Las constructoras: "Sánchez no entiende que las empresas se deslocalizan con un click»
Las constructoras denuncian estar al límite por la campaña de desprestigio contra las empresas por parte del Gobierno y por las cargas fiscales
El traslado de la sede social de Ferrovial a Países Bajos, previa aprobación de los accionistas en primavera, ha sido todo un terremoto en el mundo económico. «Es una decisión puramente interna de un monstruo como es Ferrovial que ha valorado lo que ocurre dentro de España y lo que ocurre fuera. Si fuera de España se defiende a la empresa y dentro se la ataca continuamente, pasan estas cosas», destacan a THE OBJECTIVE fuentes del sector constructor.
Es una decisión que «se veía venir», comentan estas mismas fuentes, debido a la deriva que está teniendo el Gobierno. Sin embargo, el descontento dentro del sector no se centra exclusivamente con este Ejecutivo. «Venimos diciendo hace muchos años que no se puede cargar la presión fiscal a las empresas mientras estamos en medio de una campaña de desprestigio», aseveran estas mismas fuentes, al tiempo que manifiestan que la inquietud y el descontento entre el sector es creciente.
«El Gobierno no comprende que ahora deslocalizar una empresa se hace con un solo click. Esto es la globalización», destacan estas mismas fuentes. Además, creen que la decisión tomada por un «gigante ‘marca España’ como es Ferrovial» podría ser solo el inicio del camino que sigan fondos de inversión, promotores inmobiliarios y otras constructoras. «La deslocalización va a ser enorme», prevén.
«En el sector se comenta que no se puede seguir así, atacando a los empresarios y con una presión tan alta», explican. Y este «riesgo e inseguridad jurídica de tener una norma cada día se elimina con un click de ordenador», añaden.
Poco peso de España en su balance
Esta reorganización, según alega Ferrovial, responde a la internacionalización creciente de la compañía, que tiene el mayor volumen de su actividad en el exterior. En 2022, el 82% de los ingresos y cerca del 96% del valor de los fondos propios del grupo proceden de su negocio internacional, al tiempo que más del 90% de los inversores institucionales son entidades internacionales. Una situación que se repite en el resto de principales constructoras y contratistas del país.
ACS y Acciona también tienen menos del 20% de su negocio en España. ACS apenas reconoce el 9% de sus ventas en España, mientras que la división de infraestructuras de Acciona suma el 19% de su negocio en nuestro país. Según los resultados presentados esta misma semana por la empresa presidida por José Manuel Entrecanales, la división de infraestructuras del grupo está en este momento particularmente presente en Australia y Sudeste Asiático, que ya suponen el 30% de su facturación.
De hecho, la principal contratación del año fue la adjudicación del túnel Western Harbour en Sídney (2.746 millones), «la mayor obra en la historia de Acciona», según explica la empresa. Por su parte, las ventas de construcción en ACS tuvieron un crecimiento del 21,5% frente al año anterior gracias a la buena evolución de las actividades tanto en Dragados como en Hochtief, así como por la revalorización del dólar americano.
Según los resultados publicados esta semana por la compañía presidida por Florentino Pérez, su actividad en Norteamérica tuvo unas ventas de 20.716 millones de euros, un 26,4% más que el año anterior (+12,8% ajustado por tipo de cambio), representando un 66% de las ventas. Mientras, las ventas en Asia Pacífico ascienden a 7.294 millones de euros, gracias al dinamismo del mercado australiano con un crecimiento del 18,5%. A pesar de tener también una fuerte presencia internacional, fuentes de ACS aseguran a este diario que «no está sobre la mesa» un movimiento como el de Ferrovial.
Malestar en el Gobierno
La más que posible marcha de la sede fiscal de Ferrovial fuera de España ha sentado como un jarro de agua fría en el Ejecutivo. La vicepresidenta del Gobierno, Nadia Calviño, ha trasladado al presidente ejecutivo y máximo accionista de Ferrovial, Rafael del Pino, su rechazo al plan de la multinacional. A través de una llamada, la titular de Asuntos Económicos ha reprochado la «falta de compromiso» de la empresa con un país al que «le debe todo».
Tal y como confirman fuentes del Ministerio consultadas por THE OBJECTIVE, Calviño habría mostrado su disconformidad con la decisión y estaría preparada para seguir de cerca las posibles implicaciones de lo que ha considerado como una medida «errónea» por parte de la compañía. Por su parte, el titular de agricultura, Luis Planas, ha pedido a la compañía que aclare su continuidad o no en España.