El constitucionalismo logra mayoría absoluta con 74 escaños y se impone al separatismo
Es la primera vez desde 1980 que los partidos que conforman este bloque suman más escaños que los independentistas
El constitucionalismo se impone en Cataluña por primera vez en 40 años. Los partidos que conforman este bloque -PSC, Comunes, Partido Popular, Vox y Ciudadanos- han ganado en votos y escaños a los independentistas en las elecciones celebradas este domingo. Con el 96,13% escrutado, la suma de estos partidos arroja un total de 1.611.015 votos y reúnen un porcentaje del 53,38% y un total de 74 escaños.
Por su parte, ERC, Junts, CUP y Aliança Catalana suman 1.309.438 votos, un 43,18% del apoyo y 61 escaños. Los resultados están en línea con la tendencia dibujada por la última encuesta del Centre d’Estudis d’Opinió (CEO) de la Generalitat, el llamado CIS catalán, que indicaba que el 50% de los catalanes está en contra de la independencia, mientras que el 42% se muestra a favor y un 8% afirma que no sabe o no respondió.
Para encontrar un resultado similar hay que remontarse a las primeras elecciones autonómicas de la democracia, en 1980, cuando las diferentes marcas socialistas que en ese momento concurrían y UCD sumaron un total de 78 diputados. Desde ese momento, el constitucionalismo nunca había sumado mayoría absoluta en Cataluña.
Por su parte, la ventaja del bloque constitucionalista frente al independentismo no se producía desde las elecciones de 2017, cuando ganó en votos y porcentaje (Ciudadanos fue el partido más votado), pero no en la suma de escaños, ya que se impuso la alianza de los independentistas.
En las elecciones de 2021, cuando los catalanes votaron en plena pandemia, la participación fue del 51,29% y la suma de PSC, Vox, En Comú Podem, Cs y PP alcanzó los 1.336.291 votos, lo que supuso un 47% del total de votos y se tradujo en una suma de 61 escaños. La suma de ERC, Junts per Catalunya, CUP y PDeCat arrojó una suma de 1.443.273 votos, un 57,77%, y, aunque los postconvergentes no lograron representación, el total de escaños fue de 70 diputados.
La participación hace tres años fue muy inferior a la de 2017, cuando se convocaron elecciones catalanas tras la aplicación del artículo 155 de la Constitución en respuesta al 1-O y acudió a votar el 70,01% de catalanes convocados. En esa ocasión, PSC, Cs, PP y Catalunya en Comú Podem sumaron 2.228.421 votos, el 48,91% y 65 escaños en total. El bloque independentista, formado por ERC, CUP y Junts contabilizó un total de 2.079.340 votos, es decir, un 47,5%, lo que equivalió a 70 escaños.
La fortaleza del bloque constitucionalista contrasta con la debilidad expresada por el independentismo. Las catalanas han arrojado una derrota casi sin parangón para el nacionalismo, que ha perdido por primera vez en 40 años la mayoría absoluta al obtener solo 61 escaños, quedándose a seis de este umbral. En concreto, los partidos que conforman este bloque han registrado su peor resultado en unos comicios autonómicos desde 1980, primera cita con las urnas en democracia, cuando sumaron 57 diputados (43 para la extinta CiU y 14 para ERC). Desde ese momento, las formaciones nacionalistas han conseguido mayoría absoluta siempre, estando su suelo en los 68 diputados conseguidos en 1999.
En la cita de este domingo, Junts ha recuperado la hegemonía del bloque gracias al empuje del expresident fugado Carles Puigdemont y ha sumado un total de 35 escaños, cuatro más que en los últimos comicios, seguido de ERC, que pierde 16 escaños y se queda en los 20. La CUP cosecha cuatro diputados, cinco menos que en las últimas autonómicas, y Aliança Catalana irrumpe en el Parlamento con dos sillones, con el 95,11% escrutado.