Por qué no deberíamos guardar los pijamas tanto tiempo, según una experta en orden
Esta prenda, a la que solemos aferrarnos, puede estar afectando la armonía de nuestro espacio más íntimo
La importancia del orden en los pijamas | Canva
A menudo, el dormitorio se convierte en el espacio donde más acumulamos objetos de todo tipo, desde ropa hasta muebles o accesorios innecesarios.
Aunque tendemos a ser selectivos con muchas de nuestras pertenencias, hay una prenda que suele pasar desapercibida en la tarea de organizar: los pijamas.
Una experta en orden nos alerta sobre cómo esta prenda, a la que solemos aferrarnos durante demasiado tiempo, puede estar afectando la armonía y funcionalidad de nuestro espacio más íntimo. ¿Por qué deberíamos replantearnos el tiempo que guardamos los pijamas? La respuesta podría sorprenderte.
La capacidad del orden
El dormitorio, aunque es la estancia donde pasamos menos tiempo despiertos, es el espacio más íntimo de nuestro hogar.
Es donde descansamos, nos relajamos y guardamos nuestras pertenencias más personales. Sin embargo, muchas veces se convierte en un espacio de acumulación, lo que puede afectar nuestra tranquilidad y la calidad del descanso.
Vanesa Travieso, autora de El poder detrás del orden, nos advierte sobre la tendencia a llenar el dormitorio de objetos y muebles innecesarios, incluyendo una colección excesiva de pijamas.
¿Por qué afecta esto y cómo resolverlo?
Según Travieso, el problema radica en que solemos guardar cosas por si acaso o porque nos cuesta desprendernos de ellas, generando un desorden que interfiere con la atmósfera de calma que un dormitorio debe proporcionar.
Los pijamas, en particular, suelen ser una de las categorías más problemáticas. Muchas personas acumulan numerosos conjuntos, desde los más sencillos hasta los voluminosos. Y es que estos ocupan un espacio valioso en los cajones y armarios, contribuyendo al desorden general.
La experta en orden recomienda un enfoque más práctico para evitar esta acumulación: reducir la cantidad de pijamas a un número manejable.
Sugerentemente, tres o cuatro conjuntos para invierno y otros tres o cuatro para verano son suficientes. Esto nos permite contar con opciones adecuadas para las diferentes estaciones del año sin sobrecargar el espacio de almacenamiento.
Travieso también aconseja revisar regularmente la ropa de dormir para deshacernos de aquellos pijamas que ya no están en buen estado, que no nos gustan o que simplemente no necesitamos.
Pijamas viejos, con la goma desgastada, desparejados o que ocupan demasiado espacio, deben ser descartados, donados o reciclados.
Mantener el dormitorio libre de acumulaciones innecesarias es clave para convertirlo en un lugar verdaderamente relajante.
Al simplificar la cantidad de ropa, muebles y objetos que mantenemos en este espacio, promovemos un ambiente más ordenado y acogedor, que favorece el descanso y el bienestar.
¿Cómo afecta el orden a nuestro bienestar?
El orden ejerce una influencia profunda en nuestro bienestar físico y mental de diversas maneras. Mantener un espacio organizado tiene varios beneficios clave:
- Reducción del estrés: un entorno desordenado puede generar una sensación de caos y sobrecarga visual, lo que incrementa el nivel de estrés y ansiedad. En cambio, un espacio ordenado promueve la calma al reducir la estimulación visual y mental, creando un ambiente más relajante y controlado.
- Mejora de la concentración: al mantener un entorno despejado y organizado, se minimizan estas distracciones, lo que facilita la concentración en tareas específicas y mejora la claridad mental, crucial para el rendimiento en trabajos o estudios.
- Aumento de la productividad: un espacio bien organizado contribuye a una mayor eficiencia al evitar la pérdida de tiempo buscando objetos o lidiando con el desorden. Esto no solo ahorra tiempo y energía, sino que también reduce la frustración asociada con la falta de organización, permitiendo un flujo de trabajo más fluido y productivo.
- Mejora del estado de ánimo: los espacios limpios y organizados no solo son visualmente más agradables, sino que también pueden tener un impacto positivo en nuestro estado emocional.
- Mejor calidad del sueño: un dormitorio ordenado y libre de desorden puede mejorar significativamente la calidad del sueño. Un espacio relajado y despejado facilita un ambiente propicio para el descanso, ayudando a que el cuerpo y la mente se relajen y se preparen adecuadamente para dormir.
- Fomento de hábitos saludables: un entorno limpio y ordenado en la cocina puede alentar la preparación de comidas caseras y saludables. Del mismo modo, un espacio de trabajo bien organizado puede fomentar una rutina de trabajo más estructurada y equilibrada.
