La SEPI protegerá sus empresas rentables para evitar que pasen a estar controladas por Escrivá
En el punto de mira de la nueva SETT están compañías estratégicas como Indra, Hispasat, Airbus y Telefónica
Belén Gualda, presidenta de la SEPI. | Europa Press
La Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) protegerá sus empresas rentables ante la arremetida de la Sociedad Estatal para la Transformación Tecnológica (SETT) impulsada por el ministro de Transformación Digital, José Luis Escrivá, según ha podido confirmar THE OBJECTIVE. La nueva entidad que fue aprobada por el Consejo de Ministros este martes –y que debería estar operativa en mayo– pretende agrupar todos los activos y participaciones de compañías públicas relacionadas con alta tecnología, telecomunicaciones y digitalización.
Este diario informó de que la nueva entidad tiene en el punto de mira a empresas claves como Indra, Hispasat, Airbus y Telefónica. El propio Escrivá reconoció que «tenía sentido» agrupar la operadora de telecomunicaciones bajo su paraguas, aunque advirtió que en principio no contarán con presupuesto para adquirir participaciones por lo que la compra de acciones caería del lado de la SEPI, mandatada por el Ministerio de Hacienda para llevar a cabo la operación.
La idea de la SETT es estar completamente en marcha antes del verano para que con el comienzo del nuevo curso empezar a agrupar empresas públicas digitales para engordar su cartera. Sin embargo, las fuentes consultadas por este diario indican que en la SEPI no ven con buenos ojos este trasvase de compañías públicas que se prepara en Transición Digital, por el negativo impacto que podría tener en sus cuentas.
Dividendos de la SEPI
La SEPI tiene dos fuentes de ingresos: mediante sus empresas participadas mayoritarias como Correos, Navantia o Tragsa; y a través de sus participaciones minoritarias, como Airbus, Red Eléctrica, Indra y en un futuro Telefónica. Las primeras suelen ser generalmente deficitarias y generan un gran agujero de deuda en la sociedad pública. Este diario publicó que Correos, la mayor compañía de la sociedad pública, perdió 125 millones en 2023, lo que con seguridad arrastrará a un nuevo desequilibrio al holding.
Por el contrario, las empresas minoritarias suelen reportar jugosos dividendos. En 2022, último dato homologado, Airbus reportó 174 millones por el 4,1% de participación de la SEPI, Red Eléctrica hizo lo propio con 133 millones por el 20%, Indra aportó 25 millones por el 28% de participación pública y el resto generó unas plusvalías de 23 millones.
De esta manera, las empresas controladas por la SEPI elevaron sus pérdidas un 64% hasta los 313 millones en 2022, unos resultados que la sociedad pública ha logrado maquillar históricamente incorporando los dividendos de las empresas que no gestiona. En este mismo año, lograron registrar números negros de 43,2 millones gracias a una inyección de 356 millones de estas minoritarias que se incorporan como ingresos financieros.
Competencias de la SETT
En este sentido, la SEPI es consciente de que si se produce una fuga de empresas tecnológicas a la nueva SETT entrarán con toda seguridad en pérdidas y por ello consideran vital mantener bajo su perímetro compañías como Airbus, que reportan una inyección a sus cuentas de al menos 174 millones al año. Algo similar pasaría con Telefónica, que entrega unos importantes dividendos al año y que suele registrar beneficios.
La tesis de la SEPI es que la SETT debería centrarse en los ejes en los que se ha posicionado. Tendrá bajo su paraguas el Perte Chip, con una dotación de 12.000 millones de euros para generar un ecosistema industrial de semiconductores y microelectrónica. Para ello tomará el control la Sociedad Estatal de Microelectrónica y Semiconductores (SEMyS), entidad hasta ahora encargada de «proveer a la industria de instrumentos de financiación que fortalezcan el sector de los chips».
La nueva sociedad pública integrará además el fondo NextTech, con 4.000 millones de euros para invertir en empresas con alto componente de innovación tecnológica en una etapa temprana de desarrollo, una suerte de aceleradora de empresas; o el fondo del Hub Audiovisual, con 1.700 millones de euros para las empresas de este sector.
20.000 millones
En principio, y con lo que ya hay disperso en diferentes administraciones y departamentos, la SETT tendrá una capacidad inversora de casi 20.000 millones de euros focalizados en tecnología de vanguardia. En esta línea, desde la SEPI creen que la incorporación de otras participaciones industriales debería materializarse en el medio y largo plazo y cuando se sopese el impacto y se gestionen con normalidad las inversiones anunciadas para esta nueva sociedad pública.
La clave entonces estará entre el pulso que pueda tener la SEPI, dependiente del Ministerio de Hacienda, y la nueva SETT, dependiente del Ministerio de Transformación Digital, de nueva creación, pero con un largo recorrido en el sector productivo digital si es que se materializan los 20.000 millones de inversión anunciados.
