El PP ve opciones de ser la segunda fuerza en Cataluña gracias a la vuelta del bipartidismo
El partido en la región señala el liderazgo de Feijóo y la alta abstención independentista como factores a su favor
Alberto Núñez Feijóo en Cataluña | Europa Press
El PP catalán ve opciones de ser la segunda fuerza en Cataluña en las elecciones generales del próximo 23 de julio. Después de su particular travesía en el desierto, ven ahora una conjunción de tres factores que le pueden propulsar en las urnas: el liderazgo de Alberto Núñez Feijóo, la vuelta al bipartidismo a escala nacional y una alta abstención en la región que, como se ha evidenciado en las municipales del 28 de mayo, ha perjudicado especialmente a los independentistas.
Fuentes del PP en Cataluña admiten a THE OBJECTIVE que «no tienen sondeos internos» que confirmen este escenario, pero van siguiendo los trackings que se publican y tienen la certidumbre de que lograrán un crecimiento notable respecto a los dos escaños que obtuvieron en las generales de 2019. En el barómetro del Centre d’Estudis d’Opinió (CEO), de la Generalitat de Cataluña, también se refleja una subida hasta los 6 u 8 escaños, aunque permanecen como cuarta fuerza, por detrás de PSC, ERC y Junts per Catalunya.
Las voces más optimistas dentro de la formación hablan de un triple empate en la segunda plaza entre ERC, Junts y PP. Más allá de si consiguen o no la segunda plaza en escaños, sostienen que el 23-J quedará constancia de que el PP volverá a ser la referencia del centroderecha constitucionalista en Cataluña.
Después de que Vox lograra el sorpasso al PP en el Parlamento autonómico, los populares catalanes respiran tranquilos: el partido verde ha dejado de ser una amenaza y la desaparición de Ciudadanos les ayuda a postularse como el voto útil antinacionalista. Como ejemplo de esta nueva coyuntura política destacan los resultados del 28 de mayo. En el Ayuntamiento de Barcelona, por ejemplo, PP obtuvo 4 concejales mientras que Vox solo obtuvo 2.
Crecimiento municipal del PP en votos
PP y Vox fueron los únicos partidos que crecieron en votos respecto a las municipales de 2019, aunque el PSC quedara finalmente como primera fuerza en la mayoría de municipios catalanes. Los populares sumaron 85.267 votos más mientras que Vox obtuvo 114.413 sufragios más respecto a las municipales anteriores.
En sentido contrario, PSC perdió 55.529 sufragios de unas elecciones a otras, Junts cayó en 36.419 votos. ERC fue quien sufrió el mayor descenso: perdiendo 302.274 apoyos en las urnas. Podemos se dejó 62.199 votos y la CUP otros 43.071.
De algún modo, la alta abstención ha contribuido a mejorar sus resultados. Pero, más allá de ello, a la conclusión a la que llegan desde el PP es que si en unos comicios como los municipales -que no son los más idóneos para las fuerzas antinacionalistas- han obtenido unos buenos resultados, cabe esperar unos resultados aun mejores en unas generales que, además, se han planteado entre un plebiscito entre Pedro Sánchez y Feijóo.
La ‘operación Cataluña’ de Feijóo
Como informó THE OBJECTIVE en noviembre de 2022, Feijóo preparó tras aterrizar en Génova una operación para recuperar el voto perdido en Cataluña. Y parece que ahora empieza a recoger sus frutos después de que varios dirigentes del PP catalán se desplazaran con frecuencia hasta la sede del PP para explicar en primera persona a Feijóo y a su equipo los principales escollos que tiene el partido para crecer en la región.
El líder popular quiere que su partido vuelva a ser una opción política atractiva, y ésta pasa por que su partido despliegue una batería de iniciativas en materia de fiscalidad que se desmarquen de las propuestas por Pedro Sánchez y sus socios.
Debido al sistema electoral, Cataluña reparte 48 escaños de los 350 diputados totales que conforman el Congreso de los Diputados y la consigna del líder gallego es que ni la autonomía catalana ni País Vasco pueden ser regiones que se le resistan.
