'Indian Predator': el asesino que hervía el cerebro de sus víctimas llega a Netflix
El servicio de ‘streaming’ ha estrenado ‘Indian Predator: The Diary of a Serial Killer’, en el que se relata el escabroso caso de un asesino en serie descubierto por azar
Imagen promocional de la serie. | Netflix
Los documentales sobre asesinos gozan de muy buena salud. Desde que se estrenó en 2015 Making a murderer, Netflix no ha parado de lanzar miniseries que se centran en casos retorcidos, que parecen sacados de una película serie B de terror. De hecho es tan grande la demanda, que el servicio de streaming está contando ahora otros crímenes de alto impacto que sucedieron en lugares poco conocidos para los occidentales como, por ejemplo, la India.
En el pasado mes de julio se estrenó ‘Indian Predator: Butcher of Delhi’, un repaso de los asesinatos de Chandrakant Jha, un hombre capaz de matar a un íntimo amigo o a un desconocido por discrepancias fútiles, como fumar o no ser vegetariano. Y, como lo declara el título, los descuartizaba y dejaba partes del cuerpo regados por Delhi.
Ahora, dos meses después del éxito de esa docu-serie, llega ‘Indian Predator: The Diary of a Serial Killer’, una suerte de continuación de la serie. La sinopsis dice lo siguiente: «Cuando un joven y querido periodista desaparece en Allahabad, toda la comunidad se une para descubrir la verdad. En el proceso, encuentran a un sospechoso poco probable: el marido de una política local de poca monta. Justo cuando la policía cree que el caso está cerrado, encuentran un diario que tiene una lista de 13 nombres junto con el del periodista muerto».
Si ya viste esta producción, seguro tienes algunas preguntas pendientes debido a que la narración no es muy fina para concretar algunas cosas. En las siguientes líneas vamos a repasar el caso para aclararlas y por lo tanto haremos spoilers. Así que si sigues leyendo, es bajo tu propio riesgo.
¿Quién era Raja Kolander?
Ram Niranjan nació en 1962, en Allahabad (o Prayagraj), Uttar Pradesh, India, en la comunidad indígena Kol. El nombre popular que adoptó es «Raja Kolander», que significa «El Rey de los Kols». Esto no es un detalle menor y luego explicaremos su asociación con los crímenes que cometió.
Kolander se casó con Phulan Devi, miembro electo de Zila Panchayat. Es padre de tres hijos, una mujer y dos varones. Sus tres hijos recibieron los nombres Adalat (tribunal), Zamanat (fianza) y Andolan (protesta), que son varios componentes del sistema más amplio de la comunidad. Trabajó como conductor y empleado en una planta de ordenanzas del Gobierno, antes de que se conocieran sus delitos.
El protagonista de este documental tenía un pasado criminal antes de ser descubierto. Antes de convertirse en un asesino en serie, Kolander lideraba una banda que robaba automóviles. Por eso la policía encuentra muchos papeles que se referían a los vehículos saqueados, en su casa. Además, de acuerdo con sus vecinos, era muy dado a ayudar a las personas, faceta que un exdetenido dice haberle visto en la cárcel.
Lo anterior explica por qué cometió varios asesinatos en un mismo sitio: su hogar. Le era fácil ganarse a la gente.
¿Cómo descubren que Kolander cometió más de un asesinato?
La vida criminal de Kolander había pasado desapercibida hasta que se denunció el secuestro y muerte del periodista Dhirendra Singh en diciembre de 2000. Como se muestra en el documental, la cabeza le fue cercenada al igual que los testículos. Debido a que Kolander usó el teléfono celular del comunicador social, las autoridades pudieron asociarlo con este hecho. Después de la confesión, se encontró un diario, en el que aparentemente estaban los nombres de otras víctimas.
Se cree que Kolander asesinó a 14 personas, pero solo se pudo comprobar que estuvo implicado directamente en dos muertes. Las autoridades aseguran, además, que el psicópata usaba parte de los cuerpos para rituales religiosos y canibalismo. Sin embargo, no pudieron probarlo.
Kolander, siempre según la policía, aseguró que guardaba calaveras como trofeos y que conversaba con ellas. Sin embargo, uno de los problemas que tuvo la policía de la India para comprobar los crímenes de Kolander es la cantidad de mentiras que el delincuente dice. No fue fácil separar el relato ficcional de los hechos. En un principio, el criminal asegura que le motivó la venganza porque Dhirendra Singh tenía una relación con su esposa. Después, afirmó que temía que el periodista estuviera tras su pista.
Esta última versión tiene cierta lógica, tomando en cuenta el pasado criminal de Kolander y que Dhirendra era conocido como un investigador acucioso. Sin embargo, después de cotejar las pruebas y los hechos, queda establecido que el asesino serial actuó simplemente por instinto.
Allegados y el propio Kolander ratificaron que existía una relación de amistad entre víctima y victimario, lo que explica que Dhirendra no se sintiera amenazado y terminara asesinado de un disparo en la parte trasera de la cabeza.
¿Qué tiene que ver la comunidad Kol en el crimen?
En el período colonial, la palabra «kol» adquirió una connotación peyorativa. Era sinónimo de lo salvaje, los miserables, los obreros de poca importancia. Pero realmente se trata de una tribu con presencia en Jharkhand, Bengala Occidental, Bihar, Assam, Uttar Pradesh y Madhya Pradesh, que emigró allí desde Chota Nagpur, en el centro de la India, hace unos cinco siglos.
Como se cuenta en la serie, la mayoría de personas de esta comunidad no tiene tierra y dependen de los productos del bosque para ganarse la vida. Están designados como casta registrada bajo el sistema de discriminación positiva de la India. Alrededor de un millón vive en Madhya Pradesh, mientras que otros cinco se radican en Uttar Pradesh.
Según los psicólogos y analistas, Kolander pudo haber desarrollado una profunda rabia hacia cualquier persona que le superara en ingresos económicos y estudios. Como decíamos más arriba, el nombre que adoptó, «Raja Kolander», significa «El Rey de los Kols». De alguna manera se creía un líder de su comunidad. Ese delirio le llevó no solo a actuar de manera criminal sino a realizar ritos religiosos alrededor de los cadáveres mutilados, difíciles de comprender para la sociedad, como hervir los sesos de sus víctimas y tomarse el caldo.
Kolander fue detenido el 18 de diciembre de 2000, después de más de diez años de investigaciones y trabas judiciales. Fue condenado a cadena perpetua conjuntamente con su cuñado Vakshraj Kol. Kolander y su familia alegan inocencia pero, como se ve en el documental, el asesino continúa en la cárcel.
