La UE se compromete a incrementar hasta el 30% los controles a las naranjas de Egipto
Así lo ha anunciado la organización del sector agrícola Unió Llauradora y Ramadera después de presentar un nuevo informe ante la Comisión Europea
La Unión Europea se ha comprometido a aumentar el porcentaje de controles que se hacen a las naranjas procedentes de Egipto y pasar del 20% al 30%, según aseguran desde la Unió Llauradora i Ramadera, la organización agrícola que llevó esta reivindicación a la Comisión Europea a través de una eurodiputada del PSPV-PSOE.
Así, la Comisión Europea ha trasladado a la organización que en la próxima revisión del Reglamento (UE) 2019/1793, que establece el aumento de los controles oficiales y medidas de emergencia que regulan la entrada de determinadas mercancías procedentes de terceros países, como las naranjas egipcias, se incrementará en un 10% la cifra de estas inspecciones.
Dicho reglamento se revisa dos veces al año teniendo en cuenta los resultados de los controles de los estados miembros a los productos que se incluyen, además de otros datos como auditorías de la propia Comisión. Así, se espera que este cambio entre en vigor tras la próxima reunión del Comité Permanente de Plantas, Animales, Alimentos y Piensos (SCoPAFF, por sus siglas en inglés), que se espera para el 20 de junio.
Por tanto, no influirá en esta campaña, que está casi finalizada, sino que sus efectos se notarán ya en 2024, según explica a THE OBJECTIVE Carles Peris, secretario general de la Unió Llauradora i Ramadera.
«Esto nos va a permitir no tener un mayor control, hacer un seguimiento y ver si realmente Egipto modifica su sus formas de producción para que no le salten alertas de productos prohibidos en la Unión Europea por encima del límite máximo de residuos», dice Peris, que califica este aumento como «muy positivo» porque «podremos comprobar de una mejor forma si ellos están por la labor de hacerlo bien o realmente continúa habiendo detecciones altas».
Aumentan las alertas por productos prohibidos
Las organizaciones agrarias españolas llevan tiempo haciendo esta petición debido al creciente aumento de las alertas en frontera por frutas y verduras procedentes de países como Egipto o Turquía con productos prohibidos en la Unión Europea o con niveles superiores a los permitidos.
En concreto, entre los años 2020 y 2022 hubo 1.189 alertas por entradas en la Unión Europea de frutas y verduras procedentes de Turquía y Egipto con materias no autorizadas o por superar los límites máximos de otras sustancias sí permitidas, según los datos que recopiló Unión de Uniones de Agricultores y Ganaderos, como ya contamos en este diario.
Según los datos presentados por La Unió ante la Comisión Europea a finales de marzo, de cada 1.700 toneladas de frutas y hortalizas importadas desde Egipto se detecta una alerta sanitaria en la UE. «Teniendo en cuenta que se importan sobre 340.000 toneladas de ese país cada campaña, las cifras son relevantes y obligaban a las autoridades a actuar como así ha sido», dijo Carles Peris tras el encuentro en Bruselas, a donde viajó en marzo para presentar un informe técnico, a través de la eurodiputada Inmaculada Rodríguez-Piñero, sobre las sustancias detectadas en estas frutas y hortalizas.
Turquía se queda fuera del aumento de controles
Aunque desde la Unió celebran que la Comisión Europea por fin haya escuchado sus peticiones, después de varias respuestas que en otras conversaciones con este periódico han calificado de «decepcionantes«, el secretario general reconoce que tienen un sentimiento agridulce debido a que Turquía se ha quedado fuera de esta medida.
Un país que no solo está teniendo un creciente número de alertas, con 1.072 en los últimos tres años, en comparación de las 424 de Egipto en 2021, según los datos de Unión de Uniones de Agricultores y Ganaderos obtenidos de los Sistemas europeos de Alerta Rápida para Alimentos y Piensos (Rasff), sino que también ha ganado cuota de mercado en España.
«Tenemos la doble cara de la moneda, una en positivo y otra en negativo. Al final ves que Europa a la hora de tomar decisiones no solo se basa en los informes y lo que realmente es justo, sino que también se basa un poco en la geopolítica», lamenta Peris, que explica que los datos sobre Turquía también se incluían en el informe presentado ante la Comisión Europea.
«Con Turquía era realmente escandaloso el número de detecciones que había en frontera, de naranjas, pero también de pimientos y muchos otros productos, y no hemos visto que se haya modificado ningún reglamento, lo que nos hace pensar que se juega un poco con el carácter geopolítico de las relaciones y no con hacer justicia», añade.
Insiste, aun así, en que el compromiso anunciado por la Comisión Europea es «muy positivo» porque se podrá «comprobar de una mejor forma si Egipto está por la labor de hacerlo bien o si realmente continúa habiendo muchas detecciones». En caso de que sea esto último lo que ocurra, explica Peris, la siguiente petición del sector será la prohibición de importar naranjas de este país para evitar la entrada de productos con fitosanitarios prohibidos que suponen un riesgo para la salud y para la competencia del mercado español.