Diccionario para entender Alemania en 2025
Dada la crisis actual y la importancia de Berlín en Europa conviene una explicación sobre los términos políticos alemanes

Una bandera alemana y otra de la Unión Europea ondean frente al Bundestag. | Liu Yang (Xinhua News)
El resultado de las elecciones de Alemania del pasado 23 de febrero, y más aún el resultado de la votación en el Bundestag (nuestro Congreso de los Diputados, para entendernos: la otra Cámara, el Senado, es el Bundesrat) el 18 de marzo sobre la reforma constitucional, ha dado lugar en España a muchos análisis y comentarios. Lógico, dado el momento que atraviesa Europa y el mundo y también el importantísimo papel de aquel país.
Lo que sucede es que con las traducciones literales hay que tener cuidado, porque, como se ha dicho mil veces (Traduttore, traditore), cada palabra, como cada nación y cada cultura, tiene su propia historia. De ahí que convenga ofrecer una explicación contextualizada de los términos de la lengua de Goethe que se están manejando entre nosotros.
Atomausstieg
Abandono de la energía nuclear. A propuesta de la Canciller Merkel –a la sazón, en coalición de Gobierno con el FDP, no con el SPD–, el Bundestag acordó por amplísima mayoría el 14 de marzo de 2011, sólo tres días después del accidente de Fukushima, en Japón, el cierre progresivo de las 17 centrales nucleares existentes, pasando a depender del suministro del gas barato de un país tan fiable y amigo como Rusia. Las tres últimas de ellas lo hicieron en abril de 2023, hace casi dos años.
Los únicos que votaron en contra fueron los Diputados de Die Linke, La Izquierda, pero no por un desacuerdo de fondo sino sólo por razones formales, al entender que la prohibición habría debido establecerse en la Constitución.
Autoland
El país del automóvil. Más exactamente, el de su industria de ese sector, de la que se suele afirmar que, si allí no hay límite de velocidad en las autopistas, es por lo poderoso que se muestra ese lobby. O, mejor dicho, se mostraba, porque (aparte de las secuelas del Abgas Skandal de Volkswagen de 2015, hace justo una década, en el que ahora no procede extenderse) con el vehículo eléctrico, China le ha comido todo el terreno o casi.
Brandmauer
Muro de fuego. Lo que entre nosotros, y con origen en el francés cordon sanitaire, es el cordón sanitario frente a la extrema derecha: no pactar con ellos.
Obviamente, es una medida fácil de adoptar cuando la tal extrema derecha –los apestados– tiene poca representatividad. En las elecciones de 23 de febrero de 2025, la AfD ha obtenido un 20,8% de los votos, aunque desigualmente repartidos entre el este y el oeste.
Bundesverfassungsgericht
Tribunal Constitucional Federal. Tiene su sede en la ciudad de Karlsruhe (literalmente, el descanso de Carlos).
El 15 de noviembre de 2023 dictó una sentencia nada complaciente con la mayoría parlamentaria del momento (la coalición de Scholz con Los Verdes y el FDP), que, una vez terminada la pandemia, y por tanto liberados 60.000 millones de euros, había entendido que ese dinero se podía dedicar a políticas climáticas, creándose el llamado Klima-und Transformationsfond (KTF). Y así pensaba seguirlo haciendo en el año siguiente, 2024. El Tribunal, mediante la conocida como KTF-Urteil, o Sentencia KTF, e invocando el principio de integridad presupuestaria, lo desautorizó, provocando un agujero en las cuentas que generó entre los socios una crisis que no se pudo resolver y que un año después terminó llevándosela por delante, dando lugar a las elecciones que se acaban de celebrar.
Die funf neue Länder des Bundes
Los cinco nuevos Länder de la Federación. Denominación actual y eufemística de la ex RDA. Los recientes resultados electorales acreditan que continúa siendo una sociedad –los Ossis– del todo diferente a la que entre 1949 y 1990 fue (y sigue siendo) la de la República de Bonn, cuando los Länder eran sólo 11: los del otro lado del antiguo muro tienen, pese a todo, nostalgia de lo que fue la Ost-Deutschand y de ahí que, en un juego de palabras, se haya acuñado la noción de Ostalgie.
Drang nach Osten
Empuje hacia el este. Fue un término gestado por los nacionalistas alemanes en el siglo XIX para explicar la necesidad de que su país se extendiera hacia oriente: el famoso Lebensraum o espacio vital.
Pero, vistas las cosas con ojos de hoy, también cabe explicar las cosas a la inversa: la dependencia –no sólo energética– que los alemanes tienen de lo que está situado a su estribor. También pudiera hablarse de rusofilia. Hay que piensa, como Antonio López Pina, que todo trae causa de que Alemania –como antes Prusia– carece de fronteras naturales por ese flanco, por lo que se siente, y le asisten razones objetivas e históricas para ello, muy insegura.
