Vodafone cierra su brecha de fibra rural tras firmar un acuerdo mayorista con Adamo
Este acuerdo confirma la hoja de ruta de Vodafone que en España ha optado por centrarse en el desarrollo del 5G y frenar su fibra óptica propia
Vodafone ha anunciado este jueves un nuevo acuerdo mayorista con Adamo para cerrar su brecha de fibra óptica rural y asegurarse su presencia en ciudades pequeñas y alejadas de las grandes urbes. A través de este pacto, la operadora británica accede a la fibra de la compañía en más de un millón de unidades inmobiliarias ya desplegadas, lo que le permitirá ofrecer fibra, servicios convergentes y de televisión en las zonas mencionadas.
El acuerdo facilitará a Vodafone la comercialización de sus servicios en zonas con alta demanda de conectividad y, por tanto, la eficiencia del despliegue y la optimización de la inversión para ambas compañías. Asimismo, Vodafone tendrá acceso a los futuros despliegues de las redes banda ancha fija ultrarrápida de Adamo cuyo objetivo es llegar hasta 3,2 millones de hogares en los próximos dos años.
Este acuerdo confirma la hoja de ruta de Vodafone que en España ha optado por centrarse en el despliegue de 5G y frenar sus desarrollos de fibra óptica propia. De esta manera, el pacto abre la puerta a que Vodafone siga buscando nuevos partners para seguir aumentando su huella, precisamente en zonas rurales.
Fibra de Vodafone
En la actualidad, la red de fibra de Vodafone alcanza a 27,6 millones de unidades inmobiliarias entre fibra propia y acuerdos mayoristas. La operadora tiene tres millones de clientes de internet de alta velocidad (incluyendo tecnología HFC y FTTH), no muy lejos de los 3,5 millones de Orange, su principal competidor en estos momentos.
Precisamente una de los principales retos de Vodafone de cara a la fusión de Orange con MásMóvil es reforzar su oferta de fibra óptica para poder complementarla con su apuesta de 5G. Vodafone tiene parte de su red con HFC, heredada de Ono, que es menos eficiente del FTTH, aunque carece del músculo financiero necesario para sustituirla completamente con recursos propios.
Es por ello que es muy importante que la operadora pueda cerrar acuerdos mayoristas con operadores externos que les permitan equiparar la cobertura de Orange y de Telefónica. Una situación que cobra más importancia de cara a la fuerza comercial e industrial que tendrá la primera si es que se confirma y se aprueba su fusión con MásMóvil.
Estrategia comercial
Este aumento de su huella de fibra a través de acuerdos se suma a su nueva estrategia comercial. La operadora prepara más cambios en su oferta comercial que le permitan ganar terreno a Orange y MásMóvil antes de que consumen su fusión. Según ha confirmado THE OBJECTIVE, la operadora de origen británico ultima una agresiva estrategia con precios más bajos que comenzará a desplegar en las próximas semanas para intentar arrebatar el máximo de clientes a estas dos operadoras.
En este contexto, la nueva estrategia de Vodafone atacará todos los segmentos, tanto el de bajo coste como el de mayor valor, con ofertas diferenciadas para su primera marca pero también para Lowi, la enseña que más clientes ha ganado en los últimos dos años.
Las fuentes consultadas por este diario indican que se podrían incluir descuentos directos sobre los paquetes convergentes y aumento de servicios en otros tramos. Los protagonistas en esta nueva estrategia volverán a ser el 5G y la segmentación de la televisión, con HBO Max como eje de sus ofertas.
Adamo y Telefónica
Esta nueva estrategia también podría abarcar el mercado de empresas, al que Vodafone confía una buena parte de su futuro crecimiento. La operadora quiere convertirse en una palanca de la digitalización de las pymes y mantener su peso en las administraciones públicas.
Por su parte, para Adamo este acuerdo con Vodafone viene a reforzar su estrategia mayorista, donde presta ya servicios de conectividad a través de su red FTTH a más de 200 operadores locales y los 4 principales operadores nacionales.
De hecho, desde octubre Telefónica tiene un acuerdo similar con Adamo, para usar su red de FTTH donde Movistar todavía no había sustituido el cobre. Este pacto permite que Movistar pueda comercializar su fibra en toda la red FTTH desplegada por Adamo a nivel nacional. En octubre de 2021 esta red contaba con 1,8 millones de hogares cubiertos, cantidad que según las previsiones se elevará a 3,2 millones en los próximos años.
La mayoría de estos hogares están en zonas rurales donde el despliegue sólo resulta rentable si está subvencionado. Los sucesivos planes PEBA, ahora llamados UNICO, en los que Adamo ha conseguido buena parte de los proyectos, han facilitado el despliegue. Para Telefónica por el momento ya es viable desplegar una red paralela y es preferible alquilar las que ya existen. Todo con el objetivo de apagar la vieja red de cobre en el plazo previsto, a finales de 2024.