Dolores Delgado se presenta a fiscal de Memoria Histórica tras su reciente ascenso
García Ortiz adelanta el Consejo Fiscal tras el anuncio de elecciones para «no entorpecer» los trámites administrativos de la propuesta
Delgado en unas jornadas sobre Memoria Histórica en Catoira (Pontevedra). | Álvaro Ballesteros (Europa Press)
La Fiscalía General del Estado acelera para elegir fiscal de Memoria Histórica, una plaza recién creada a la que aspiran cuatro candidatos. La favorita es la exministra de Justicia Dolores Delgado, que ascendió a la máxima categoría de la carrera fiscal en septiembre. Meses antes dimitió como fiscal general alegando problemas de salud. Aunque en octubre debía reincorporarse a su plaza en la Audiencia Nacional, su sucesor en el cargo, Álvaro García Ortiz, la promovió a fiscal de Sala del Tribunal Supremo, lo que generó un gran descontento en el Ministerio Público.
García Ortiz ha adelantado al 8 de junio la reunión del Consejo Fiscal en la que se decidirá quien ocupa las nuevas plazas, entre ellas la de fiscal de sala de Derechos Humanos y Memoria Democrática, a la que aspira su antigua jefa en la Fiscalía, Dolores Delgado. El Pleno estaba previsto el día 19, pero se acordó anticiparlo pocas horas después del anuncio del adelanto electoral. Las fuentes precisan que, de esa manera, los trámites administrativos de las propuestas no se verán entorpecidos.
El pasado 11 de mayo el Boletín Oficial del Estado (BOE) publicó la nueva oferta de plazas para la carrera fiscal, un total de nueve, entre las que destacan dos de nueva creación: la de fiscales de sala de Derechos Humanos y Memoria Democrática y contra Delitos de Odio y Discriminación. Delgado ha presentado su candidatura para conseguir la plaza en la primera. Compite con Juan Calparsoro, Luis Ibáñez y Carlos Castresana, candidato español a fiscal jefe del Tribunal Penal Internacional en 2021.
La carrera de Delgado
La exministra es la favorita para hacerse con el puesto creado tras la entrada en vigor de la Ley de Memoria Democrática en octubre. En caso de que lo consiga, Delgado habrá completado en menos de un año una formidable carrera. En septiembre ascendió a la máxima categoría pese a no contar con el respaldo del Consejo Fiscal, un órgano meramente consultivo.
García Ortiz, que la sustituyó al frente de la Fiscalía General del Estado, la promocionó a fiscal de Sala de lo Militar del Tribunal Supremo. Es a él a quien compete la decisión final, lo mismo que sucederá el próximo 8 de junio. Al puesto que ocupa Delgado desde septiembre optaban un total de 20 candidatos.
La que fuese ministra de Pedro Sánchez recabó el favor de cuatro compañeros, los dos de la Unión Progresista de Fiscales (UPF), de la que forma parte, y dos miembros natos, fiscales que ella misma designó. El aspirante Luis Rueda, teniente fiscal del Tribunal de Cuentas, obtuvo seis votos de los 12 que conforman el Consejo Fiscal. La decisión hizo aflorar voces discordantes en la Carrera Fiscal, que acusaron a García Ortiz de falta de imparcialidad.
«Es un regalo por haberle elegido sucesor», admitieron las fuentes consultadas por THE OBJECTIVE. En su opinión, existían candidatos con más antigüedad y mejor currículo que Delgado. Entre ellos el propio Rueda, que fue capitán auditor del Cuerpo Jurídico Militar de la Defensa.
Máximo escalafón
Delgado dimitió como fiscal general del Estado el 20 de julio alegando razones de salud tras una operación de columna vertebral. Tan solo dos meses después sorprendía postulándose para la vacante en la Sala Militar del Supremo. Fue nombrada por el Gobierno en septiembre, momento en el que ascendió al escalafón máximo del Ministerio Público.
El PSOE ya intentó garantizar su ascenso mediante una enmienda incluida en la Ley Concursal. Una fórmula que habría supuesto que tanto ella como sus sucesores al frente de la Fiscalía General del Estado fuesen promovidos a fiscal de sala del Supremo al abandonar sus cargos. Los socialistas acabaron retirando la propuesta por falta de apoyos parlamentarios. La oposición criticó la iniciativa porque suponía una reforma «por la puerta de atrás».
A pesar de que Delgado es la favorita para la plaza de fiscal de Memoria Histórica, las víctimas del franquismo han expresado ya su rechazo, aunque por cuestiones que nada tienen que ver con su desempeño profesional. La Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica (ARMH) la acusa de haber eludido en varias ocasiones su deber de hacer cumplir la ley de Memoria Histórica aprobada por José Luis Rodríguez Zapatero en 2007.
«Es incomprensible que Delgado estuviera en calidad de máxima notaria del Reino por ser ministra de Justicia en el traslado de los restos de Franco desde el Valle de los Caídos al cementerio de Mingorrubio y que, cuando vio cómo la familia del dictador incumplía en su presencia la ley de Memoria Histórica gritando vivas al dictador y Arriba España no tomará ningún tipo de medida sancionadora. Omitió su deber de hacer cumplir la ley», explicó a este diario Emilio Silva, presidente de la ARMH.
