'Timeboxing', el método que usan Elon Musk y Bill Gates para ser más productivos y exitosos
Es una práctica sencilla de elegir una actividad para hacer, determinar cuándo hacerla y luego completarla
Todos, hagamos lo que hagamos en nuestro día a día e independientemente de a qué nos dediquemos profesionalmente, anhelamos ser más productivos y exitosos. Pero cada vez se nos complica más con todas las distracciones diarias, especialmente de nuestros móviles.
Para todos aquellos que deseen aprovechar al máximo su jornada y cumplir sus metas y propósitos en el menor tiempo, ha nacido el método ‘timeboxing’, que utilizan personas tan reconocidas como Elon Musk, fundador de Tesla y SpaceX, o Bill Gates, fundador de Microsoft y filántropo.
Qué es el método ‘timeboxing’
Todos los días, nos levantamos y acudimos a nuestro puesto de trabajo, donde nos enfrentamos a innumerables opciones permanentes, notificaciones inoportunas y no solicitadas y una competencia constante por nuestra atención. Esto disminuye nuestra facultad de elegir lo correcto, lo que lleva a millones de personas a sentirse desconcertadas, exhaustas, ansiosas o deprimidas. Lo mismo sucede con otros aspectos de nuestra vida, como tener tiempo libre para realizar alguna actividad de ocio o pasar más tiempo con la familia.
Para cubrir esta necesidad ha nacido el método ‘timeboxing’, que es una guía completa para seleccionar cuidadosa y deliberadamente qué hacer, especificar horas de inicio y finalización, concentrarse solo en esa única actividad y hacerla a un nivel aceptable dentro de ese período de tiempo.
Para descubrir más acerca de esta técnica, en THE OBJECTIVE hemos consultado EL MÉTODO TIMEBOXING. El poder de hacer una cosa a la vez, el nuevo libro de Marc Zao-Sanders, director ejecutivo y cofundador de filtered.com, una empresa de tecnología de aprendizaje.
El autor, que escribe sobre algoritmos, aprendizaje y productividad en Scientific American, Harvard Business Review y MIT Sloan Management Review, ofrece en su libro una mirada informativa y accesible a cada aspecto de este método revolucionario: cómo hacerlo de manera constante y cómo hacerlo bien.
El método ‘timeboxing’ ofrece orientación sobre lo que puedes hacer, deberías hacer y vas a hacer en un momento dado. Se ha demostrado que esta práctica pragmática y transformadora de actividades diarias intencionales da como resultado lo que casi todo ser humano anhela: una vida valiosa, elegida por nosotros mismos.
Además de ser un método, el ‘timeboxing’ es una mentalidad. «Es necesario reconocer la importancia de gestionar el tiempo, comprender que puedes cambiar tu comportamiento y apreciar los numerosos beneficios que tiene para ofrecer. En otras palabras, desarrollar una actitud positiva y creer en lo que estás haciendo son aspectos cruciales para que el ‘timeboxing’ (y, de hecho, cualquier otro cambio de comportamiento significativo) se integre en tu vida», detalla el experto.
Qué problemas resuelve este método
El problema radica en que no gestionamos bien nuestro tiempo: «Procrastinamos. Concretamos menos tareas de las que deberíamos. No nos sentimos libres, ni siquiera en nuestro tiempo libre. Nos comprometemos en exceso. Nos invade la ansiedad».
Hoy en día, nos cuesta administrar bien nuestro tiempo, en especial porque:
- El trabajo del conocimiento es infinito.
- Nos enfrentamos constantemente a numerosas opciones, «lo que genera una desagradable presión para elegir con sensatez. Además, gran parte de las opciones entre las que tenemos que elegir son una porquería; la abundancia de opciones proviene de una sobreabundancia de basura».
- Hemos cultivado el miedo a perdernos algo (FOMO, por sus siglas en inglés), que surge de estar constantemente pen- diente de lo que está sucediendo en otro lado, sobre todo a través de las redes sociales.
