Esto es por lo que tienes que incluir en tu menú coles de Bruselas
Las coles, en particular, también tienen una fuerte presencia en la agricultura de Francia, Países Bajos y Reino Unido
Los belgas fueron los primeros en adoptar el cultivo de esta verdura, y aunque ahora su producción y consumo se han expandido a otras regiones del mundo, el nombre de esta verdura sigue asociado con Bélgica.
Incorporar este alimento en tu menú diario puede ofrecerte una serie de beneficios para la salud que no debes pasar por alto. Y es que esta pequeña verdura está cargada de nutrientes esenciales que fortalecen el sistema inmunológico, mejorar la salud de los huesos y contribuyen a mantener un peso saludable.
Su planta crece hasta una altura de entre 30 y 70 centímetros y su cosecha puede variar desde finales del verano hasta principios de la primavera, según la variedad cultivada.
Consideradas una verdura de invierno, se presentan en variedades estándar e híbridas, que difieren en tamaño, color y sabor. Además, existen variedades tempranas, intermedias y tardías, lo que prolonga su disponibilidad en el mercado.
¿Qué propiedades tiene?
En términos de propiedades nutricionales, la col de Bruselas es rica en vitamina C, provitamina A, ácido fólico y vitaminas del grupo B, además de contener potasio, magnesio, yodo, zinc, hierro, fósforo y calcio, entre otros nutrientes.
Este alimento es muy bajo en calorías, aportando menos de 50 kcal por cada 100 gramos. Destaca por su alto contenido en fibra y, aunque es una de las más nutritivas dentro de la familia de las crucíferas, sigue siendo una opción baja en calorías.
Sin embargo, es importante tener en cuenta que puede no ser adecuada para personas con problemas de tiroides o dificultades digestivas.
A pesar de sus beneficios, la col de Bruselas no ha logrado el mismo éxito gastronómico que otras verduras de la misma familia, como la coliflor.
¿Por qué deberías de incluirlas en tu dieta?
Las coles de Bruselas están llenas de vitaminas y minerales, y pueden ser muy beneficiosas para fortalecer tu sistema inmunológico, mejorar la salud de tu sangre y huesos, entre otros aspectos.
Son muy saciantes y bajas en calorías, por lo que son ideales para mantener un peso saludable. Una taza de coles de Bruselas crudas ofrece 4 gramos de fibra y proteínas, y poco más de 50 calorías.
En cuanto a antioxidantes, las coles de Bruselas se destacan después de la col rizada y las espinacas. Estos antioxidantes ayudan a prevenir el daño celular y mantener la salud. Y media taza de coles de Bruselas cocidas proporciona casi la mitad de la dosis diaria recomendada de vitamina C.
Además, son una excelente fuente de fibra, potasio y ácido fólico. Comer regularmente coles de Bruselas y otras verduras crucíferas puede contribuir a la prevención de varios tipos de cáncer.
¿Cómo cocinar las coles de Bruselas?
Antes de cocinar las coles de Bruselas, es importante lavarlas y limpiarlas adecuadamente. Corta la parte inferior dura y retira las hojas externas marchitas. Para asegurar una cocción más uniforme, realiza un corte en forma de X en la base.
Puedes preparar las coles de Bruselas de varias formas sencillas:
- Microondas: colócalas en un recipiente apto para microondas con un cuarto de taza (60 ml) de agua y caliéntalas durante aproximadamente 4 minutos.
- Al vapor: cocina en una cacerola pequeña con 2,5 cm de agua. Hierve el agua, agrega las coles de Bruselas y cocínelas tapadas durante 5 a 10 minutos.
- Asadas: mezcla con aceite de oliva y hornéalas en una bandeja a 204 °C (400 °F) durante 25 a 30 minutos. Puedes añadir sal, pimienta, hojuelas de pimiento rojo o ajo en polvo para darles más sabor.
- Salteadas: cocina en una sartén con ajo y aceite de oliva. Puedes añadir pollo, hongos o frijoles para hacer una comida más completa, y también incluir pasta integral o rica en fibra.