Óptica, segunda mano y gasolineras: los ‘súper’ diversifican su negocio en pleno auge del sector
La elevada competencia debido a la inflación está acentuando la apertura de nuevas líneas de negocio
Diversificarse o morir. El sector de los supermercados e hipermercados está experimentando una época de fuertes transformaciones. La pandemia consolidó al sector como un mercado resistente, lo que captó el interés de los inversores. Un interés que ha seguido creciendo finalizada la pandemia y en plena ola de inflación, pero que lleva consigo una fuerte competencia entre marcas. Esto está llevando a las diferentes enseñas, tanto de supermercados como de hipermercados, a agudizar el ingenio y diversificar, aún más, su modelo de negocio para seguir atrayendo clientes, y lo más complejo en momento de precios elevados, fidelizarlos.
La última gran cadena en apostar por la diversificación ha sido Alcampo con la apertura de su primera óptica dentro de uno de sus hipermercados. Concretamente, la filial española de Auchan ha puesto en marcha un servicio de óptica en su hipermercado de Pío XII (Madrid). Esta iniciativa se une a varias que tiene la filial de la francesa Auchan en España como servicio de ropa de segunda mano o tecnología reacondicionada.
Viajes, gasolineras o seguros
A pesar de que ahora se está haciendo con una mayor intensidad, la diversificación dentro del negocio de los supermercados no es nueva. El grupo Eroski cuenta, por ejemplo, con una red de 61 gasolineras situadas junto a hipermercados o supermercados de su marca. Intentan seguir en estos establecimientos una política comercial muy competitiva en precios. Es quizá una de las enseñas con más ‘oferta’ al margen de la alimentación. Cuenta también con un departamento de viajes que tiene además la categoría de ser una de las diez primeras agencias de viajes de España.
Concretamente, el grupo vasco cuenta con una red comercial de 166 agencias de viajes. Por otro lado, tiene establecimientos propios de ropa y equipamiento deportivo y también perfumería. Otro de los modelos favoritos de los ‘súper’ para diversificar su negocio pasa por los servicios financieros. Por ejemplo, en Carrefour cuentan con Carrefour Pass un servicio a través del cual los clientes y socios pueden solicitar préstamos.
Además, en los últimos años, con el creciente interés por la sostenibilidad, Carrefour y Alcampo se han lanzado a la venta de ropa de segunda mano con varios córners en sus establecimientos. Por otro lado, desde 2019 Alcampo trabaja en colaboración con la empresa española Reware en un proyecto de venta de productos reacondicionados de telefonía e informática de segunda mano, con el objetivo final de generar menos basura electrónica y reducir la contaminación y la explotación de nuevos recursos naturales. Estos productos se venden en 51 tiendas del grupo. En dos centros, además de vender estos productos, se recompran productos usados y se ofrece servicio de reparación.
‘Boom’ de la comida para llevar
Dentro de los segmentos de negocio que los ‘súper’ están potenciando con intensidad durante los últimos años destaca el de restauración. Por un lado, con la implementación en prácticamente todos los establecimientos de más espacio para los platos preparados y, por otro, con la creación de ‘bistró’ en los que «disfrutar de una experiencia diferente a la hora de hacer la compra», según apuntan fuentes del sector.
Una sección que está tomando especial relevancia en momentos como la Navidad. Pero no solo durante las fiestas, el segmento de platos preparados se ha convertido en uno de los negocios con más crecimiento y potencial en la mayoría de supermercados durante todo el año. Recientemente El Corte Inglés reconocía un aumento de las ventas de este servicio del 20% durante todo el 2023.
El consumidor español busca cada vez más la comodidad, y el auge de esta opción ha alcanzado un crecimiento superior al 12% en el consumo de comida fuera del hogar. El denominado ‘canal dinámico’ (hipermercados y supermercados) ya no es un desconocido para los españoles que comen fuera de casa, y estas navidades no van a ser una excepción. De momento, comportan una parte pequeña de los ingresos del sector pero «suponen un punto más de atractivo al establecimiento», reconocen a THE OBJECTIVE fuentes del sector.
Mercadona, por su parte, arrancó el ‘piloto’ de este servicio en 2018, concretamente en su supermercado de Burjassot (Valencia). La apuesta de Mercadona seguía así la tendencia del retail alimentario , que en España ha sido más lenta que en otros países. El propio presidente de la cadena, Juan Roig, reconoce que aún no ganan dinero con esta sección, pero se marcan el año que viene para que esto cambie.
«El ‘Listo para comer’ va muy bien. Aún le perdemos dinero, pero a partir de 2024 dejaremos de hacerlo. Tenemos que encontrar más proveedores de determinados productos que aún no tenemos», aseguró Roig en marzo durante la presentación de resultados de la compañía.