Dos especias que ayudan a controlar el colesterol malo
Más allá de los fármacos recetados por los médicos, los cambios en el estilo de vida también pueden ayudar a mantener el LDL en niveles saludables
El colesterol alto aumenta el riesgo de sufrir un accidente cardiovascular y, como señala la Fundación Española del Corazón, una dieta sana es imprescindible para poder regularlo. Es por ello que, más allá de los medicamentos recetados por los médicos, llevar a cabo cambios en el estilo de vida y buscar maneras naturales de regularlo también es una muy buena opción. Sobre todo teniendo en cuenta que más de la mitad de los españoles que tienen el colesterol alto es por culpa de los malos hábitos.
Para poder llevar a cabo estos cambios no es necesario dejarse llevar por la publicidad y comprar aquellas bebidas o alimentos que garantizan una reducción milagrosa de los niveles de colesterol. Suele ser suficiente con hacer ejercicio todos los días, llevar una dieta equilibrada, comer mucha verdura y añadir a los platos ciertos condimentos que ayuden con este objetivo.
Algo importante a tener en cuenta es que existen dos tipos de colesterol: uno bueno y uno malo. El primero, conocido como HDL, es el encargado de separar el colesterol de la sangre y enviarlo al hígado; al mismo tiempo, protege el corazón de enfermedades cardiovasculares. Tener los niveles altos de este colesterol no supone un problema.
Por otra parte, el LDL es el segundo tipo, el malo. Cuanto más altos sean sus niveles, mayor será la posibilidad de que se acumule en los vasos sanguíneos, lo que bloquea el flujo de la sangre y puede derivar en enfermedades cardiovasculares. El colesterol alto no provoca síntomas visibles, pero para conocer los niveles de ambos tipos solo hace falta un análisis de sangre.
Especias que ayudan con el colesterol
Cada vez son más los adultos jóvenes a los que les aparece el colesterol alto en los análisis de sangre. Además, también hay un gran número que desconoce este dato por no ir al médico de forma regular. Tratar la salud a tiempo puede evitar muchos problemas, como ataques al corazón, dolor de pecho y accidentes cerebrovasculares.
A la hora de regular el metabolismo, los remedios naturales pueden ser unos gran ayudantes. Hay dos especias muy comunes en las despensas españolas y que pueden beneficiar a la hora de regular el LDL, aunque muchas personas no lo saben. Hay que tener en cuenta que no son alimentos milagrosos, pero agregarlos a la dieta puede ayudar.
La primera de estas especias es el azafrán de hebra. Este sirve para condimentar todo tipo de guisos de carne y arroces y puede reducir los niveles de triglicéridos y colesterol en sangre gracias a su contenido en crocetina. Esta ayuda a tener mejores digestiones y en la mejora de la circulación, lo que previene la formación de depósitos de colesterol en las venas. Combinar el azafrán de hebra con una dieta equilibrada y ejercicio diario potencia este efecto.
Por otra parte, el laurel tiene unas concentraciones altas de vitamina A, vitamina C, tiamina, riboflavina, niacina, folato y vitamina B6. Además, también es rico en algunos minerales como el calcio, hierro, magnesio y fósforo; tiene también un sabor particular que lo hace perfecto para añadir a la hora de hervir arroz o en infusión. El laurel puede reducir los niveles de colesterol y glucosa en sangre, lo que lo hace perfecto no solo para contrarrestar el colesterol sino también para lidiar con la diabetes tipo II.
Los niveles de colesterol adecuados en una persona adulta
Los niveles de colesterol se miden en miligramos por decilitro (mg / dL). Los niveles saludables de colesterol son:
Personas de 19 años o menores:
- Colesterol total: menos de 170 mg/dL
- No-HD: menos de 120 mg/dL
- LDL: menos de 100 mg/dL
- HDL: más de 45 mg/dL
Hombres de 20 años o mayores:
- Colesterol total 125 a 200 mg/dL
- No-HDL Menos de 130 mg/dL
- LDL Menos de 100 mg/dL
- HDL 40 mg/dL o mayor
Mujeres de 20 años o mayores:
También hay que tener en cuenta los triglicéridos que, aunque no son un tipo de colesterol, sí que son parte del panel de lipoproteínas (nombre de la prueba para medir los niveles de colesterol). El nivel normal de triglicéridos es menor a 150 mg/dL. En caso de tenerlos en el límite alto (150-199 mg / dL) o directamente altos (200 mg / dL o más) es posible que sea necesario un tratamiento.