El Peugeot E-3008 eléctrico alcanza nuevas cotas con una autonomía de 700 kilómetros
La marca se fija una ambiciosa estrategia de electrificación para ofrecer una gama completa de eléctricos en 2025
Frontal del nuevo Peugeot E-3008. | Stellantis
El león pega un zarpazo. Estos animales salvajes son muy peligrosos, y cuando atacan por la espalda es cuando más daño hacen. De manera análoga, el felino que representa a la marca francesa Peugeot acaba de tirar una tarascada repleta de voltios al líder indiscutible, el Tesla Y, coche más vendido del mundo y pieza de caza mayor al que todos trazan con sus punteros láser. Puede que no sean coches equiparables, pero en esta batalla, el californiano empieza a toparse con enemigos de su calibre.
La única forma de plantar cara al rey es crear algo equiparable, o incluso mejor, y resulta obvio que los galos de Stellantis han puesto toda la carne en el asador en este E-3008. Como resultado, encontramos unos impresionantes 700 kilómetros de autonomía eléctrica, cifras que malamente alcanzan los mejores diseños de Tesla, la referencia en el segmento, aunque tienen otras ventajas de la que el francés carece, como su potencia.
El 3008 en todas sus versiones, ya sea de combustión, híbridos, y ahora eléctricos, ha superado los 1,3 millones de unidades vendidas en un mercado particularmente árido. La marca se fija una ambiciosa estrategia de electrificación que apunta a ofrecer una gama completa de vehículos eléctricos en 2025. El plan pasa porque todas sus ventas en Europa sean cero emisiones para 2030, y el nuevo E-3008 marca el comienzo de esta nueva era.
Papel en blanco
Diseñado desde cero como un vehículo eléctrico, utiliza la innovadora plataforma STLA Medium de Stellantis. La gama de opciones incluye tres combinaciones de motor y batería: el modelo base ofrece una autonomía de 525 km, con 210 CV y una batería de 73 kWh; el Motor Dual, con tracción total y 320 CV, que tiene una autonomía de 525 km y una batería de 73 kWh; mientras que el Long Range sorprende con una asombrosa autonomía de 700 km, 230 CV y un acumulador de 98 kWh. También incorpora nuevos ejes delanteros y traseros, que distribuyen la potencia en cuatro modos de conducción: Normal, Eco, Sport y 4WD.
Dispone de un sistema de refrigeración líquida que atiende a las baterías y su sistema de cargado, lo que ayuda a su elevada autonomía y un llenado ultrarrápido. De serie, las tres motorizaciones disponen de un cargador con una potencia de 11 kW y que soportan una carga de hasta 160 kW. Según la marca, en media hora puede pasar del 20 al 80 % de su contenido energético en batería de ion-Litio.
A pesar de su nuevo diseño fastback, el E-3008 tiene un maletero de 520 litros, una cifra más que respetable, al que no afecta al tamaño de sus acumuladores sea cual sea la versión. Se debe a la estructura y cotas de la plataforma STLA Medium, diseñada con este propósito en mente.
La melena del felino
La imagen del E-3008 muestra un toque deportivo, mientras que sus dimensiones compactas lo mantienen de forma clara en el segmento C, con 4,54 metros de longitud, 1,89 metros de ancho y 1,64 metros de alto.
El frontal ha sido rediseñado, y destaca el nuevo emblema de la marca. La firma luminosa rememora a la ya conocida de los tres zarpazos, y la parrilla es una evolución de la muy original y propia de la familia en iteraciones previas. Los estilizados faros Full LED vienen de serie en toda la gama, y entre ellos, la parrilla. Se convierte en un panel cerrado, como en casi todos los eléctricos, con el felino representativo de la marca mostrado con orgullo. Llaman la atención las llantas, con mucha superficie plana, que ayuda a lo aerodinámico.
El espíritu deportivo lo invade todo, con líneas muy suaves, sin estridencias, con una caída trasera que hereda spoiler del 408 y un diseño agradable. Apenas hay cromados, en una tendencia ecológica de la que parecen estar huyendo muchos fabricantes.
En el vientre del león
Una vez dentro del nuevo Peugeot E-3008, nos encontramos con un puesto de pilotaje muy actualizado. El i-Cockpit da un paso más grande de lo visto hasta ahora y en sus dos versiones, se encontrará algo parecido a lo conocido, aunque distinto y más completo. El más bajo de la gama, llamado Allure, dispondrá de dos pantallas de 10 pulgadas, dispuestas en la misma forma que la única, gigantesca, de 21 pulgadas y curvada, que tendrá el acabado GT.
El volante se ha rediseñado y parece algo más cómodo, con un número de botones que no recarga el conjunto. Contiene dos levas, al estilo Fórmula 1, que controlan el frenado regenerativo. En su entorno, la botonería habitual ha desaparecido en su mayoría, y su accionamiento y funciones pasan a ser dominadas por la pantalla táctil.
En la panoplia de ayudas a la conducción, el E-3008 viene cargadito. Dispone de control de crucero adaptativo con función, asistente de mantenimiento de carril, cambio de carril semiautomático, recomendación anticipada de velocidad. También tiene frenado automático de emergencia con aviso de colisión, aviso de salida de carril activo con corrección de salida de carril, alerta de atención del conductor, reconocimiento de las señales de tráfico y control de ángulo muerto de hasta unos sorprendentes 75 metros. Todo un arsenal de soluciones a problemas de a diario, que le conceden el título de poseedor de un Nivel 2 de conducción autónoma.
El Peugeot E-3008 estará disponible en los dos niveles de acabado citados: Allure y GT. Si el de acceso cuenta con un acabado de pintura monocolor, llantas de 19 pulgadas, cámara trasera, y sensores de estacionamiento traseros, faros y luces traseras LED, el GT tiene algún extra deseable. Se pagará más a cambio de la pintura bitono con techo negro, las llantas 20 pulgadas, sensores de estacionamiento delanteros, portón trasero motorizado y asientos delanteros y volante calefactados. Será más caro, pero también se hará más deseable.
Peugeot parece haberse adueñado del conocido mantra bíblico de «los últimos serán los primeros», y han decidido esperar al cierre del Salón de Munich para mostrar uno de los coches más rumoreados, espiados, y anunciados de los últimos años. Aún no tiene precio, y el asfalto europeo le espera para el primer trimestre del próximo año.
