estudio consistía en la ingesta de extracto de cacao —no chocolate— que incluía 500 miligramos de flavanoles. Estos compuestos, naturalmente presentes en las versiones puras del cacao, también se encuentran en otros productos como el té, las manzanas, las uvas o determinados frutos rojos.
Entre los beneficios que se destacan de los flavanoles estaría una virtud antioxidante que reduciría los radicales libres de nuestro organismo. De esta manera se vería también disminuido el estrés oxidativo. También, como han avalado distintas investigaciones, este tipo de flavanoles podrían aportar beneficios a la salud cardiovascular.
Se estima que hay relación entre la mejora de la hipertensión por el consumo de estos flavanoles. También habría relación entre una mejora de los niveles de colesterol y estos compuestos. Aparte de eso, también habría investigaciones que vinculan los flavanoles con determinados beneficios anticancerígenos. Además de la citada relación entre cacao y deterioro cognitivo.
No obstante, siempre es recurrente recordar que la memoria o el deterioro cognitivo dependen de muchos factores. El propio envejecimiento es capital, pero también determinados hábitos. De nuevo, el recuerdo del círculo virtuoso que se establecería entre dieta, sueño y ejercicio físico es necesario. Son muchos los estudios que vinculan un menor deterioro cognitivo al ejercicio físico. También, como es evidente, los que apuntan a que una buena higiene del sueño y un buen descanso ralentizan el deterioro cognitivo.
