Movistar, Orange y Vodafone pierden 65.000 líneas móviles antes de las subidas de precios
En noviembre Vodafone se dejó 34.000 líneas, Orange perdió 18.500 y Movistar perdió 12.100 altas. Las alzas de tarifas se producirán en enero
Noviembre fue otro mes muy complicado para la captación de clientes de las grandes operadoras de telecomunicaciones. Los datos a los que ha tenido acceso THE OBJECTIVE reflejan que Movistar, Orange y Vodafone se dejaron en conjunto 64.600 líneas de telefonía móvil mediante el procedimiento de portabilidad. Estas cifras, que deben ser confirmadas por la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), reflejan que las telecos tradicionales siguen sufriendo pese a que el mercado se ha enfriado y que las agresivas promociones parecen haberse tomado un respiro.
Unos datos que se conocen a las puertas de las subidas de precios que han confirmado Telefónica y Vodafone y que podría seguir Orange en el transcurso del próximo año. Los primeros subirán una media del 6,8% dependiendo del producto que tenga contratado el cliente y los segundos lo harán en línea con la inflación que cerró en torno al 7% el mes de noviembre. Por su parte, la operadora francesa no ha descartado estas subidas, pero hasta la fecha no ha hecho ninguna comunicación oficial. MásMóvil también incrementará los precios pero a menos del 20% de sus clientes.
En cualquier caso, las tres grandes operadoras siguen sufriendo para mantener clientes y son muy permeables a las ofertas agresivas de las pequeñas telecos. Esto puede generar una mayor pérdida de líneas móviles y fijas a partir de enero si la situación económica empeora y si es que -como ya ha contado este diario- Digi o Finetwork mejoran sus precios para aumentar la presión sobre las grandes intentando acelerar el ‘robo’ de clientes.
Líneas fijas de Movistar
El que más perdió en noviembre fue el grupo Vodafone con 34.000 líneas móviles menos de portabilidad neta, seguido de Orange que se dejó 18.500 líneas móviles y Movistar que perdió 12.100 altas. Estas cifras incluyen todas las marcas de estas compañías, que en el caso de los británicos también se consideran las altas de Lowi, en el de los franceses las de Simyo y Jazztel y en Telefónica se incluye también O2.
Por el contrario, el mes pasado las pequeñas compañías como Digi y Avatel, además de MásMóvil, fueron las que se llevaron casi íntegramente las líneas que perdieron Movistar, Orange y Vodafone. Entre las tres cerraron ganaron 64.800 clientes, de los que 39.800 fueron líneas móviles ganadas por Digi, 15.000 de Avatel y otras 10.000 se anotó MásMóvil. Esta última es la única de las grandes que resiste y mantiene el crecimiento aunque a un ritmo mucho menor que en años anteriores.
Este comportamiento también se ha trasladado a las líneas fijas durante noviembre. Las cifras a las que ha tenido acceso este diario indican que durante el mes pasado Movistar se dejó otras 44.300 líneas de portabilidad, mientras que Vodafone perdió otras 9.400. Las líneas fijas representan las altas de internet en el hogar que van asociadas a paquetes convergentes y a los clientes que pagan más por sus servicios.
Evolución de las portabilidades
En este mismo apartado, Orange ganó 17.400 líneas tras arrebatar a Movistar el contrato de Madrid y seguir computando la migración de estas líneas, aunque lo normal es que vuelva a cifras negativas tras este movimiento. Por otro lado, MásMóvil ganó 11.800 líneas fijas en noviembre y Digi se anotó otras 10.600.
Si consideramos que las mayores subidas de precio de Movistar y Vodafone están enfocadas a este segmento, el riesgo de una pérdida mayor de clientes es real a partir de enero cuando comiencen a hacerse efectivas estas alzas de precio. En la última década el usuario de servicios de telecomunicaciones ha demostrado que prefiere los bajos precios y que no es fiel a ninguna operadora de telecomunicaciones. Una tendencia que se ha contagiado en los dos últimos años a quienes contratan servicios convergentes con móvil y fibra.
De hecho, el de las telecomunicaciones es uno de los sectores que generan mayores cambios de compañía entre todos los servicios en España. Los datos de la Comisión Nacional de los Mercados de la Competencia (CNMC), indican que entre enero y junio de este año se produjeron 3,2 millones de portabilidades, una caída del 10%. Sin embargo, en agosto la caída se ralentizó hasta el 7% y en septiembre volvió a cifras equilibradas con el año pasado con 590.366 cambios de números móviles y 185.077 de números fijos.
La portabilidad refleja el número de líneas que cada compañía de telecomunicaciones arrebata -o pierde- frente a sus competidores y, pese a que no es el único parámetro que se considera en el sector, representa de manera más fiel el comportamiento comercial. A esta portabilidad neta hay que sumar las altas de nuevas líneas que se realizan en el sector, aunque estas generalmente van unidas a líneas adicionales que se contratan junto con productos convergentes.