Sánchez descarta adelantar las elecciones y apuesta por Casado: «Es nuestro candidato»

El Gobierno no está haciendo números ni prevé modificar su hoja de ruta para la convocatoria de elecciones generales, prevista para diciembre de 2023 o enero de 2024, según adelantó THE OBJECTIVE. Fuentes de su entorno consultadas por este periódico descartan que Pedro Sánchez contemple un adelanto electoral para aprovechar la guerra interna en el PP y dar la puntilla a su líder, Pablo Casado.

El motivo no es otro que darle oxígeno a Casado frente a otras alternativas que, a juicio del Gobierno, tendrían más fuerza electoral respecto a un PP en caída libre en la mayoría de los sondeos, como el de Sigma Dos para el diario El Mundo, tras su enfrentamiento abierto contra la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso.

Por ello, la estrategia del Ejecutivo es «no mentar a Ayuso» y dejar toda la ofensiva al líder del PSM, Juan Lobato, y a la delegada del Gobierno, Mercedes González, que serán el ticket electoral en Madrid. «Ayuso es una líder regional y no hay que darle más proyección que la que ostenta», explican desde el PSOE. Atrás quedó la estrategia de confrontar con Ayuso que ideó Iván Redondo y que tanto rédito electoral le dio a la política madrileña y que todos enmarcan en el «gran error» de la campaña para las elecciones del 4-M.

«A ver si aparece en la sesión de control…»

Sin embargo, a nivel nacional son conscientes de la necesidad de hacer equilibrismos y echarle «un capote a Casado». Y eso hará el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en la sesión de control al Gobierno de este miércoles en el Congreso evitando ‘hacer sangre’ al respecto y opinar sobre cuestiones internas del PP. En una declaración en Moncloa este lunes, Sánchez se limitó a solicitar «que se esclarezcan» las cuestiones relacionadas con la supuesta corrupción.

Según adelantan fuentes gubernamentales a THE OBJECTIVE, el presidente del Gobierno hará lo propio este miércoles en el Gobierno cuando sea preguntado «¿cuánto más está dispuesto a ceder ante sus socios para mantenerse en Moncloa?».

«A ver con qué cara aparece… O si aparece…», se preguntan los estrategas socialistas que deben preparar la línea argumental del presidente. Prometen ser condescendientes con Casado porque «cada minuto que pasa con él al frente, ganamos nosotros. Casado es nuestra garantía para seguir en Moncloa».

No habrá adelanto electoral

«Casado es nuestro candidato», proclaman sin pudor desde Moncloa conscientes de la conveniencia gubernamental en mantener débil a la segunda fuerza política para frenar su crecimiento potencial. Por ello, los socialistas seguirán alimentando a Vox pero no aDíaz Ayuso, a quien ven como «una rival fuerte» con más opciones que Casado de arrebatarle la victoria en 2023.

«En ningún caso nos planteamos convocar elecciones», sostienen desde Moncloa, donde mantienen su voluntad de convocar los comicios después de las presidencia de turno de la Unión Europea, en el segundo semestre de 2023, y con la previsible prórroga hasta enero de 2024 aprovechando el juramento de la princesa Leonor en las Cortes por su mayoría de edad.

Generales, después de las andaluzas

Pero también con el objetivo de disolver las Cortes después de haber celebrado elecciones andaluzas tras el verano de 2022 y municipales y autonómicas en mayo de 2023. La estrategia es que el PP «siga desangrándose» por su erosión interna, empezando por la convocatoria de las elecciones en Andalucía que, como pronto, podrían celebrarse en octubre de este año y como tarde en diciembre, descartando la opción de un adelanto.

Los socialistas son optimistas con esta convocatoria. Como adelantó este diario, fuentes gubernamentales confían en tener opciones para la convocatoria andaluza. «A este paso, recuperamos Andalucía», anticiparon fuentes gubernamentales frotándose las manos ante el previsible derrumbe de las expectativas del PP.