La crisis de los precios dispara el 19% los créditos con tarjetas para llegar a fin de mes
Los españoles se ven obligados a recurrir a los préstamos que se ofrecen con los plásticos, cuyo importe alcanza el volumen anterior a la pandemia
Los españoles se están viendo obligados a tirar de créditos a través de las tarjetas para llegar a fin de mes y afrontar el aumento del coste de la vida. Tan es así, que el volumen de los préstamos concedidos por el sector financiero con los plásticos ya crece en tasa interanual un 19%. El importe de estas operaciones alcanza así máximos desde enero de 2020, justo antes del inicio de la pandemia, al situarse en los 11.604 millones en agosto.
Esta subida, que se está acelerando en los últimos meses como consecuencia de la inflación de acuerdo con los datos del Banco de España, se está produciendo por la necesidad de las familias para afrontar todos sus gastos, según señalan fuentes del sector a THE OBJECTIVE. A los hogares no les está quedando más remedio que activar las líneas de crédito habilitadas en las denominadas ‘revolving’ a pesar de sus elevados tipos de interés. Las tasas que aplican los bancos son superiores al 18%.
Las transacciones con estos plásticos en tasa intermensual avanzó un 2%, incrementando así el ritmo de crecimiento que venían registrando y que ha llevado a distintas autoridades y asociaciones de consumidores a alertar sobre el endeudamiento a través de este sistema por su elevado precio. De hecho supera el doble de las tasas de un préstamo al consumo tradicional, que tras la escalada del euríbor ha sobrepasado el nivel del 8%, tras encarecerse un 13%..
Las tarjetas ‘revolving’ están siendo objeto de polémica desde hace más de dos años. A principios de 2020 el Tribunal Suprema declaró abusivos intereses superiores al 20%, que entonces los bancos cobraban por las líneas de préstamos asociadas a las mismas. Como consecuencia de este criterio judicial, las tasas bajaron por debajo de dicho umbral, las reclamaciones de los usuarios afectados comenzaron a crecer y su utilización descendió considerablemente. Un uso que se mermó también porque la sentencia coincidió con el inicio de la pandemia y, por ende, empezó a haber un mayor ahorro y un menor consumo por las restricciones de movilidad.
Nueva era dorada de las tarjetas ‘revolving’
Ahora, como consecuencia de la crisis de los precios, este segmento de actividad está viviendo una nueva época dorada a pesar su carestía. Es una de las vías abiertas que tienen los españoles para poder abordar sus gastos sin tener que acceder a otras alternativas mucho más costosos, como son los préstamos rápidos, cuyos tipos pueden llegar en algunos casos a ser del 4.000%.
La financiación con las tarjetas los ciudadanos pueden asumir así las facturas de la luz y el gas, que se han elevado considerablemente, la cesta de la compra, que también se ha incrementado considerablemente, y hasta, porqué no, la subida de las cuotas hipotecarias. Unas cuotas que, como consecuencia de un euríbor que está rompiendo todos los pronósticos, están sufriendo alzas de entre 120 y 200 euros al mes.
Las tarjetas ‘revolving’ ponen a disposición de los clientes un límite de crédito que puede devolverse a plazos con cuotas periódicas y que se renueva mensualmente, por lo que la deuda varía en función de los pagos establecidos y la utilización de las misma. Pero, a mayor uso mayor es la cuantía, ya que la amortización del principal se abona al final del periodo, elevando así el dinero a devolver.
El criterio marcado por la sentencia del Supremo, eso sí, está permitiendo que en los préstamos con tarjetas los tipos de interés no suban como en otro tipo de financiación. Los bancos han elevado en las hipotecas nuevas los los intereses medios hasta un 2,16%. Este precio representa un encarecimiento del 13% con respecto a julio y un 44% desde principios de año. Es, además, la tasa más elevada para los créditos para la adquisición de una vivienda desde marzo de 2020, mes en el que estalló la covid-19.
El Banco de España ha alertado ya que los tipos de interés reflejarán en los próximos meses un alza de precios, ante el continuo avance del euríbor como consecuencia de la política monetaria del BCE para abordar la inflación. Eso sí, el gobernador Pablo Hernández de Cos ha avanzado que el organismo monetario elevará hasta un máximo del 2,5% el precio oficial del dinero. En la actualidad se sitúa en el 1,25% tras los incrementos de julio y septiembre.
Una subida de tipos que todavía no está afectando a los créditos con tarjetas, pero que en el futuro podría cambiar, porque aunque el criterio de abuso está ligado a los tipos oficiales. Y por tanto, cuanto más suban éstos más margen tienen los bancos para elevar los intereses que cobran por los préstamos de los plásticos.