De referencia obligada en ese contexto es la región de Silesia, hoy Polonia, que en 1844 vivió la famosa revuelta de los tejedores, una suerte de anticipo de lo que cuatro años más tarde sería en toda Europa la gran revolución. En ese mismo 1844 acuñó Ferdinand Freiligrath la expresión Deutschland ist Hamlet, para recoger la idea de lo dubitativo del alma germánica con respecto a su geografía.
Ni que decir tiene que no se pueden recordar los hechos de 1844 sin la mención de la poesía de Heinrich Heine Die schlesischen Weber, todo un hito en la literatura del romanticismo.
Grosse Koalition (Groko)
Gran coalición. Gobierno de los dos partidos sistémicos (centristas, diríamos hoy), CDU/CSU y SPD, cuando ninguno de los dos alcanza, ni aun con apoyos de grupos pequeños, la mayoría en el Bundestag.
De los cuatro mandatos de Angela Merkel, la hubo en el primero (2005-2009) y en los dos últimos (2012-2017 y 2017-2021). Y ahora sucederá lo mismo con Merz, aunque la aritmética parlamentaria (208 escaños para la CDU/CSU y 120 para el SPD, es decir, una suma de 328 y ello sobre un total de 629) se muestra más ajustada. Y quizá la próxima vez la cosa estará aún más cruda, porque a los jóvenes les gustan los partidos de los extremos: AfD ha obtenido 152 mandatos y Die Linke otros 64.
En España la referencia más cercana se encuentra en los Gobiernos de Concentración nacional –varios, algunos de ellos presididos por Antonio Maura– del período 1917-1923, es decir, el final de la Restauración.
Inmigranten
Inmigrantes. En muchos casos, son personas de origen familiar extranjero, aunque en realidad hayan nacido en Alemania y que, por unas y otras razones, tienen nacionalidad alemana y por tanto derecho de sufragio para el Bundestag. Se calcula que son unos nueve millones, más de uno de ellos de estirpe turca, que son los nietos y bisnietos de los Gastarbeitern –literalmente, trabajadores invitados- de los años cincuenta y sesenta, cuando el milagro económico. Solían votar por el SPD, pero ahora hay de todo, incluso electores de AfD, pese a su islamofobia o precisamente por ella. Es algo parecido a lo que les ocurre a ciertos charnegos.
Kaputt
Roto. En inglés, Kaput, con una sola «t», es el nombre de un libro de Wolfgang Münchau, recientemente traducido al español, con el muy expresivo subtítulo El fin del milagro alemán, cuya causa explica, con tono de acusación, con la palabra «neomercantilismo». El capitalismo de amiguetes, para entendernos.
El tono del libro recuerda al que en España mostraron algunos escritores del 98, en particular Joaquín Costa con la denuncia de Oligarquía y caciquismo: lo que se llama despellejarse hasta el grado de la carne viva. La autoleyenda negra, si se quiere decir así. Como el discurso de Lord Salisbury en 1898, pero poniéndose uno en el lado de las naciones moribundas.
Quizás el relato de Münchau incurra en un exceso, porque, pese a todo, la economía alemana sigue siendo la tercera del mundo. Un respeto.
Luftbrücke
Puente aéreo. Se suele emplear para referirse a la cooperación entre los países occidentales que, entre el 26 de junio de 1948 y el 12 de mayo de 1949, en pleno régimen de ocupación, permitió superar el bloqueo al que los soviéticos sometieron a Berlín, el Berliner Blockade.
Nato Doppelbeschluss
Doble decisión de la OTAN. En 1979, la URSS, todavía en el mandato de Leonidas Breznev, colocó misiles SS-20 en el territorio de la RDA, en la parte más cercana a su frontera occidental: en concreto, junto al Land de Hesse, en el conocido como «pasillo de Fulda». El presidente de EE UU era a la sazón Jimmy Carter.
La OTAN, urgida por el Gobierno de la RFA, acordó, el 12 de diciembre, dos cosas. Una, la de arena: el establecimiento justo enfrente de otros tantos misiles Pershing. Pero, en seguida, la de cal: pedir a ambas superpotencias que negociaran una limitación de su arsenal nuclear.
El canciller era Helmut Schmidt, que duró en el cargo hasta octubre de 1982, pero cuyo partido, el SPD, sufrió por su izquierda la escisión de Die Grünen, Los Verdes, que desde entonces forman parte del Bundestag y que en la época de Schröder (1998-2005) formaron parte de la coalición de Gobierno. Y lo mismo con Scholz entre 2021 y 2025.
