Digi, Avatel y MásMóvil ganan 370.000 líneas en los primeros cuatro meses del año
Las tres operadoras sumaron 301.200 líneas móviles hasta el 31 de abril y otras 67.770 fijas asociadas a internet en el hogar
Jóvenes consultando sus móviles, en una imagen de archivo. | AGENCIAS
Digi, Avatel y MásMóvil cerraron los primeros cuatro meses del año ganando 370.000 líneas, sumando fijo y móvil, que le arrebataron fundamentalmente a Vodafone y Movistar. La guerra por el bajo valor sigue cebándose con las grandes operadoras en momentos en el que todas las telecos españolas comienzan a mover ficha para preparar el terreno tras la fusión entre Orange y MásMóvil, que creará un gigante capaz de discutir el histórico liderazgo a Telefónica.
Los datos a los que ha tenido acceso THE OBJECTIVE y que deben ser confirmados por la Comisión Nacional del Mercado de la Competencia (CNMC) indican que Digi es la compañía que más líneas ganó entre enero y abril de este año. La operadora de origen rumano sumó 160.000 líneas móviles y 39.500 fijas (asociadas a internet en el hogar) mediante el procedimiento de portabilidad que consiste en arrebatar clientes a los competidores.
El segundo en la lista es Avatel que sumó 89.500 nuevas líneas de móviles, aunque sus datos de fibra óptica siguen sin verse reflejados en las cifras a las que tienen acceso todas las operadoras. Avatel es el quinto operador de fibra óptica del país y líder en el segmento rural y se estima que tiene unas 500.000 líneas, sumando móviles y fibra.
Ofertas agresivas
Digi y Avatel son el mejor ejemplo de las operadoras de telecomunicaciones pequeñas que buscan hacerse un hueco en el mercado a base de agresivas ofertas comerciales. Digi utiliza la fibra de Telefónica lo que le permite invertir en promociones y en bajar los precios, en vez de pagar las redes de telecomunicaciones como hacen sus competidores.
El tercero en discordia es MásMóvil que sumó 51.700 líneas móviles y 22.100 fijas. MásMóvil, que ya el año pasado fue superado en líneas móviles por Digi, perdió fuelle estos primeros cuatro meses del año porque perdieron un contrato con el Gobierno vasco que hasta la fecha estaba en poder de Euskaltel.
Con todo, estas tres operadoras sumaron 301.200 líneas móviles hasta el 31 de abril y otras 67.770 fijas asociadas a internet en el hogar. En total, arrebataron mediante portabilidad más de 370.000 líneas en solo cuatro meses, un preludio de lo que puede pasar en el resto del año.
Orange resiste el golpe
Un crecimiento que se hizo fundamentalmente a costa de Telefónica y Vodafone, y en menor medida de Orange. La operadora líder se dejó 149.300 líneas móviles desde enero de este año y otras 61.400 en fijo. En total, tenemos más de 210.000 líneas perdidas en portabilidad en lo que va de 2022. La principal pérdida de líneas se produce en la marca Movistar.
Por su parte, Vodafone perdió 73.300 líneas móviles y otras 48.800 en fijo, más de 120.000 líneas perdidas. La operadora británica sigue ganando terreno con su segunda marca Lowi, por lo que, al igual que Telefónica, la mayor sangría de líneas se produce en su primera marca, más asociada al alto valor.
En el caso de Orange, su reciente apuesta por potenciar sus segundas marcas, Simyo o Jazztel, ha logrado frenar la pérdida de clientes y reducir los niveles de caídas de los últimos dos años. De esta manera, pese a que perdieron 91.000 líneas en móviles entre enero y abril de este año, lograron quedarse en positivo en líneas fijas con un crecimiento de 6.170.
Vodafone y Movistar mueven ficha
Conscientes de esta situación, tanto Movistar como Vodafone ultiman las estrategias para lanzarse a recuperar clientes con nuevas ofertas convergentes y una reestructuración de su propuesta comercial. El objetivo es lanzarse a competir con el nuevo porfolio en el segundo semestre del año para hacer frente, tanto al bajo coste como a la lucha por el cliente de más valor.
La portabilidad indica la cantidad de líneas que cada operadora arrebata o pierde frente a su competencia y, pese a que no es el único parámetro, es el que refleja con mayor fidelidad el comportamiento comercial de las compañías. A la portabilidad neta hay que sumar las altas de nuevas líneas que se realizan en el sector, aunque éstas generalmente van unidas a líneas adicionales que se contratan junto con ofertas convergentes, por lo que muchas de ellas no tienen un uso real.
