La cena en la que Bolaños y López cocinaron los detalles de la investidura de Sánchez
El ministro es el favorito para relevar a Batet y el jefe de Gabinete del presidente suena como portavoz del PSOE
Los dos nombres de moda en el PSOE no descansan. Con la resaca electoral aún latente, el ministro de Presidencia, Félix Bolaños, y el jefe del Gabinete de la Presidencia del Gobierno, Óscar López, se citaron para cenar en un restaurante madrileño para cocinar los detalles de la investidura de Pedro Sánchez, puesto que los resultados del 23-J han abierto de nuevo las puertas del poder a los socialistas. Quedaron en La Musa, un local donde inspirarse ante los retos que se avecinan.
Bolaños es el favorito para relevar a Meritxell Batet en la presidencia del Congreso de los Diputados, como adelantó hace días THE OBJECTIVE. Muchos compañeros le ven fuera del futuro gobierno, pero le auguran un ascenso: convertirse en la tercera autoridad del Estado. Y López, que iba en el puesto número siete de la candidatura del PSOE por Madrid, tiene muchas papeletas para hacerse con la portavocía de los socialistas en la Cámara Baja.
La noche del 25 de julio, apenas 48 horas después del escrutinio, se les pudo ver cenando en la terraza de La Musa en plena plaza de la Paja en el distrito Centro de Madrid. En la velada participó una tercera persona que THE OBJECTIVE no ha podido identificar.
El papel de Bolaños
Sobre la mesa, de madera, había varios platos y algunas botellas de agua. Los testigos afirman que se fueron del local al filo de la medianoche, pero no pueden desentrañar la conversación. Eso sí, revelan que en algunos momentos bajaban el tono de voz.
Clientes habituales del restaurante situado en el denominado Madrid de los Austrias aseguran a THE OBJECTIVE que es frecuente encontrar a Bolaños y López entre sus parroquianos. «Les veo en ocasiones juntos, tomando el menú del día. A veces les acompañan otras personas», afirma un habitual del local.
Bolaños y López son dos de las personas más cercanas al presidente, a pesar de que Ferraz cargó la munición contra el jefe de Gabinete. Le culparon del «inexplicable» debate que protagonizó con el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo. Todo hace indicar que serán vitales en la nueva legislatura. De hecho, son los interlocutores del PSOE para cerrar un pacto en la Mesa del Congreso y conseguir la investidura de Sánchez.
El ministro de Presidencia incluso ha interrumpido sus vacaciones en Mojácar (Almería). El PSOE ha tirado del interlocutor de cabecera del presidente para ponerse al frente de las negociaciones con el objetivo de llegar a un acuerdo que garantice una mayoría progresista en el Congreso. El martes, su presidenta, Batet, anunció que no repetiría en esta legislatura tras cuatro años complejos.
La renuncia de Batet
Los socialistas consultados por este diario daban por descontando unos días antes de su decisión que la política catalana no seguiría al frente de la Cámara Baja. En su opinión, su figura podía generar «controversia» entre los partidos nacionalistas, claves para la investidura de Sánchez después de que el PP consiguiera el escaño 137 tras el recuento del voto extranjero.
La votación para elegir presidente del Congreso tendrá lugar el 17 de agosto. Se hace de manera secreta: los diputados depositan una papeleta en una urna por orden alfabético. Los aspirantes necesitan 176 votos, la mayoría absoluta. Si nadie consigue esa cifra se celebra una segunda ronda y sale elegido el candidato con más apoyos.