ContexTO: salud mental, la pandemia invisible
THE OBJECTIVE organiza una mesa de debate con la que busca concienciar sobre una problemática que afecta a una de cada cuatro personas en el mundo
Una de cada cuatro personas tiene, ha tenido o tendrá un problema de salud mental a lo largo de su vida. La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que, en el año 2030, los problemas de salud mental serán la principal causa de discapacidad en el mundo. A pesar de su importancia, la salud mental es la pandemia invisible.
Algunas cifras que reflejan esta problemática son que el 6,7% de la población en España está afectada por la ansiedad, la misma cifra de personas con depresión. En ambos casos, además, es más del doble en mujeres que en hombres. Entre el 2,5 y el 3% de la población adulta tiene un trastorno mental grave, lo que en España supone más de un millón de personas.
En cuanto a los jóvenes, casi la mitad de los españoles de entre 15 y 29 años considera que ha tenido algún problema de salud mental. Más de la mitad de las personas con trastorno mental que necesitan tratamiento no lo reciben y un porcentaje significativo no recibe el adecuado. Ocho de cada 10 personas con problemas de salud mental no tienen empleo.
Elegir informar sobre la salud mental en los medios es fundamental: es el primer paso para que la población empiece a hablar de ello con naturalidad y acabar con el estigma social que lleva aparejada la enfermedad mental.
Conscientes de esto, en THE OBJECTIVE hemos organizado una mesa de debate bajo el título ‘Salud mental: la pandemia invisible’. En ella, contamos con la presencia de expertos de primer orden, como Luis Agüera, médico especialista en psiquiatría con más 30 años de experiencia y profesor en la Universidad Complutense. También nos acompañan Susana de Abajo, médico de familia que aplica la psiquiatría en su práctica clínica, Santiago Pérez, director de la Unidad de Psicología del HLA Montpellier, y la escritora y periodista Inés Martín Rodrigo, premiada con el Nadal este año por su novela Las formas del querer. La mesa la modera Rocío Gayarre y cuenta con la colaboración del grupo hospitalario HLA.
La salud mental en la atención primaria
La doctora Susana de Abajo, médico de familia, pide a sus compañeros ayuda, ya que «nosotros estamos llevando mucha patología de salud mental, mucha más para la que estamos realmente preparados. «Hemos aprendido a manejar fármacos antidepresivos, hemos aprendido a mezclar antidepresivos… hemos aprendido mucho los médicos de familia, porque no nos ha quedado otro remedio», explica.
«En la atención primaria hemos aprendido a manejar fármacos antidepresivos, hemos aprendido a mezclar antidepresivos»
El médico de la atención primaria es el primer contacto que tiene un paciente. «Somos los primeros a los que acude un paciente», resalta. «La patología leve, como en todas las áreas de la medicina, la llevamos nosotros», dice. Y, aunque a veces se les escape algo, «manejamos bastante bien los casos leves».
La importancia de la psicoterapia en todo el sistema sanitario
«La figura del psicólogo al principio llegó como un elefante en una cacharrería», asegura Santiago Pérez. Era una figura que podía «resultar hasta incómoda», comenta. Ahora se lleva a cabo una integración de su figura, algo que este psicólogo destaca, «precisamente porque la medicina ha abierto mucho campo. Ha dejado un espacio muy importante para que nosotros entremos, lo que hace que sepamos que la psicoterapia es fundamental e imprescindible en un tratamiento de salud mental».
«La psicoterapia es fundamental e imprescindible en un tratamiento de salud mental»
Incide en la importancia de la formación, así como de que muchos especialistas incorporen «de forma complementaria» la salud mental. La integración de los psicólogos es vital, especialmente, en la detección, explica.
Combatir el estigma
«La espina es todavía el estigma», asegura Luis Agüera, que resalta «la dificultad» que todavía existe para que «con naturalidad» consideremos que enfermedades como la depresión son problemas de salud «igual que una diabetes o el cáncer». «Hay enfermedades mentales que son mucho más graves que el cáncer», apunta.
«Hay enfermedades mentales que son mucho más graves que el cáncer»
Este estigma empieza a desaparecer. Agüera destaca «la investigación y la velocidad con la que en los últimos años se están investigando enfermedades, técnicas, fármacos y métodos de diagnóstico al ejercicio de la profesión». «En ese sentido, vamos a la par que el resto de la medicina y eso solo puede significar un mensaje de esperanza para las personas que están sufriendo», asevera.
El ejemplo de Inés Martín Rodrigo
La escritora y periodista Inés Martín Rodrigo acude a la mesa de debate para hablar de su propia experiencia con la salud mental. «Yo caí en una depresión muy profunda», explica. «En aquel momento nadie de mi entorno familiar o de mi círculo más cercano era consciente de aquel pozo sin fondo –en aquel momento– en el que yo estaba cayendo.
«Fui diagnosticada de un trastorno de la conducta alimentaria, anorexia, y eso hizo que no solo mi vida se trastocase por completo sino también la de mis familiares», cuenta, añadiendo que el hecho de vivir en un entorno rural les hizo tener que trasladarse a la ciudad ya que «en aquel lugar no había los medios suficientes y necesarios para poder abordar mi enfermedad».
«Mi enfermedad era algo que no se contaba, que avergonzaba al entorno»
Por el camino se encontró un ingreso de un año, un intento de suicidio, y –destaca– a la exposición de «todo el estigma que suponía el padecer una enfermedad de este tipo». «Era algo que no se contaba, era algo que avergonzaba al entorno», resalta. «Puedo entender que eso sucediera hace 25 años», asegura, «ya que no había una concienciación social como la que hay ahora». «A todos nos corresponde, a pacientes, profesionales y medios de comunicación, concienciar» para eliminar este estigma, concluye.
