Miles de páginas inéditas de J. D. Salinger verán la luz en los próximos años
El hijo y albacea del autor de ‘El guardián entre el centeno’ visita España para promover la obra de su padre
Matt Salinger, hijo de J.D. Salinger. | Alianza Editorial
Hace 60 años que dio comienzo el así conocido como «apagón Salinger». Fue en 1963, coincidiendo con la publicación de Levantad, carpinteros, la viga del tejado / Seymour: una introducción (Alianza Editorial), el último de los libros que J.D. Salinger daría a imprenta. Desde ese momento y hasta la muerte del autor, en 2010, se produjo un manto de silencio en torno a la figura del autor y su escritura. Salinger optó por el silencio, renunciando a la publicación, la fama, las apariciones públicas y las relaciones con los medios de comunicación, viviendo recluido. Así, forjó su propia leyenda, la del escritor esquivo a los periodistas y la vida pública que, empero, siguió escribiendo sin parar.
De esta escritura inédita ha dado fe su hijo y albacea, Matt Salinger, en una rueda de prensa celebrada en Madrid este miércoles por la mañana en la sede de Grupo Anaya. Según Matt Salinger, hay miles de páginas escritas que el actor y productor estadounidense está pasando a limpio con la ayuda de un programa de procesamiento de voz. Entre las páginas las hay manuscritas y otras escritas con diferentes tipos de máquinas de escribir, lo que dificulta la transcripción. Así, Matt Salinger, está dedicado en cuerpo y alma a dicha tarea, siguiendo las indicaciones de su padre que le ordenó que incluso publicara «las verrugas», refiriéndose a lo feo que pueda tener también su escritura («aunque hay menos de esas que de páginas hermosas», ha matizado). No era, sin embargo, J.D. Salinger de la misma opinión en lo que respecta a sus relatos de juventud, por los que incluso llegó a litigar en los juzgados (para que no se publicaran).
En opinión de su hijo estos textos forman parte del corpus salingeriano, pero son «borradores, tentativas de juventud» en las que todavía no está el Salinger formado. Y, así, a pesar de Matt Salinger confiesa haber disfrutado leyéndolos, no serán incluidos en su obra completa en la que está trabajando desde hace ya unos cuantos años, ya que «mi deber como albacea es seguir la voluntad de mi padre y él nunca quiso que se publicaran, algunos le daban vergüenza y no sentía satisfecho de muchos de ellos». Sobre cuándo podremos ver ese material inédito, ha contado Matt Salinger que será en breve, que siguiendo el método en el que está ahora trabajando (la transcripción de voz) podría ser en un año y medio o en dos, aunque está buscando alguna herramienta que le permita acelerar el proceso.
Feliz por poder estar de visita en nuestro país (es la primera vez que viene a España, donde tendrá actos en Madrid y Barcelona, en librerías, pero también encuentros con escolares, lectores de la obra de su padre) se excusaba, sin embargo, diciendo que a pesar de que está encantado de poder promover la obra menos conocida de su padre en el ámbito del español (en particular los Nueve cuentos, de cuya publicación original se cumplen este año 70 años y de Levantad, carpinteros, la vida del tejado / Seymour: una introducción, de la que se cumplen 60 años) estos viajes le restan tiempo para dedicarlo a trabajar en la obra inédita de su padre. Preguntado sobre si su padre no sintió la tentación de publicar su obra inédita en vida, ha confesado Matt Salinger que sí, pero que al final diferentes circunstancias impidieron que así se hiciera.
Sorpresas
«Hay que tener en cuenta que mi padre siguió trabajando por un periodo de tiempo muy largo, y como nos pasa a todos, cambiamos, pero he de decir que en el material inédito vamos a encontrar a muchos Salingers, aunque todos en la misma línea, algo que ya sucede con los cuatro libros que ya están publicados», ha declarado Matt Salinger. A lo que ha añadido: «Mi padre, durante toda su vida se mantuvo fiel a su búsqueda: sobre al arte, la belleza, la amabilidad y un sentido del humor muy particular. Todo eso está en el material inédito. No obstante, ha precisado que «van a haber sorpresas para los académicos y también para los lectores que tengan interés. Y estoy pensando en lectores serios; quien busca el último bestseller, pues a lo mejor para esos no tanto»
Preguntado sobre la obra cumbre de su padre, El guardián entre el centeno, opina Matt Salinger que es una novela que puede parecer sencilla a simple vista, pero una vez te metes adentro «mi padre entreteje temas mucho más profundos y sofisticados». . J.D. Salinger participó en el «día D», el del desembarco de Normandía, el 6 de junio de 1944. Su hijo cuenta que su padre le contó parte de lo que vivió en sus años de guerra (y que tiene presencia destacada en su obra, en particular en el cuento «Un buen día para el pez plátano», incluido en Nueve cuentos), pero que, como todo veterano, tampoco hablaba mucho ello. «Si hoy estuviera él aquí diría, y lo sé porque me lo dijo en su día que aquello que vio y aprendió en la guerra lo único que hizo fue confirmar lo que ya creía sobre el ser humano. Mi padre ya sospechaba de esas atrocidades de las que es capaz el ser humano, de esa bancarrota moral, eso es lo que él diría».
Recordando la figura de su padre, más en tanto hombre y padre que escritor, ha contado Matt Salinger que éste siempre abogó por la individualidad. Recuerda el hijo del autor de El guardián entre el centeno que su padre siempre le decía que «más de dos personas ya son una multitud». Y esto mismo es aplicable a su relación con los medios de comunicación y las editoriales, pues para el escritor norteamericano la relación de la literatura habría de ser íntima entre el escritor y el lector. Afirma Matt Salinger que su padre detestaba los intermediarios, las interpretaciones de la obra que se hacen desde la crítica o el periodismo. A J.D. Salinger le interesaba «el lector privado», aquel que se emociona de manera directa con la lectura de una obra.
El escritor escribía así «para su lector privado», ha confesado su hijo; lector que el hijo de Salinger ha definido como «una persona solitaria e incomprendida o que siente una cierta infelicidad porque está inseguro y no sabe en qué dirección tiene que seguir». Para esos lectores solitarios, la editorial Alianza, que mantiene en su catálogo desde 1978 la obra de J.D. Salinger, compuesta por cuatro libros: El guardián entre el centeno, Franny y Zooey, Levantad, carpinteros, la viga del tejado / Seymour: una introducción y Nueve cuentos, reedita el estuche con la obra completa, que estaba descatalogado. Este pack, diseñado por Manuel Estrada (Premio Nacional de Diseño 2017) al igual que todas las cubiertas de todos los libros del autor, reúne las cuatro obras en formato bolsillo, todas ellas traducidas por Carmen Criado y revisadas nuevamente.
