Ábalos emprenderá acciones contra Puente por supuestas «irregularidades» en su auditoría
El informe de Transportes señala al exministro por la compra de mascarillas que originó el ‘caso Koldo’
José Luis Ábalos intensifica su pulso contra Óscar Puente. El exministro estudia acciones legales y políticas contra su sucesor al considerar que existen «irregularidades» en el contenido de la auditoría que le atribuye la compra de mascarillas que originó el caso Koldo. El informe señala al diputado, ahora en el Grupo Mixto, por duplicar un pedido de cuatro a ocho millones de unidades en apenas media hora, después de que la empresa le advirtiera de que «o todo o nada». El juez que instruye la causa ha reclamado una copia del informe y preguntado al fiscal si cita como testigo al titular del Ministerio de Transportes, como solicitó Liberum.
El ex secretario de Organización del PSOE está dolido con sus antiguos compañeros. Se ha quejado a su entorno de que van a por él. Ábalos tacha la auditoría de «improcedente» y acusa a Transportes de montar «un tribunal de honor». El informe advierte de la falta de control durante su mandato, ya que solo se han podido acreditar documentalmente el reparto de cinco de los 13 millones de mascarillas que compró. El diputado avanza que esas conclusiones tendrán consecuencias. De hecho, ya estudia acciones legales y políticas porque «es evidente que se ha buscado incriminarme».
En los últimos días, Ábalos ha aumentado su presencia en los medios de comunicación para mostrar su malestar con la auditoría, que en su opinión incluye algunas anomalías. Puente se ha basado en ese informe para cesar al subsecretario de Transportes, Jesús Gómez, y al jefe de personal de Adif, Michaux Miranda. El exministro lo considera una afrenta y eso le ha hecho replantearse su postura respecto a su antiguo partido tras meses de «mucha caballerosidad».
Las críticas de Ábalos
El diputado valenciano está estudiando emprender acciones legales contra el departamento que dirige Puente. Ábalos ya se encuentra en conversaciones con algunos despachos de abogados especializados, según ha podido confirmar THE OBJECTIVE. El objetivo es combatir las presuntas irregularidades que, en su opinión, incluye la auditoría que le señala. El exministro insiste en que el informe no es una auditoría, sino un «compliance» como los que realizan empresas y organizaciones para identificar riesgos.
En declaraciones a ABC, Ábalos argumenta que este tipo de informes «no se puede encargar a una unidad que depende de ti, porque no tiene ninguna independencia». Además, sostiene que a ninguno de los empleados que participaron le advirtieron que el documento iba a ser público. Un abogado especializado que prefiere mantener el anonimato afea que se haya realizado con una investigación penal abierta. Secunda al exministro porque esta auditoría se asemeja a un compliance, un recurso que tienen las empresas para clasificar mecanismos internos de prevención, gestión y control.
«La realización de procedimientos de auditoría en todas las empresas deben realizarse por los órganos competentes. Tienen un alcance, una metodología y una finalidad que se obtiene de manera objetiva y evalúa la evidencia para determinar si la información o las condiciones reales están de acuerdo con la normativa establecida», insiste otra abogada especializada. E insiste: «Los procesos de investigación interna suelen comenzar por una denuncia interna, una vez se ha comprobado que no es una denuncia malintencionada».
La jurista indica que la fase de instrucción se debe realizar de conformidad con un procedimiento que está aprobado internamente, teniendo como premisas más relevantes la independencia, la confidencialidad. Además, se debe garantizar la protección y el anonimato de los denunciantes o de las personas que intervienen en el proceso de investigación, de forma que «se eviten los sesgos o presiones para que el resultado no tenga una finalidad espuria».
Apoyo al PSOE
Ábalos también amenaza con debilitar la frágil mayoría de los socialistas en el Congreso. En declaraciones a El Español, aseguró que valoraba dejar de votar en línea con el PSOE. De esa manera, el Gobierno «no podrá dar por seguro» su apoyo. El exministro fue suspendido de militancia y pasó al Grupo Mixto en febrero, tras la detención de su antiguo asesor, Koldo García. De momento no ha podido recurrir la decisión porque el partido mantiene el expediente «congelado».
El antiguo número tres de los socialistas reconoció en Cuatro que lleva seis meses «que no se los deseo a nadie». También avanzó a Risto Mejide que se encontraba en la obligación de defenderse. «Me lo podía esperar de otros, pero del PSOE no», reconoció Ábalos. Durante su intervención insistió en que tiene la misma casa que tenía y que no se había enriquecido después de ser ministro: «Yo no tengo ningún bien ni ningún patrimonio que se haya incrementado, ni cuentas aquí ni en ninguna parte».
El exministro ha pasado estos días al ataque. Entre otras cosas, ha solicitado al Gobierno que realice auditorías similares a otros ministerios afectados por el caso Koldo. Están bajo la lupa dos contratos de Sanidad y uno de Interior. Ábalos también embiste contra su sucesor al recordar en ABC las fotografías en las que hace unos años aparecía Puente veraneando en un yate pagado por un empresario al que el Ayuntamiento de Valladolid adquirió meses antes material sanitario contra la covid.
La titular del Juzgado de Instrucción número 3 de Valladolid, Elena López Negrete, sobreseyó el caso porque el empresario Sergio Zaitegui pagó los 6.500 euros que costó el alquiler del yate «de su bolsillo» y no a través de la sociedad con la que se había embolsado más de 195.000 euros públicos. La juez argumentó que no se podía probar que el empresario «agasajara por razón de su cargo público a Puente mediante la invitación en un barco de recreo en Ibiza».
Este jueves, el juez del caso Koldo ha solicitado a Transportes una copia certificada de la auditoría. En otra resolución, el magistrado pregunta al fiscal si debe citar a Puente como testigo, tal y como solicitó el pasado viernes Liberum, una de las acusaciones populares. Ábalos también ha recibido buenas noticias de la Fiscalía, que ha presentado una denuncia tras la queja del exministro por presunta revelación de secretos.