El Gobierno inicia los trámites para reconocer como víctima del terrorismo a Maya Villalobo
Interior está en contacto con la familia y ha activado el protocolo que marca la ley de protección de víctimas
La española muerta en Israel, Maya Villalobo. | TO
El Gobierno ha iniciado los trámites para reconocer a la española Maya Villalobo como víctima del terrorismo, según confirman a THE OBJECTIVE fuentes del Ministerio del Interior. La joven de 19 años falleció a causa del ataque que el grupo Hamás perpetró el pasado fin de semana contra la base militar de Nahal Oz, donde cursaba el servicio militar israelí obligatorio. Tras cuatro días desaparecida —al igual que Iván Illarrandi, otro español que todavía no ha sido localizado—, Exteriores confirmó el miércoles pasado el asesinato de Villalobo, en una nota en la que reiteró su «enérgica condena al ataque terrorista». La base israelí fue una de las que el grupo insurgente tomó tras cruzar la línea que separa Gaza de Israel.
La Dirección General de Apoyo a Víctimas del Terrorismo, dependiente del área dirigida por Grande-Marlaska, se puso en contacto con los familiares de la víctima, que tenía nacionalidad española e israelí, tras conocer la noticia de su muerte y, según sostienen fuentes de este departamento, ha iniciado las tareas de acompañamiento y asistencia a estos últimos, de acuerdo con el protocolo que establece la Ley de Reconocimiento y Protección Integral a las Víctimas del Terrorismo.
La norma, consultada por este diario, establece asistencia consular y diplomática por parte de la Administración a las víctimas españolas de un atentado terrorista. Del mismo modo, la Dirección General de Apoyo también presta asistencia psicológica y psiquiátrica a las víctimas, en este caso, los familiares de la joven sevillana, durante todo el tiempo que precisen, siempre siguiendo pautas médicas.
El ‘héroe del monopatín’
Se trata de un paso, explican fuentes de Interior, que viene precedido por el reconocimiento de otros derechos para los familiares de la víctima, como son, por ejemplo, las indemnizaciones económicas. El inicio de este proceso no tiene por qué ir ligado a una sentencia judicial que reconozca el derecho de las víctimas a ser resarcidos en concepto de responsabilidad civil por los hechos. Interior puede actuar de oficio y decretar la condición de víctima. De hecho, señalan estas mismas fuentes, el Gobierno ha utilizado esta vía en otras ocasiones para casos en el extranjero.
Uno de ellos fue Ignacio Echevarría, más conocido como el ‘héroe del monopatín’ tras el atentado yihadista en el centro de Londres en junio 2017. Este español, que llevaba varios años trabajando en la capital inglesa, saltó apresuradamente de su bicicleta para ayudar a una de las víctimas de otro ataque terrorista. Un acto heroico que finalmente le costó la vida. El atentado, perpetrado por tres miembros del Daesh, que atropellaron y apuñalaron más tarde a decenas de viandantes, acabó con la vida de ocho personas y dejó a heridas a otras 48.
Actos terroristas en el extranjero
El artículo 6 de la Ley de Reconocimiento y Protección Integral a las Víctimas del Terrorismo señala que el régimen de derechos y prestaciones se aplicará no solo cuando la acción terrorista se cometa en territorio español o bajo jurisdicción española, también sobre aquellas personas de nacionalidad española que sean objetivo de un atentado terrorista en el extranjero, como es el caso de Maya Villalobo, según reconocen desde el Ministerio del Interior.
Respecto a las indemnizaciones, el apartado cuarto señala que en el caso de que la víctima españolas tenga más de una nacionalidad, estas ayudas económicas tendrán «carácter subsidiario de las compensaciones que puedan ser reconocidas a la víctima por otro Estado del que sea nacional». No obstante, si la compensación o ayuda a percibir en el exterior fuera inferior a la establecida en España, el Gobierno español abonaría la diferencia. La norma contempla una indemnización de 250.000 euros por fallecimiento.
División en el Gobierno
El reconocimiento de Maya Villalobo como víctima del terrorismo podría agrandar aún más la brecha que ha generado en el Gobierno de coalición el conflicto palestino-israelí. Mientras en el ala socialista, el presidente del Ejecutivo, Pedro Sánchez, y el ministro de Exteriores, José Manuel Albares, condenaron «rotundamente el terrorismo» y se solidarizaron con las víctimas del «ataque terrorista contra Israel; desde Sumar, la formación que lidera Yolanda Díaz, calificaron el ataque de «crímenes de guerra» y evitaron condenar explícitamente los hechos. Una diferencia de posiciones que ha creado malestar en Moncloa.
Tras las criticas recibidas por la oposición y el descontento en el Gobierno, la vicepresidenta segunda verbalizó por primera vez el jueves su «condena alta y clara» contra el «apartheid israelí y la violencia contra la población civil viniese de donde viniese», eso sí, sin referirse a Hamás como un grupo terrorista. Desde Podemos, otra de las formaciones que integran Sumar, van más allá y buscan someter a votación en el Congreso de los Diputados una proposición no de ley (PNL) en la que piden «el cese de la ocupación» de Israel, sin hacer mención al grupo terrorista palestino ni a su ofensiva.
