Moncloa excluye a Jaume Roures de la UE, pero le dan el programa estrella de TVE
Mediapro ha sido expulsada del concurso para realizar la señal televisiva de la presidencia española de la UE, pero prepara el programa estrella de TVE en 2023
El empresario Jaume Roures en el Festival de San Sebastián 2021. | Alberto Ortega (Europa Press)
Jaume Roures fue considerado el empresario televisivo más beneficiado por los gobiernos de José Luis Rodríguez Zapatero, que posibilitaron el nacimiento de La Sexta mientras RTVE le otorgaba jugosos contratos a Mediapro.
Harina de otro costal es la relación entre Pedro Sánchez y el productor catalán, que en los últimos años ha mostrado mayores simpatías por formaciones como Podemos o Esquerra Republicana de Catalunya que por el PSOE.
RTVE gastó 630 millones de euros en productoras entre 2018 y 2021 y ninguna de las cinco factorías más contratadas (Shine Iberia, Grupo Ganga, Boomerang, Plano a Plano y Gestmusic) pertenecen al gigante audiovisual Mediapro, que en 2021 facturó 1.218 millones de euros y rebajó su deuda hasta los 400 millones.
El nombramiento de José Pablo López como director de Contenidos generales de RTVE ha mejorado la situación de Mediapro en la pública, que le ha otorgado la confianza para poner en marcha uno de los proyectos estrella para La 1 en 2023, ‘El Conquistador del Caribe’.
Cabe recordar que el directivo malagueño ejerció como director de la Asesoría Jurídica en La Sexta y otorgó contratos a la compañía de Roures cuando ejerció como director general de Trece (‘La Goleada’) o Telemadrid (‘Está pasando’).
5.653.000 euros pagará RTVE por ‘El Conquistador del Caribe’, versión estatal del programa más exitoso de la televisión autonómica vasca ETB. Explica la cadena pública estatal que este formato es el reality más duro de la televisión y se graba en paradisiacos pero inhóspitos parajes que ponen a prueba la fortaleza física y mental de los concursantes.
«Con el espíritu deportivo como bandera, tres equipos se enfrentan a una climatología extrema y a la fauna y flora salvajes que ofrecen localizaciones como la Patagonia, el Aconcagua, el Amazonas o el Caribe», avanza TVE. En estas difíciles condiciones, añaden, los participantes se deben superar pruebas de gran dureza mientras demuestran que saben convivir, colaborar y competir al mismo tiempo.
El encargo presumiblemente será el que reciba Mediapro en 2023 por parte de RTVE, que el pasado año le compró el Mundial de Qatar por 32 millones de euros.
La Moncloa no está mimando especialmente a Roures en los últimos tiempos, tal y como se advierte de la sorprendente decisión de la Autoridad Portuaria de Barcelona de dejar a Mediapro sin la gestión del Imax Port Vell, que reabrirá sus puertas como un centro de interpretación de la Copa América de vela que Barcelona acogerá en 2024.
El organismo dependiente del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana ha otorgado la adjudicación del centro que se encargará de realizar una experiencia inmersiva a la compañía Dortoka Disseny por 3,2 millones de euros. Esta decisión de la Autoridad Portuaria de Barcelona ha causado cierto revuelo porque el CEO de la Copa América de vela, Grant Dalton, anunció a la prensa que sería Mediapro la encargada de realizar esta tarea.
Más comprensible, aunque también llamativa, ha sido la expulsión de Mediapro de un concurso que había ganado en la Moncloa para realizar la señal televisiva de la presidencia española de Unión Europea. La producción y grabación de los actos oficiales de Presidencia ha recaído en RTVE a a cambio de 886.000 euros porque Mediapro ha sido expulsada, tal y como señala Dircomfidencial, por presentar una propuesta «anormalmente baja» de 662.000 euros.
El posicionamiento soberanista de Roures durante el procés también le ha alejado especialmente del PSC, que no está utilizando su creciente influencia en TV3 en favor de Mediapro, cuya facturación en la televisión catalana ha rondando los 3,5 millones de euros anuales gracias al espacio político ‘FAQS’, cancelado hace unos meses tras presiones de los socialistas catalanes.
En el PSC respiraron aliviados cuando tanto Moncloa como la banca se posicionaron en favor de Prensa Ibérica en la puja por comprar el Grupo Zeta que edita el influyente El Periódico de Catalunya, objeto de deseo para Roures.
El productor mostró su enfado tras quedarse sin el holding: «Creo que nuestra oferta no solo es la mejor, sino que es la más beneficiosa para la gente que trabaja ahí. Entrar en otra dinámica laboral como la que ha vivido la redacción los últimos años no es lo más recomendable. Nosotros somos una productora, un grupo fuerte, que es lo que puede dar más continuidad a ese negocio, pero las fuerzas oscuras actúan», señaló.
