Cómo aprender a estar solos y ser felices, según Enrique Rojas
La soledad, lejos de ser un motivo de inquietud, puede convertirse en una valiosa oportunidad para el crecimiento

Enrique Rojas | @enriquerojasoficial
La soledad no siempre es un estado impuesto, puede ser una elección consciente y enriquecedora si sabemos gestionarla correctamente.
Así lo explica Enrique Rojas, psiquiatra y catedrático, quien, a través de sus redes sociales y su libro Comprende las emociones, desvela las claves para aprender a estar solos y ser felices con nosotros mismos.
¿Cuál es el mayor reto para aprender a estar solos?
Rojas destaca que uno de los principales retos al estar solos es enfrentar la irrupción de pensamientos negativos, que suelen girar en torno a errores del pasado, preocupaciones del presente o temores hacia el futuro.
Según el psiquiatra, «aprender a estar solos significa ser capaces de convivir con uno mismo sin que los recuerdos negativos nos dominen».
Esto implica trabajar activamente en controlar estos pensamientos, porque cuando no lo hacemos, pueden afectar nuestro estado de ánimo y dificultar nuestra paz interior.
La clave, asegura, está en reemplazar esos pensamientos intrusivos con actividades significativas que nos llenen de bienestar: desde leer un buen libro o escuchar música, hasta reflexionar y tomar notas de lo que ocurre en nuestra mente. Estas prácticas nos ayudan a encontrar un punto de equilibrio emocional.
Pasatiempos como aliados para el bienestar
Un aspecto esencial para aprender a estar solos, según Enrique Rojas, es invertir tiempo en actividades o pasatiempos que nos reconforten.
Estas actividades no solo ayudan a distraernos de los pensamientos negativos, sino que también contribuyen a fomentar la creatividad, la introspección y el desarrollo personal.

Desde aprender un nuevo hobby, como pintar o tocar un instrumento, hasta simplemente caminar en la naturaleza, lo importante es encontrar algo que nos conecte con nosotros mismos y nos haga sentir en paz.
Tal y como explica Rojas en sus publicaciones, «dedicar tiempo a uno mismo es un acto de autocuidado necesario para el equilibrio mental».
La importancia de las relaciones saludables
Aunque el foco está en aprender a estar solos, Enrique Rojas también recalca la importancia de las relaciones saludables para complementar nuestro bienestar.
Según él, la capacidad de estar a gusto con nosotros mismos es una base sólida para construir relaciones equilibradas y duraderas.
En este sentido, sugiere aprender a comunicar nuestras emociones, necesidades y diferencias con los demás de manera efectiva, evitando conflictos innecesarios y fomentando la empatía.
Consejos prácticos para gestionar la soledad
Si bien Rojas profundiza en estos temas en su libro, también ofrece consejos prácticos que podemos aplicar en nuestro día a día:
- Establece una rutina: mantén un horario organizado que combine momentos de productividad con tiempo para actividades que disfrutes.
- Practica el mindfulness: dedica unos minutos al día para respirar conscientemente y estar en el presente. Esto te ayudará a calmar la mente.
- Cultiva el agradecimiento: hacer una lista diaria de cosas por las que estás agradecido puede ayudarte a combatir los pensamientos negativos.
- Sé creativo: probar algo nuevo o desarrollar una habilidad artística puede ser terapéutico y motivador.
- Conecta contigo mismo: escribe un diario, medita o simplemente reflexiona sobre tus emociones y experiencias.
¿Qué es la felicidad para Enrique Rojas?
Rojas sintetiza su visión de la felicidad en una frase célebre: «La felicidad consiste en tener buena salud y mala memoria». Con estas palabras, el psiquiatra subraya la importancia de dos aspectos fundamentales: cuidar nuestro cuerpo y mente, y aprender a gestionar nuestras experiencias pasadas para vivir con mayor plenitud.
Tener buena salud no solo implica la ausencia de enfermedad, sino también el mantenimiento de un equilibrio físico, mental y emocional.
Esto incluye hábitos esenciales como llevar una alimentación balanceada, hacer ejercicio regularmente, descansar adecuadamente y cultivar relaciones sociales saludables.
La conexión entre el cuerpo y la mente es clave: cuando nos sentimos bien físicamente, también estamos mejor preparados para enfrentar desafíos emocionales.
Por otro lado, la «mala memoria» a la que se refiere Rojas no implica olvidar todo, sino saber priorizar qué recuerdos guardamos y cuáles dejamos ir. Muchas veces, vivimos aferrados a errores del pasado, decepciones o momentos dolorosos que ya no podemos cambiar.
Aprender a soltar esas cargas emocionales nos libera y nos permite enfocar nuestra energía en el presente. Esto no significa ignorar lo que ocurrió, sino extraer las lecciones necesarias y seguir adelante sin que esos recuerdos se conviertan en un lastre.