Shuldbremse
Freno a la deuda. Hasta ahora, el Art. 109 de la Ley Fundamental de Bonn establece en el apartado 3 que «los presupuestos de la Federación y de los Länder deben ser equilibrados, en principio, sin ingresos provenientes de créditos». Pero hay derogaciones o al menos matices: «La Federación y los Länder pueden prever regulaciones para la toma en consideración, de forma simétrica en expansión y recesión, de los efectos de un desarrollo coyuntural divergente de la situación normal, así como una regulación de excepción para los casos de catástrofes naturales o de situaciones extraordinarios de emergencia, que se sustraen al control del Estado y que gravan considerablemente la situación financiera estatal». El precepto es modificable –en el sentido de flexibilizarlo– por mayoría de dos tercios, lo que no iba a ser fácil de alcanzar en el Bundestag resultante de las recientes elecciones de 23 de febrero, porque harían falta el concurso de alguno de los partidos extremistas. De ahí que se haya hecho el 18 de marzo por la Cámara saliente, acordando, entre otras cosas, la creación de un fondo especial de 500.000 millones de Euros para inversiones, entre otras cosas en infraestructuras, de los que 100.000 se destinarán al Fondo de Transición Climática. Y ello a lo largo de 12 años.
Que la medida se haya adoptado después de las elecciones de 23 de febrero (o sea, por un Parlamento ya materialmente caducado) ha planteado un debate de legitimidad democrática, pero lo cierto es que el Art. 39.1 de la Ley Fundamental establece que el Bundestag anterior conserva la plenitud de sus poderes hasta la constitución formal del nuevo.
Lo establecido en ese Art. 109, antes y después de esa reforma, viene a equivaler, con todas las puntualizaciones que se quiera, al principio de estabilidad presupuestaria que, desde 2011, proclama en España el Art. 135 de la Constitución, aunque entre nosotros el concepto de integridad del Presupuesto sigue teniendo, aún hoy, y pese al taxativo Art. 134 («totalidad de los gastos e ingresos»), muchos requiebros e incluso auténticos boquetes.
Sonderweg
Camino especial. Se suele emplear por referencia a Alemania para explicar el hecho obvio de que llegó más tarde que otros países occidentales a la unidad nacional, a la proclamación de la libertad individual, a la democracia y sobre todo al parlamentarismo como forma de gobierno.
Equivale a la que para nosotros es (o fue) el Spain is different. Apenas habrá que recordar que se puede ser diferente, según quien lo mire y cómo se mire, para bien o para mal.
Stasiland
El país de la Stasi (la policía secreta de la Alemania comunista, particularmente activa sin embargo en la otra Alemania, la capitalista). Es así como se llama el fascinante libro de 2003 de Anna Funder, con el subtítulo Historias tras el muro de Berlín del que existe versión en nuestra lengua desde 2009. En 2019 se publicó una edición conmemorativa del 30 aniversario de la caída del muro.
Unhaltbarkeit
Insostenibilidad. Es como se rotula un libro de 2024 de Ingolfur Blühdorn (con el subtítulo Auf dem weg in eine andere Moderne, en el camino a otra época) que constituye todo un ajuste de cuentas con lo que él llama «el proyecto ecoemancipador» que comenzó en los años setenta en toda Europa –en España, como siempre, algo más tarde–. El autor sostiene que se trata sólo de una ilusión –una leyenda, llega a decir– porque la realidad es justo la contraria: esa ideología (en última instancia, con el decrecimiento no sólo como resultado inevitable sino incluso como objetivo confeso) lleva a resultados insostenibles.
Verlust
Pérdida. Con ese título (y debajo, Ein Grundproblem der Moderne, o sea, un gran problema contemporáneo) publicó Andreas Rechwitz, profesor de Sociología en Berlín, a finales de 2024 un libro, no traducido a nuestra lengua, (a diferencia de lo sucedido con su trabajo anterior, El fin de las ilusiones), donde describe las cosas que se están yendo (los glaciares que se derriten, los puestos de trabajo que desaparecen, el orden que se cae…) y la angustia que esos fenómenos produce en mucha gente.
Ni que decir tiene que es un análisis que puede extenderse a muchas sociedades que no son la alemana.
Verteidigung
Defensa. Es una partida presupuestaria llamada a ser cada vez más importante, aunque, a partir de acordarlo por el Bundestag el 18 de marzo, el concepto no se limita al armamento (Rüstung o Waffen), porque incluye también los gastos de protección civil, los servicios de inteligencia y el apoyo a los Estados atacados en contravención del orden internacional, como le ha sucedido a Ucrania.
Währungsunion
Unión monetaria. Los economistas tienen mucho escrito sobre la figura. La de 20 de junio de 1948 (o sea, antes de la Ley Fundamental de Bonn de 23 de abril de 1949) entre las tres zonas occidentales de ocupación, es decir, la americana, la inglesa y la francesa, es tenida como un gran éxito: ahí se creó el DM, el Deutsche Mark. La de 1990, con motivo de la reunificación, y acordando la paridad de valor de la moneda oriental, ha merecido por el contrario comentarios más desiguales, sobre todo a la vista de lo sucedido después.