- Delegamos el control a algoritmos y a otras personas.
- Disponemos de un tiempo limitado aquí: «Elegir de manera sabia conduce a vivir una buena vida, mientras que elegir de manera incorrecta, no. El problema es que solemos tomar decisiones equivocadas. El problema es que no vivimos la buena vida que deberíamos tener».
Principios del ‘timeboxing’ para que puedas usarlo ya mismo
Aunque en el libro encontramos detalladamente cómo utilizar el ‘timeboxing’, a continuación recogemos los aspectos esenciales de este método, más allá de la definición, para que, si quieres, puedas empezar a partir de mañana o incluso de hoy.
Al respecto, hay dos actividades que funcionan como el conjunto que lo conforma: planear y hacer:
1. Planear (antes del día)
- Resérvate un plazo de tiempo (pueden ser unos quince o treinta minutos) antes de sumergirte en la rutina diaria, para determinar cuáles son las tareas más cruciales que debes completar.
- Programa un evento diario (mejor si es digital) en tu calendario para esta sesión de planificación, a primera hora de la mañana (o a última hora de la noche anterior). Haz que el evento se repita para que nunca lo olvides.
- Revisa tu lista de tareas pendientes. Las listas de tareas pendientes nutren el ‘timeboxing’ y cuanto mejor sea la lista, más efectiva será la implementación del método.
- Selecciona algunas de las tareas más importantes de esa lista y vuélcalas en el calendario. No te preocupes por el orden por ahora, solo inclúyelas.
2. Hacer (durante el día)
- Sé puntual.
- Aléjate de las distracciones, la más peligrosa de todas es tu teléfono.
- Sigue el plan establecido. «Evita cuestionarte y desestimar las decisiones previas. A menos que surja una emergencia, con- fía en las decisiones que tomaste con calma y claridad durante la planificación; por lo general, son mejores que las decisiones que nacen en medio del caos diario».
- Termina a tiempo. «Cumple con las tareas asignadas. No d jes que la búsqueda de la perfección obstaculice lo bueno. En general, lo bueno suele ser suficiente».
«Es probable que te distraigas y te desvíes del camino. Es inevitable. Y, cuando eso ocurra, practica volver a concentrarte en el ‘timebox’ (vuelve al calendario), retoma la tarea original. Con el tiempo, las distracciones disminuirán y serán más cortas», asegura Zao-Sanders.
«El ‘timeboxing’,’ es perfecto para que lo empieces a experimentar en el camino. Cada mañana, al despertar, tienes una nueva oportunidad para poner a prueba lo que has aprendido, ajustarlo, experimentar con él, cuestionarlo y apropiártelo. (…) Para empezar, podrías probar a hacerlo cada dos días (por ejemplo, lunes, miércoles y viernes o martes y jueves). Este tipo de plan te permitirá contrastar una vida haciendo ‘timeboxing’ frente a una sin hacerlo. Es probable que pronto sientas la necesidad de aplicar el método incluso en los días no planificados».
Éxito y productividad
El ‘timeboxing’ puede ayudarte a alcanzar la cima de tu capacidad. «Puede usarse para crear las condiciones que tú y tu cerebro necesi- tan para lograr el máximo rendimiento. Esto implica germinar y planificar, como se ha mencionado antes, y también configurar de manera adecuada tu entorno físico».
Si logramos hacer todo eso de forma correcta, «entonces eliminaremos las distracciones y podremos concentrarnos mejor. Al darnos la posibilidad de concentrarnos en una sola cosa a la vez, este método también nos ayudará a disminuir el estrés que, según ha quedado demostrado, reduce el rendimiento. El neurocientífico Daniel Levitin nos recuerda que el multitasking es estresante, tal como lo indican el aumento de la secreción de cortisol y adrenalina».
Pero lo más importante es que, según el autor del libro, el ‘timeboxing’ nos ayuda a alcanzar niveles excepcionales de calidad, algo que, en realidad, todos nosotros deseamos. Quizá no perdamos nada por probar este método.