Almendras vs nueces: este es el fruto seco más recomendado para el corazón
Ambos son ricos en minerales y nutrientes con multitud de beneficios para la salud
Los frutos secos son una parte muy importante de la pirámide nutricional, ya que son imprescindibles en la dieta mediterránea. El consumo de estas ha aumentado cada vez más, conforme crecía la concienciación de las personas por llevar una alimentación saludable. Los frutos secos son un alimento rico en nutrientes que es perfecto para esta rutina.
Este tipo de alimento contiene ácidos grasos insaturados, beneficiosos para la salud del corazón y para la de los huesos. No obstante, también tienen un lado negativo. Contienen una elevada cantidad de calorías, por lo que es importante saber cuánto hay que consumir y cuándo parar.
Estos son los beneficios de las nueces
Los griegos, en la Antigüedad, llamaban a las nueces Kara, que significa cabeza. Esto hacía referencia a su parecido con el cerebro humano. Los romanos, por otra parte, hablaban de este fruto seco como el alimento de los dioses. Además, el resto de los antiguos también asociaban las nueces con la salud y la buena memoria.
La época de las nueces comienza con su recogida a finales de septiembre y continúa hasta finales de octubre. Algunos de los nutrientes que contiene son:
- Ácidos grasos
- Omega 3
- Omega 6
- Proteína vegetal
- Fibra
- Magnesio
- Fósforo
- Vitamina B6
Contienen, por tanto, un aporte equilibrado de ácidos grasos esenciales y las grasas poliinsaturadas y monoinsaturadas. Esto aumenta el colesterol HDL, el bueno, y reduce la presión arterial. De esta forma, disminuye la formación de trombas, la aparición de la diabetes, la prevención de las arritmias y la muerte súbita. Además, los ácidos grasos como el omega 6 ayudan con los síntomas del síndrome premenstrual y la menopausia. El omega 3, por otra parte, sirve para mejorar la artritis reumatoide, la psoriasis y otras enfermedades inflamatorias.
Pero aparte de todos estos beneficios, este fruto seco también tiene una alta densidad calórica. Es por ello que, al igual que el resto de alimentos de su familia, hay que consumirlas con moderación. Para exprimir al máximo todas sus propiedades beneficiosas sirve con una porción de unos 30 gramos diarios. Esto equivaldría a, más o menos, 7 nueces.
Esos 30 gramos aportan unas 180 calorías de alto interés nutricional, pero esta cantidad es orientativa. En caso de haber tenido un gran gasto calórico durante la jornada, aumentar la ingesta no será perjudicial. Además, el alto contenido en fibra de este fruto seco hace que aporten una gran sensación de saciedad, lo que ayuda a reducir el apetito durante el resto del día. Esto es lo que las hace muy recomendadas en las dietas de pérdida de peso.
Las propiedades de las almendras
Las almendras son otro de los frutos secos más consumidos. Es posible encontrarlas en el mercado durante todo el año, ya sean empaquetadas, en latas, con cáscara, peladas, crudas o tostadas. Entre sus nutrientes están:
- Grasas insaturadas
- Magnesio
- Fibra
- Fósforo
- Riboflavina
- Vitamina E
Este fruto seco ayuda a reducir el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares, además de mejorar la salud intestinal. Esto es gracias a la presencia de propiedades probióticas y a su alto contenido en fibra. En cuanto a los minerales que contiene, destacan el fósforo y el magnesio.
Una ración de 200 gramos de almendras sin cáscaras, por ejemplo, aportará el 15% de la ingesta diaria recomendada de estos minerales, así como el 6% del hierro, potasio y calcio. La recomendación de los expertos es una ingesta de entre 10 y 20 porciones de almendras al día.
¿Qué fruto seco es mejor?
En este caso, combinar la ingesta de ambos es mejor que optar por solo uno de ellos. Tanto las almendras como las nueces tienen nutrientes muy ricos, algunos de los cuales coinciden entre sí, pero combinar los dos alimentos en el día a día permite el aporte de todos los beneficios. Por tanto, la mejor recomendación es que, en vez de elegir, se opte por las dos.