El alcalde de Valencia, Joan Ribó, ha anunciado este jueves que las próximas fiestas de Fallas no se podrán celebrar en el mes de marzo y que habrá que esperar a «una situación más conveniente».
Lo más importante: el pasado martes se acordó la constitución de un fondo participado al 50 % por la Generalitat Valenciana, al 30 % por las diputaciones provinciales y al 20 % por los ayuntamientos para apoyar al sector de la fiesta.
Este fondo, según ha explicado a la SER, estaría destinado, entre otros, a compensar al sector de la hostelería, hospedaje, agencias de viaje, espectáculos, artistas falleros, carroceros, flores, indumentaristas u orfebres. De esta forma, preguntado por esta circunstancia, Ribó ha asegurado que al Ayuntamiento «le importa mucho que el mundo fallero siga con su actividad y por eso le quiere ayudar, porque es imprescindible para la continuidad de estas fiestas tan importantes para Valencia y su área metropolitana».
Los dirigentes de la Junta Central Fallera y miembros de las fallas del área metropolitana de Valencia tienen previsto mantener una reunión telemática mañana viernes a las 19:00 con responsables de la Conselleria de Sanidad para analizar el posible escenario al que se enfrenta la fiesta de las Fallas.
En 2020 las Fallas se suspendieron por la pandemia del coronavirus por sexta vez en su historia desde 1896. La frenaron la Guerra de Cuba, la Guerra Civil y unas duras protestas de los ciudadanos ante una abusiva tasa municipal. Ocho millones de euros en los 761 monumentos fueron los que se invirtieron el pasado año para celebrar la fiesta más popular de la Comunidad Valenciana y que estaba ya lista para recibir a un millón de personas.
La Comunidad ha sumado 4.810 contagios en las últimas 24 horas, la segunda cifra más alta de toda la pandemia por detrás de la registrada el pasado sábado, y 52 muertes más, doce de ellas de residentes. Los hospitales valencianos tienen a 2.848 personas ingresadas (109 más que el día anterior), lo que supone el mayor número hasta el momento, y de ellos 418 están en UCI (30 más), también el número más alto de la pandemia.
Con las 52 muertes de la última jornada, el total de defunciones desde el inicio de la pandemia en la Comunidad es de 3.465 personas, según la actualización de datos de la Conselleria de Sanidad del pasado miércoles.