Podemos reúne a los socios de investidura para recuperar la reforma 'dura' de la Justicia
La nueva estrategia de la ‘coalición Frankenstein’ ha sido analizada en una reunión en la que han participado ERC, PNV, Bildu, PDdeCAT, JxCat, Más País y CUP
Comienzan los movimientos en aras de articular una fórmula que permita sortear la paralización de la reforma de la Justicia por parte del Tribunal Constitucional. Según anunció este martes el portavoz de Unidas Podemos, Pablo Echenique, el socio minoritario de la coalición convocó a primera hora a todos los socios Frankenstein del Ejecutivo para consensuar una acción conjunta de respuesta a la «grave injerencia del Constitucional». Una reunión que, según informan fuentes parlamentarias a THE OBJECTIVE, se celebró al mediodía con la participación de Podemos, ERC, PNV, Bildu, PDeCAT, JxCat, Más País y La Cup.
El grupo convocante, Podemos, no ha querido desvelar en ningún momento los participantes concretos en el encuentro por la necesidad de operar con discreción. Según explicó en rueda de prensa el portavoz Echenique : «Hemos querido convocar a la mayoría de los grupos para devolver a la democracia española a su cauce. Tengo que ser muy discreto respecto a las conversaciones».
Lo único que ha desvelado es que el PSOE no ha participado, aunque sí se ha transmitido la existencia de la reunión a primera hora de la mañana a su homólogo socialista, Patxi López, en la reunión de la Junta de Portavoces. Este, por su parte, también desveló públicamente esa conversación. Sin embargo, López manifestó su voluntad de actuar con serenidad y tranquilidad, «que es lo que necesita la ciudadanía», aunque al tiempo avanzó que «los grupos parlamentarios vamos a defender con firmeza la autonomía del poder legislativo». «Hay muchas alternativas, algunas más lógicas que otras… Haremos a través de la ley lo que nos corresponde», ha zanjado.
Según las fuentes consultadas, el PSOE descarta la posibilidad de apoyar manifestaciones en la calle, como reclaman algunos sectores de Podemos. Pero sí aboga por actuar a través de una iniciativa que permita desvincular el nombramiento de los magistrados del TC a iniciativa del CGPJ de los que elige el Gobierno, es decir, volcar el contenido de las enmiendas 61 y 61 al Código Penal que ha paralizado el Constitucional en una nueva proposición de Ley, como adelanta este martes THE OBJECTIVE.
Sin embargo, las intenciones de su socio minoritario de coalición son bien distintas. Según las fuentes parlamentarias consultadas, Podemos ha sondeado esta mañana a los aliados del Gobierno sobre la posibilidad de recuperar la llamada «reforma dura» de la Justicia, esto es, la rebaja de las mayorías para la elección de los vocales del Consejo General del Poder Judicial que criticó la Comisión Europea. Y es que el Gobierno retiró hace un año una enmienda igual a instancias a las autoridades comunitarias por sus similitudes con las reformas de la justicia de Hungría y Polonia.
La prioridad es rebajar las mayorías
Según Echenique, «además de reformar la ley para que se renueve el TC (las enmiendas al Código Penal), hay que reformar la ley para que se pueda desbloquear del CGPJ», recuperando la reforma dura de la Justicia que retiró el ministro de Justicia, Juan Carlos Campo, hace dos años. Y por ello, ha dado traslado a los grupos de la fórmula Martín Pallín: una vía de rebaja de las mayorías que pasaría de la mayoría constitucional de tres quintos a la mayoría absoluta, siempre y cuando se vea respaldada por la mitad de los grupos parlamentarios de la cámara baja, un total de cinco grupos.
Esta última condición «obligaría a garantizar la pluralidad democrática porque tendría que haber algún grupo del centro derecha», señaló el portavoz morado para quien «supone una mejora respecto a la propuesta inicial del PSOE». Además, consiste en el mismo procedimiento que se utiliza para la elección del Consejo de RTVE.
El portavoz parlamentario de Podemos asegura que percibe que «el PSOE es menos reticente en estos momentos que lo que lo era hace unas semanas para nombrar al poder judicial», fruto de unas conversaciones fluidas con Patxi López, con quien dice hablar por teléfono «varias veces al día» . En Moncloa niegan, por ahora, que se camine en dirección a la rebaja de las mayorías y se remiten a lo expresado por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en su declaración institucional en Moncloa.
Lo que ha paralizado el TC se hará por otra vía pero se hará. Nada más y nada menos. Sin embargo, el Gobierno no descarta alguna fórmula que permita el «desbloqueo» del que habló Sánchez, aunque esto supusiera un nuevo varapalo desde la Comisión Europea. PSOE y Podemos sí coinciden en que las peticiones de la Comisión Europea «no son vinculantes sino recomendaciones» y que lo sucedido estos días «tiene que ser motivo de preocupación en Bruselas porque el órgano de gobierno de los jueces está bloqueado desde hace cuatro años y las vías anteriores para reformarlo se hayan demostrado fallidas».