Los dos niños acusados de matar a su madre en Castro Urdiales intentaron simular un secuestro
La víctima estaba en el interior de un coche, amordazada, con heridas y una bolsa de basura cubriéndole la cabeza
Dos guardias civiles ante un vehículo del cuerpo. | EP
Los dos niños de 13 y 16 años detenidos esta madrugada por matar a su madre en Castro Urdiales intentaron simular un secuestro en su vivienda para despistar a la Guardia Civil, según señalan fuentes de la investigación a THE OBJECTIVE. Fue la abuela materna de los menores quien a las 21:00 horas del pasado miércoles dio aviso a los agentes del Instituto Armado de que se estaba produciendo un supuesto secuestro en la vivienda familiar, situada en la calle Monte Cerredo. Los dos menores no confesaron los presuntos hechos a esta última, sino que urdieron el plan para tratar de huir trasladándole otra versión de los hechos.
La víctima, Silvia L. G., de 48 años, se encontraba en el asiento trasero de un coche, en el garaje de la vivienda familiar, señalan estas fuentes. Estaba amordazada, tenía múltiples heridas y una bolsa de basura cubriéndole la cabeza. El vehículo estaba empotrado contra la pared del garaje de la casa. Además, los agentes encontraron todo revuelto en el interior del domicilio.
Tras comprobar que la mujer estaba fallecida y que los dos menores estaban desaparecidos, la Guardia Civil inició un dispositivo de búsqueda en toda la zona: estableció controles e incluso cerró vías de acceso y salida de Castro Urdiales. Finalmente, tras cinco horas de operativo, los agentes localizaron, en primer lugar, a uno de ellos en el acantilado del parque Cotolino de la localidad y a otro, que salió huyendo, en un bosque, sobre las dos de la madrugada. Los dos menores se escondieron allí, llamaron a su abuela para advertirle de que «estaban secuestrados» y después apagaron sus teléfonos móviles.
La Guardia Civil descartó después el móvil del secuestro tras inspeccionar el lugar de los hechos y hablar con varios vecinos, quienes habían oido discutir a los dos menores con la madre poco antes de que se diese el aviso, aunque no existían denuncias previas de ningún tipo. Las primeras pesquisas apuntan que habría sido el mayor de los dos hermanos, ambos adoptados desde hace años en Rusia, el responsable del asesinato de su madre, y que el otro menor le habría ayudado posteriormente. La Guardia Civil sospecha que utilizaron un arma blanca para cometer el crimen.
Inimputable
El mayor, de 16 años, fue trasladado al cuartel de la Guardia Civil, mientras que su hermano, de solo 13, quedará a disposición de la Fiscalía de Menores, dado que es inimputable, es decir, no tiene responsabilidad penal. El padre adoptivo de los menores estaba trabajando cuando se produjeron los hechos, según informa un diario local.
La delegada del Gobierno en Cantabria, Eugenia Gómez de Diego, ha lamentado la muerte de la mujer y ha explicado que «las indagaciones realizadas por la investigación, llevada a cabo por la Guardia Civil de Cantabria, se centran en la posibilidad de que la autoría corresponda a uno de los hijos». Según ha precisado, uno de ellos es detenido, el segundo es inimputable y se ha dado cuenta a Fiscalía de Menores, que será quien determine el proceder con ambos.
