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Economía

Un aluvión de funcionarios 'boomers' recién jubilados dispara la factura de las pensiones

La nómina de los empleados públicos de Clases Pasivas jubilados supondrá en 2022 cerca de 3.400 millones más que hace cinco años

El ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones. José Luis Escrivá. | Europa Press

Los funcionarios incluidos en el Régimen de Clases Pasivas, que cuentan con la posibilidad de jubilarse a los 60 años acreditando 30 años de cotización -salvo excepciones-, llevan ya un quinquenio de ventaja a la hora de jubilarse y cobrar sus pensiones a los boomers del sector privado y su llegada al retiro se ha empezado a notar de forma importante en la factura de las pensiones, que además crece por las subidas vinculadas al Índice de Precios al Consumo (IPC) y los diferentes complementos.

Los datos del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, que capitanea José Luis Escrivá, ya evidencian una tendencia, que seguirá afianzándose y que se puede replicar en breve entre el Régimen General, en el que los primeros trabajadores de la generación del baby boom, que comienza en 1958, cumplirán en el próximo año 65, la edad legal para retirarse si logran acreditar 37 años y nueve meses en 2023.

Los funcionarios del ‘baby boom’ llegan a la jubilación

Así, la estadística oficial y actualizada que elabora la Seguridad Social y a la que ha tenido acceso THE OBJECTIVE muestra que durante los nueve primeros meses de 2022 la nómina de los funcionarios jubilados de Clases Pasivas, que mayoritariamente entraron en las administraciones en los 80 y los 90, supuso casi 9.674 millones de euros, 2.400 millones más que en ese mismo periodo en 2018.

La ministra de Hacienda y Función Pública, María Jesús Montero, y el ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, en una rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros. Fuente: Europa Press

En esa fecha fue en la empezaron a llegar a la edad de jubilación de los primeros boomers del sector público, con jubilaciones especialmente altas tras carreras de cotización sin interrupciones y con sueldos que subían año tras año, además de por las subidas relacionadas con el IPC, por las generadas por diferentes complementos y trienios que perciben.

Los funcionarios retirados se multiplican

En estos cinco años, los funcionarios retirados han pasado de 352.000 a 421.000, casi un 20% más, un porcentaje más que importante teniendo en cuenta los críticos 2020 y 2021 debido a las bajas en el sistema por la covid, que provocó un incremento de fallecimientos entre los colectivos de pensionistas.

El envejecimiento de la plantilla pública ya es más que patente en diversos organismos, como el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) y la Seguridad Social, que afrontan cada vez más gestiones relacionadas con las pensiones, subsidios y rentas. Cerca de un millón de efectivos de los 2,6 millones actuales tienen edades que oscilan entre 50 y 59 años. Las administraciones perderán hasta 2025 casi 331.000 efectivos tras llegar a la edad de jubilación y cerca de 900.000 en la próxima década, la mayoría funcionarios del baby boom

Extrapolando la evolución en los tres primeros trimestres del año 2022 y teniendo en cuenta que los últimos tres meses del año históricamente generan más altas de jubilación, muchas propiciadas por docentes que aguantan a septiembre y octubre para reclamar su retiro, 2022 podría acabar con una factura de 13.500 millones -solo jubilados civiles-, 3.400 millones más que en todo 2018. El incremento de la factura de las pensiones de jubilación de Clases Pasivas superará el 30% solo durante estos cinco años.

Reforma de pensiones de Escrivá

La reforma de las pensiones que ultima el ministro Escrivá afectará de lleno a los trabajadores del sector privado, que deberán cotizar más, se verán afectados por el incremento del periodo de cálculo y han visto cómo han aumentado las penalizaciones a los interesados en jubilarse antes de los 65 años. Los de Clases Pasivas han eludido, de momento, los efectos de la reforma.

6 comentarios
  1. alfaabril

    Una pena que el artículo sea inexacto. como siempre que se tratan temas jurídicos en la Prensa.
    Soy abogado especializado en laboral.
    1. Para comenzar opino que nadie debiera jubilarse antes de, al menos, 65 años. Sin duda.
    2. El artículo, deficiente. mezcla condiciones de jubilación de fucionarios del R.General con los de Derechos pasivos.
    3. No nombra que, para tener el 100 por 100 de la base reguladora hacen falta 35 años de cotización en D. Pasivos.
    4. Lo fundamental, que, a diferencia del Régimen General, la base reguladora en Derechos Pasivos NO depende del salario, ni del importe cotizado, sino que es una CANTIDAD FIJA, muy por debajo de lo que sería equivalente utlizando el cálculo del Régimen General .
    Cantidad de jubilación igual para TODOS los funcionarios dentro de cada grupo. Ejemplo; todos los administrativos lo mismo, todos los auxliares lo mismo.

  2. Toneo

    Cuando se le preguntó al ministro sobre ese auténtico privilegio y abuso de los funcionarios de clases pasivas, a los que mientras al común de los trabajadores se les aumentaba la edad de jubilación a esos aristócratas públicos se les mantenía seguir jubilándose a los 60 años con el 100% de la pensión y solo 30 años cotizados, esforzados trabajadores como docentes, jueces, inspectores de hacienda o policías, que además cobran las pensiones más altas en función de sus también sueldos más altos, frente a albañiles o camioneros que aún tendrían que seguir trabajando más allá incluso de los 65 años, el Ministro sin ruborizarse contestó, «no, a esos no se les sube la edad de jubilación porque tienene «derechos adquiridos…», toma ya, cuando el resto comenzó a cotizar incluia el derecho a jubilarse a los 65 años, pero claro, a la purria se le pueden quitar los derechos, a quienes no se les puede tocar los privilegios es a los funcionarios.

    Conozco a un profesor universitario, tiene seis horas de clase a la semana durante los seis meses que dura el curso lectivo, se jubila el mes que viene con 60 años, y la pensión máxima, mi tio albañil, seguirá subiend al andamio a cero grados ocho horas diarias once meses al mes hasta los 66 años

  3. MiguelAe

    Lo que no se informa en el artículo es que muchas de esas «ventajas» mencionadas en el artículo fueron contraprestaciones de los gobiernos a cambio de congelaciones salariales al gremio de funcionarios. Pasados los años, el salario no cobrado ya está perdido, pero las supuestas «ventajas» se están discutiendo continuadamente.
    El gobierno, al ser juez y parte, juega con dos barajas: una para ganar y otra para no perder.
    También debería mencionar el artículo que en la administración del estado, que es donde existe el régimen de clases pasivas, no se reponen la mayoría de las plazas. Además, desde 2012 ya no hay nuevas incorporaciones a clases pasivas,y los que entran cotizan en seguridad social. Por ejemplo, un funcionario de nuevo ingreso con 20 años cotizaría ininterrumpidamente a seguridad social 47 años.

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