Pulso entre Arrimadas y Marín por las listas andaluzas de Ciudadanos para el 19-J
La elección del número uno por la provincia de Huelva es el principal foco de tensión entre Cs Andalucía y la dirección nacional
Las elecciones siempre son motivo de tensiones internas en cualquier partido a la hora de elaborar las listas. Y Ciudadanos no es una excepción. Los comicios andaluces del 19-J están provocando un pulso -de incierto resultado- entre el equipo de Juan Marín y la dirección nacional de Inés Arrimadas. Sobre todo a la hora de decidir quién será el número uno por la provincia de Huelva, según reconocen fuentes naranjas a THE OBJECTIVE.
Marín quiere poner al frente de la lista a Julio Díaz, a quien ascendió en julio a portavoz adjunto en el Parlamento de Andalucía. Un movimiento que descabalgó al que ocupaba hasta entonces dicho puesto, Fran Carrillo, quien luego disputaría las primarias internas de diciembre contra el líder de Cs Andalucía.
Sin embargo, en Madrid no ven con buenos ojos a Díaz y desearían que la consejera de Igualdad, Rocío Ruiz, repitiese como cabeza de cartel por Huelva el 19-J. Todo ello, teniendo en cuenta que las encuestas, sean regionales o nacionales, vaticinan la desaparición de Ciudadanos en dicha provincia.
Un escenario poco atractivo que podría provocar que la consejera tire la toalla, según las citadas fuentes, y renuncie a ir en las listas como ha anunciado esta misma semana Sergio Romero, el que fuera portavoz de Marín hasta que también cayó en desgracia.
Choques en la cúpula de Ciudadanos Andalucía
Marín y Ruiz han tenido varios choques a lo largo de la legislatura recién concluida, sobre todo después de que el año pasado se filtrase un vídeo en el que la consejera afirmaba que su intención pasaba por cubrir los puestos territoriales de la Junta andaluza con gente de Ciudadanos en vez de funcionarios.
Previamente, Ruiz dejó claro que el partido «ni se rinde ni se vende», una alusión muy clara a aquellos que pretendían una Andalucía Suma con el PP como barruntó el vicepresidente de la Junta. Sin embargo, a la hora de la verdad, la dirigente onubense evitó enfrentarse en las primarias a Marín al ver que este último se había reconciliado con Arrimadas.
El resto de las listas están encarriladas, si bien habrá que convocar primarias en Málaga y Granada, dos provincias donde se supera el listón de 350 afiliados y todo puede pasar. Sobre todo entre los militantes malagueños pues la previsible candidata del aparato, Teresa Pardo, podría tener algún rival incómodo que atraiga a las bases.
En Sevilla también se está por encima de la cifra de afiliados que fijan los estatutos de Ciudadanos para convocar primarias, pero Marín quiere encabezar la lista en esta provincia y al haber ganado las primarias internas en diciembre, ningún afiliado le puede ahora arrebatar ese puesto.
Ciudadanos ha empezado la campaña con sobresaltos ante los malos augurios electorales que predicen los sondeos, donde únicamente parece garantizado un escaño por Sevilla. Cuatro de los 21 diputados del grupo parlamentario anunciaron el lunes por la tarde, nada más conocerse que Juanma Moreno Bonilla convocaba elecciones, que se daban de baja del partido.
Fueron los granadinos Raúl Fernández y María del Mar Sánchez, el cordobés Emiliano Pozuelo y el malagueño Javier Pareja. Todos ellos formaban parte del llamado sector crítico y en los últimos meses habían mostrado internamente sus diferencias con la dirección nacional o con las decisiones de Marín.
El grupo parlamentario de Ciudadanos en el Parlamento andaluz ha vivido el último año y medio fracturado por la mitad. Al menos una decena de los 21 representantes son críticos con Juan Marín, así que la formación naranja espera que los portazos de Fernández, Parera, Sánchez y Pozuelo sean los primeros de una importante lista.