BBVA regresará este año a Panamá con la apertura de una oficina para extranjeros ricos
La sucursal dependerá de su filial colombiana y estará disponible para fortunas no residentes en el país antes de julio
El presidente de BBVA, Carlos Torres, en la inauguración de una oficina para fortunas en Miami en 2024. | BBVA
BBVA ha decidido regresar a Panamá, un mercado que abandonó hace 11 años con la venta de su filial. El banco de origen vasco volverá a poner un pie en el país a través de una oficina para extranjeros ricos. El proyecto, según ha podido saber THE OBJECTIVE en fuentes internas de la entidad, pasa por abrir esta sucursal en el primer semestre del recién estrenado ejercicio, una vez obtenga todas las autorizaciones pertinentes.
Las mismas fuentes indican que este centro operativo dependerá directamente de la franquicia que tiene en Colombia, pero que ofrecerá sus servicios a las fortunas de cualquier país del mundo que no residan en Panamá. Con ello da un nuevo paso en su estrategia de potenciar este segmento de clientes, con patrimonios por encima de los 500.000 euros, y ampliar su diversificación geográfica en plena batalla por hacerse con el Sabadell.
Por el momento, la superintendencia financiera colombiana ya ha dado su aprobación. BBVA espera que pronto el regulador panameño otorgue su beneplácito para que la oficina inicie su actividad mediante una licencia internacional. El calendario que maneja es que antes del próximo verano pueda abrir sus puertas.
El plan del grupo presidido por Carlos Torres es poder atender tanto a personas físicas como jurídicas -entre ellas empresas e instituciones patrimoniales- con nuevas opciones de ahorro e inversión en dólares para que puedan ampliar sus alternativas para lograr mejores rendimientos. Entre el abanico de productos, BBVA lanzará en un primer momento cuentas y depósitos a plazo y, posteriormente, tarjetas. Además, permitirá hacer transferencias de efectivo de forma instantánea.
En 2024, BBVA ha reforzado su oferta para clientes con capacidad inversora, especialmente latinoamericanos. En marzo del ejercicio ahora finalizado anunció la apertura de Global Wealth Advisors, una oficina de asesoría de inversiones en Miami (Estados Unidos), para dar cobertura a las grandes fortunas del otro lado del Atlántico, completando sus servicios de banca privada de España y Suiza.
Asimismo, el pasado año lanzó una oferta pública de adquisición de acciones (opa) sobre el Sabadell con carácter hostil para ganar escala en nuestro país, además de haber puesto en marcha su desembarco en Alemania para este 2025 a través de una entidad puramente digital, como hiciera en 2021 en Italia.
Su vuelta a Panamá se limita a las grandes fortunas y llega 11 años después de que decidiera salir del país caribeño. A finales de 2013 vendió, precisamente a una multinacional colombiana, su filial allí, en un momento en que se estaba replegando del centro americano y algunos territorios del sur de dicho continente. El Sabadell, por su parte, dejó este mercado unos ejercicios antes, en 2006, cuando traspasó una división que había heredado del antiguo Atlántico -que adquirió en 2003-.
Panamá es aún considerado paraíso fiscal por parte del Parlamento Europeo, a pesar de que salió de la lista gris del Grupo de Acción Financiera Internacional, algo que ha llevado al Gobierno de dicho Estado a advertir de consecuencias negativas. El presidente José Raúl Mulino, que defiende la labor hecha para combatir el blanqueo de capitales, ha amenazado hace unos meses con vetos en Panamá a empresas del Viejo Continente si antes de mediados de 2025 no abandonaba esta clasificación por el perjuicio que ocasiona.
En el pasado este territorio se vio salpicado gravemente por los denominados ‘Papeles de Panamá‘, que contenían información reservada de propietarios de empresas fantasma con la ayuda de un despacho de abogados, empresas que intentaron evadir impuestos con la colaboración de multitud de bancos internacionales.
La apuesta de BBVA por los altos patrimonios se está produciendo en un momento en el que casi todas las entidades españolas están potenciando este segmento tanto en el mercado nacional como en otras latitudes en las que operan. Coincide con la necesidad de las fortunas de buscar alternativas a su dinero en plena ofensiva fiscal del Gobierno de Pedro Sánchez contra este colectivo.
Los continuos ataques y las subidas impositivas a las clases adineradas desde hace tiempo por parte de Moncloa han llevado a muchos iberoamericanos a buscar nuevo refugio al dinero trasladado a España, a las family offices y a las empresas de origen nacional. Una treintena de compañías se han trasladado al extranjero desde la crisis de Ferrovial, vivido en la primavera de 2023, tal y como publicó recientemente este periódico, y se prevé que el número siga en aumento. Entre los destinos de estas se encuentra Panamá.
