Kick, la plataforma que quiere alcanzar a Twitch: cuánto ofrece, su audiencia y quién hay detrás
Quiere atraer a los principales ‘streamers’ con promesas de grandes beneficios, pero las dudas sobre su rentabilidad y sus polémicos fundadores lo complican
El logo de la plataforma. | Kick
La plataforma de streaming de directos por excelencia, Twitch, tiene un nuevo rival. O al menos, eso intenta Kick, que quiere hacerle la competencia atrayendo a algunos de los streamers más famosos con formas de pago, en principio, más atractivas.
En los últimos días, esta nueva plataforma ha aparecido en las conversaciones de conocidos streamers, como Ibai Llanos y AuronPlay, pero todavía no parece haber despegado como le gustaría.
A primera vista, Kick parece prácticamente una copia de la plataforma morada, con el único cambio precisamente en el color, con el negro y el verde como principales en la pantalla. Además, también destaca el contenido patrocinado en la web, que está orientado a las apuestas y a temas de carácter sexual en muchos de los casos. Por lo demás, tiene la misma interfaz, categorías, chat, la forma de mostrar los canales recomendados y el buscador.
Algo que no sorprende si tenemos en cuenta que los fundadores de Kick son los mismos que los de Stake, una página web de apuestas deportivas, inversiones en criptomonedas y juegos de casino, entre otros productos.
Trainwreck y Adin Ross, principales promotores de Kick
Hasta que la aplicación no estuvo disponible en iOS, no se sabía cuál era la empresa que estaba detrás de Kick. Sin embargo, sí había dos caras muy visibles que se estaban encargando de promocionarla: los streamers Trainwreck y Adin Ross.
Tyler ‘Trainwreck’ Niknam es uno de los creadores de contenido que más ingresos ha obtenido en Twitch en los últimos meses, principalmente gracias a sus directos de apuestas. Una actividad que se ha visto afectada por la decisión de la plataforma de restringir notablemente los contenidos de apuestas y juegos de azar.
Así, desde la aparición de este posible rival, el streamer ha cargado duramente contra Twitch y se ha sumado a las filas de Kick, además de como creador de contenido, como consultor.
Por su parte, Adin Ross, otro de los streamers más populares, también ha anunciado recientemente su decisión de trasladar su contenido a Kick, convirtiéndose así en uno de sus mayores promotores. Aunque tampoco es que le haya quedado otra opción, ya que ha sido bloqueado de la plataforma morada tras verse envuelto en varias polémicas.
Entre otros, Adin Ross ha protagonizado momentos que le han llevado a recibir advertencias por su contenido como el intento de entrevista a Kanye West por sus declaraciones sobre el holocausto, la promoción de los productos de apuestas y juegos de azar de Stake tras mudarse a Canadá para poder evitar las leyes estadounidenses y declaraciones tránsfobas. Además, es conocido por su relación con Andrew Tate, que fue detenido a finales de 2022 por su presunta participación en un grupo criminal dedicado a la trata de personas.
Durante semanas se especuló con la vinculación de ambos streamers con la creación de Kick, y no fue hasta que la app estuvo disponible cuando se tuvo que hacer pública la empresa propietaria de la plataforma. Así, ya se conoce que la compañía detrás de este lanzamiento es Kick Streaming Pty Ltd, registrada en noviembre de 2022, cuyo único accionista es Easygo Entertainment, a la que pertenece Stake. Por tanto, al lanzarse la aplicación se comprobó que efectivamente eran los fundadores de la web de apuestas quienes estaban detrás de Kick.
¿Es rentable Kick?
El mayor atractivo para los creadores de contenido, al menos según sus defensores, es el modelo de pago a los creadores de contenido. El sistema, según afirman quienes han publicado sus ganancias, es de un 95/5, es decir, el streamer recibe el 95% de lo que se ingresa por las suscripciones, el 100% en el caso de las donaciones.
Unas cifras muy superiores a las que ofrece Twitch, que recibe el 50% de las suscripciones, aunque ofrece más porcentaje a algunos de sus creadores más famosos, que llegan a recibir hasta el 70% de estas ganancias. Con estos datos, la propia compañía dijo hace unos meses que era difícil ser rentable y, por tanto, recortará más aún las ganancias de sus streamers.
Por eso son precisamente estas elevadas cantidades que ofrece Kick las que han generado dudas entre los creadores de contenido, que dudan que la plataforma sea rentable puesto que, además de los bajos ingresos por sus directos, tendrá previsiblemente problemas para atraer anunciantes, que difícilmente querrán verse asociados a contenidos como apuestas e incluso cercanos a la pornografía.
Muchos temen que, cuando la empresa deje de invertir, sean los creadores de contenido quienes se vean afectados por la falta de rentabilidad y, si han abandonado Twitch, vean reducidos sus ingresos a largo plazo.
La audiencia, aún muy lejos de Twitch
Por el momento, Kick está muy lejos de su objetivo de destronar a Twitch. No solo no ha conseguido arrastrar a muchos creadores de contenido, a pesar de que algunos grandes nombres sí han hablado de esa posibilidad, como Amouranth o El Xokas, que han mostrado interés en esta nueva opción, sino que sus datos de audiencia se alejan todavía del líder indiscutible del sector.
Según las cifras del portal Kickstats, que muestra el número de espectadores en tiempo real, los picos más altos alcanzan unos 130.000 de media, sobre todo en la madrugada española, que es el horario de alta actividad en Estados Unidos, mientras que en el resto del día las cifras de usuarios pueden alcanzar en torno a los 30.000.
Aunque la web avisa de que no monitorea a todos los creadores de contenido y que, por tanto, debe tomarse como una estimación a la baja, Kick está muy alejada de los datos con los que quiere competir. Y es que en Twitch, 130.000 espectadores es algo que puede conseguir un solo streamer en su directo, con algunos de ellos, como Ibai, con récords de hasta tres millones.
Así, a pesar de que la plataforma ha dado mucho de qué hablar, todavía no está claro que pueda conseguir lo que otros como YouTube tampoco han logrado, alcanzar la popularidad de Twitch y reinar en el mundo del streaming.
