El personal laboral en el exterior continúa con la huelga pese al pacto de sindicatos con Albares
Los trabajadores desmienten que el conflicto se haya resuelto y aseguran que el acuerdo ha sido «unilateral» sin contar con los afectados
La huelga no está desconvocada. Esto ha sido una gestión de los sindicatos sin contar con nosotros». Fuentes del personal PLEX consultadas por THE OBJECTIVE se muestran así de tajantes tras el comunicado «unilateral» que los sindicatos CCOO, CSIF y UGT difundieron durante la tarde del jueves anunciando un pacto con el ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, José Manuel Albares, y el fin de la huelga indefinida.
Albares trasladó este jueves a representantes de los sindicatos una propuesta para una subida salarial de entre el 8 y el 10% para el personal laboral que trabaja en sus dependencias en ocho países, empezando por Reino Unido. Una negociación en la que no se tuvo en cuenta a los implicados, es decir, a los trabajadores de los consulados (Londres, Manchester y Edimburgo) y Embajada en el país británico que aseguran que se enteraron del contenido de dicha reunión por la prensa.
De esta forma, tras 40 días de huelga, lo que pide el personal laboral es una actualización salarial que subsane la gran pérdida de poder adquisitivo resultante de 13 años de congelación, equivalente al 27,5% inflación de acumulada en el período 2008 a 2021. Además, se quejan de que tras el Brexit, el Estado les ha dejado a merced de la seguridad social británica, en lugar de la española, como prevé la legislación europea.
Sin embargo, lo máximo que ofrece Exteriores, según el comunicado conjunto, es una horquilla del 8-10%. En cuanto a la posibilidad de optar al Régimen General de la Seguridad Social española, no hay mención. Por lo que para estos trabajadores en el extranjero «todo sigue igual, seguimos adelante con la huelga porque lo que se nos ofrece ya lo teníamos». No obstante, cuentan a THE OBJECTIVE que el acuerdo «está cerca» aunque no se esperan noticias definitivas al menos hasta la semana que viene.
40 días sin trámites consulares
Durante las últimas semanas, los consulados, que prestan habitualmente servicio a más de 176.000 españoles residentes en el país, han continuado su actividad en servicios mínimos, un hecho que está generando importantes retrasos en la solicitud de pasaportes, obtención de certificados o inscripciones de hechos en el Registro Civil Consular, trámites muy demandados por los españoles residentes en el extranjero. En concreto, más de 176.000 ciudadanos españoles residentes en Reino Unido se están viendo afectados por los retrasos de esta huelga.
Esta huelga agrava aún más la complicada situación del servicio exterior en Reino Unido, afectada por el impacto del Brexit y el aumento en el volumen de los trámites que los ciudadanos españoles han tenido que realizar durante los últimos meses. Según los últimos datos publicados a fecha 1 de enero de 2022 por el INE, Reino Unido es el país del mundo donde más crece la emigración española.
Por su parte, los trabajadores de los Consulados y la Embajada de España en Reino Unido han denunciado a través de una petición al Parlamento Europeo la extrema precariedad laboral en la que se encuentran y el incumplimiento de varios principios y derechos por parte de la Administración española. Los empleados reclaman, además, que se respete la legislación europea aplicable a los empleados públicos tras el Brexit. Entre otros, el colectivo demanda a la Administración española que respete la igualdad salarial y que ponga fin a la discriminación en las condiciones de trabajo entre los diferentes trabajadores.
Los trabajadores han iniciado una recogida de firmas a través de la plataforma change.org para luchar por un servicio exterior de calidad para el Reino Unido y exigen al Ministerio de Exteriores «que actúe de manera urgente para solventar esta crisis que lleva ya años afectando a los ciudadanos, y que tomen medidas inmediatas para garantizar un servicio de calidad y un respeto a los derechos de la ciudadanía en el extranjero». Así mismo, denuncian sentirse «abandonados por la Administración Española a una situación de extrema precariedad, que imposibilita la constancia en el servicio, la profesionalización de las tareas y el desempeño eficiente de sus funciones».