El PSOE prevé otra sangría andaluza: perderá seis capitales y cuatro diputaciones
Los socialistas confían en mantener Sevilla y Jaén pero descuentan la victoria del PP en Huelva, aunque serán «más difíciles» las diputaciones
El primero en alertar de ello fue el Instituto de estudios demoscópicos andaluz, el Centra. En enero de este año, el CIS andaluz pronosticaba la victoria del PP en todas las capitales de provincia andaluzas y el PSOE denostó el pronóstico por tratarse de un organismo dependiente de la Junta y dirigido por una mujer afín al coordinador general del PP, Elías Bendodo. Han pasado cuatro meses y este augurio ha terminado por calar en las perspectivas socialistas que ahora barajan esta posibilidad como uno de los escenarios «probables» el 28-M. Según fuentes socialistas consultadas por THE OBJECTIVE, se trata de una posibilidad no descartable, aunque su apuesta más realista pasa por perder seis de las ochos capitales de provincia andaluzas.
Fuentes socialistas confían en resistir y mantener el histórico bastión del PSOE en Sevilla que, según los trackings, arroja un empate técnico con una ligera ventaja en favor del actual alcalde del PSOE, Antonio Muñoz. El consenso socialista, desde Ferraz a San Vicente, es que se trata de un candidato «moderado y sensato» que ha hecho una buena gestión y una buena campaña. Aunque también hay consenso en que «todo está en un pañuelo» y Muñoz podría verse arrastrado por la continuidad de la sangría de votos socialistas, que se inició en las elecciones andaluzas del 19-J de 2022 y todavía no ha terminado».
Huelva y Jaén, los pulmones del socialismo, se vacían
En el PSOE descuentan la derrota en lugares tan simbólicos como Huelva, feudo tradicional del socialismo que en los anteriores comicios municipales arrojó un 45% para los socialistas. Un caso similar es el de Jaén, donde también rebasó el PSOE el 45% en 2019 y que también estaría en riesgo, aunque el PSOE confía en ganar por la mínima gracias a la fuerza que tiene allí el PSOE en los principales municipios. «Aquí tenemos alcaldes muy fuertes y municipios muy grandes. Eso puede hacer que resistamos», explica un dirigente andaluz incrédulo ante las malas perspectivas internas.
Es sintomático que en la balanza electoral no haya esta vez un lado de la victoria, sino uno de la resistencia y otro de la derrota. Y en este último, se cuentan las capitales en las que el PP «arrasa» con mayoría absoluta. Es el caso de Málaga, donde Paco De la Torre mejorará su resultado; pero también Almería, con un «fracaso estrepitoso» del PSOE; y Córdoba, donde el diputado Antonio Hurtado «no tiene ninguna opción de salir airoso».
Granada y Cádiz: capitales y diputaciones
Fuentes socialistas dan por hecho que el PP se hará también con Granada y Cádiz de forma holgada, lo cual permitirá abrir la puerta de entrada en las diputaciones provinciales en estas dos provincias, organismos clave en términos de poder territorial porque son los entes que riegan de dinero público a sus correspondientes municipios. Como adelantó este periódico, el PSOE ya descontaba en febrero perder la mitad de las seis diputaciones que actualmente presiden: Córdoba, Cádiz y Granada. Pero desde que el PSOE tocó a rebato en Andalucía ante el temor a seguir desintegrándose en Andalucía y perder estas diputaciones, el marcador de las posibles pérdidas ha seguido subiendo.
El debate de Doñana, tras el anuncio del presidente andaluz, Juan Manuel Moreno Bonilla, de regular los regadíos ilegales de la corona norte de la sierra de Doñana, ha mejorado las perspectivas del PP en la provincia. El PSOE da por hecho que «el PP está en buenas condiciones de ganar» en la capital aunque es «más difícil» hacerse con la diputación, si bien «no imposible». Algo parecido sucedería en Sevilla, donde «el PP está muy fuerte», aunque el premio de consolación sea que la victoria en el Ayuntamiento sea posible pero más improbable conquistar la diputación más poderosa de la región.
«Nos van a sacar 300.000 votos»
Los dirigentes socialistas más realistas hablan claro al respecto: «Podemos perder cinco diputaciones y seis capitales de provincia… pero pueden ser más». Y esto, traducido en votos, será «demoledor» para el PSOE y el líder regional, Juan Espadas: «El PP nos va a ganar aquí por 300.000 votos». De cumplirse este pronóstico, Andalucía seguiría siendo un problema para Pedro Sánchez en la medida en que lastre su victoria holgada en Cataluña, donde aspira a aventajar al PP en 600.000 votos en municipales.
Si extrapolamos la tendencia a las elecciones generales, donde Andalucía elige a 61 diputados nacionales, el resultado andaluz el 28-M consolidaría un cambio de ciclo en Andalucía que se comería los 25 diputados que Pedro Sánchez quiere lograr en Cataluña para apuntalar su victoria en diciembre del 2023. En el PSOE andaluz han dejado de lamerse las heridas y anticipan una nueva sangría de votos. Si nada cambia, volverán a sonar los tambores de guerra a finales de mayo.