Así puedes personalizar la matrícula de tu coche: la DGT lo permite

Es muy común ver, sobre todo en las películas y series de tipo estadounidense, que los coches tienen una matrícula personalizada. Pues en España, según informa la Dirección General de Tráfico (DGT), también es posible cambiar la matrícula al gusto del conductor. Es precisamente Estados Unidos otro de los países en los que suele ser legal que los propietarios de cualquier tipo de vehículo personalicen su matrícula.

Lo más común es que las placas lleven algún tipo de nombre, pero también hay quienes optan por una alguna frase ingeniosa. Incluso, hay algunas que rinden homenaje a algún equipo.

Normativa de la DGT sobre la matrícula

La normativa actual respecto a la personalización de la matrícula suele ser muy estricta. Además, también lo es en lo que respecta a las medidas de las placas. La que suele ser habitual, es decir, la matrícula ordinaria larga, suele medir unos 52 centímetros de ancho y 11 centímetros de largo. Esta suele ser la que por defecto está puesta en la zona delantera y en la parte trasera de los coches.

Aparte de esto, hay tres modelos diferentes que placas con las siguientes medidas: 34 x 22, 34 x 11 y 22 x 16. Este tipo de matrículas no suelen ser tan comunes y no se tienen que colocar de una forma que resulte aleatoria. Desde el año 2003, la DGT ha empezado a permitir la personalización de esta parte de los vehículos, aunque no es una matrícula en sí.

Concretamente, lo que permite son una serie de placas que se ponen en el vehículo. La matriculación como tal tiene que seguir cierto orden ya establecido en el sistema de combinación de tres letras y cuatro números. No obstante, sí que es posible hacer ciertos retoques que sean pequeños dentro de la placa.

Tipos de matrículas

Lo más habitual suele ser la personalización de la matrícula por medio de la tipología tecnológica. El dueño del vehículo tendrá la posibilidad de escoger entre las que son de aluminio, que suelen ser las que predominan en el mercado, o las que están fabricadas con material de metacrilato. Un material u otro será irrelevante siempre que respeta la normativa en lo que a medidas, caracteres y otro tipo de componentes técnicos se refiere.

Hay que tener en cuenta que, como se ha mencionado antes, todos los coches tienen que llevar dos placas de matrícula: una en la parte delantera y otra en la zona de atrás. Las excepciones a esta norma son los ciclomotores, así como las motocicletas, que tienen que llevar una única placa de forma vertical en la zona posterior del vehículo.

Donde también es obligatorio llevar la matrícula es en los remolques y en los semirremolques de hasta 750 kg de masa máxima autorizada. Por el contrario, los vehículos de movilidad personal, como son las bicicletas y los patinetes, no tienen que llevar esta identificación.

Las matrículas prohibidas en España

El actual sistema de matriculación lleva en vigor desde el año 2000. Desde entonces, tanto las letras como los números que pudieran provocar malentendidos o formar palabras poco adecuadas (como ETA) quedaron fuera de las permitidas. De esta manera, hay vocales y otra serie de letras que ya no permite el código de matriculación.

Esto es lo que ocurre a letras como la Ñ y la Q, vetadas de las matrículas. Esto es ya que, al escribirlas en las placas, pueden provocar confusión por su parecido a otras letras como la N o la O.

Otras letras que también están dentro de la lista de prohibidos son la CH y la LL. El motivo de estas letras es que no puede haber matrículas con cuatro caracteres. Además, cuando entró en vigor este código la Real Academia de la Lengua Española (RAE) ya las había eliminado del abecedario por considerarlos dígrafos.

De esta forma, las letras del abecedario que están prohibidas en las matrículas de coche españolas son: A, CH, E, I, LL, Ñ, O, Q y U.