El Frente Polisario acusa al Gobierno de alinearse con Rabat en los acuerdos de pesca
El pacto entre la UE y Marruecos expiró el 17 de julio y no puede renovarse hasta que se pronuncie la Justicia comunitaria
Luis Planas la pasada semana en una cumbre de ministros de Pesca de la UE en Vigo. | Javier Vázquez (Europa Press)
El Gobierno ha vuelto a soliviantar a los saharauis. El Frente Polisario acusa al ministro de Agricultura en funciones, Luis Planas, de alinearse con Marruecos en los acuerdos de pesca con la UE, que expiraron el pasado 17 de julio y que no pueden renovarse hasta que se pronuncie la Justicia comunitaria. El dirigente socialista, que fue embajador español en Rabat durante seis años, señaló el lunes en Bruselas que esperaba un fallo favorable y que la Comisión Europea retome las negociaciones cuanto antes.
La UE comenzó su cooperación en materia de pesca con Marruecos tras la adhesión de España en 1986. El primer acuerdo se suscribió dos años después. La cooperación se interrumpió en 1999 por las preocupaciones del reino alauí sobre el estado de sus poblaciones de peces y no se reanudó hasta 2006. No obstante, gran parte de las capturas comunitarias proceden de las aguas del Sáhara Occidental, uno de los 17 territorios no autónomos bajo supervisión de Naciones Unidas.
La cuestión del Sáhara ha perturbado la cooperación en materia de pesca. Marruecos lo considera parte de su territorio, una reivindicación que no reconoce las instituciones internacionales. El Tribunal de Justicia de la UE (TJUE) determinó en 2018 que los acuerdos eran válidos. Tres años después, tras un recurso del Frente Polisario, los anuló al considerar que violaba los derechos del pueblo saharaui, ya que no tenían en cuenta su opinión. La Justicia comunitaria debe emitir su veredicto a principios del próximo año.
Sentencia del TJUE
«En mi opinión, en cuanto se dicte sentencia, que espero y deseo nos dé la razón, podemos proseguir para que lo antes posible la Comisión negocie un acuerdo con Marruecos», afirmó Planas ante los ministros europeos del ramo. El que fuera embajador español en Rabat entre 2004 y 2010 sostiene que los servicios jurídicos comunitarios trabajan convencidos de que el TJUE determinará la legalidad de los acuerdos tras el recurso presentado por la Comisión Europea
El dirigente socialista ha reconocido que el calendario para lanzar negociaciones es «difícil de predecir» porque todo está a expensas de la sentencia del tribunal de Luxemburgo. No obstante, y gracias a sus contactos con las autoridades marroquíes, considera que existe «voluntad» por parte de Rabat de continuar con el acuerdo.
«Son declaraciones desafortunadas. Confunde deseo con realidad», afirma Abdulah Arabi, representante del Frente Polisario en España. En su opinión, las palabras de Planas demuestran «el enésimo intento de negar la realidad» cuando la jurisprudencia comunitaria consolidada reconoce que Marruecos y el Sáhara Occidental «son dos territorios distintos y separados».
Arabi insiste en que el TJUE ya dictaminó en septiembre de 2021 que toda actividad económica que se produzca en territorio saharaui debe contar con el consentimiento de su pueblo «expresado válida y libremente a través de su único y legítimo representante, el Frente Polisario». Cree que el hecho de restarle valor al movimiento de liberación y confiar en la revocación de las sentencias no implica «más que un anhelo del marco jurídico aplicable al territorio».
El giro de Sánchez
El Frente Polisario suspendió relaciones con España en abril del año pasado, tras el giro de Pedro Sánchez con la cuestión saharaui. Un mes antes, en marzo, las autoridades marroquíes hicieron pública una carta en la que el presidente del Gobierno español reconocía al rey Mohamed VI que su plan de autonomía para el Sáhara, planteado ante Naciones Unidas en 2007, constituía «la base más seria y realista» para lograr una solución al conflicto.
Sánchez abandonaba así la postura tradicional de España para alienarse con las posiciones de Marruecos. El anuncio enfadó a los socios del Ejecutivo, a la oposición y a buena parte de la ciudadanía, que no entendió los motivos que se escondían tras esa decisión. Meses después, Argelia también rompió relaciones con nuestro país.
La distancia persiste. El Frente Polisario ve en las palabras de Planas una nueva afrenta que demuestra la vinculación de este gobierno con el régimen alauí. «Van a buscar constantemente artimañas para satisfacer a Marruecos. Es triste que Estados de la UE sigan esas directrices y blanqueen a una dictadura», lamenta Arabi.
España logró 92 licencias de las 128 que se otorgaron con el acuerdo pesquero con Marruecos recién suspendido, pero solo 21 barcos solicitaron licencia para 2021, 2022 o 2023. Eso, unido a las condiciones que establece Bruselas, hace que las ayudas europeas solo lleguen a los armadores y tripulantes de 11 barcos. El ministro ha reiterado que el Gobierno habilitarán nuevas fórmulas para los buques que hayan agotado la protección.
