Es recomendable conocer de primera mano la opinión de un experto cuando se habla de estrés. A mi me lo hizo entender uno de los mejores psiquiatras del mundo, el Dr. José Luís González de Rivera. Se trataba de un estrés postraumático.
Estar bien en casa, todo un trabajo, todo un esfuerzo. Todo un montón de detalles de cariño que hacen que la vida sea una maravilla. También ahora. También en tiempos de crisis. También con el paro. También con todas las preocupaciones.
Parece un príncipe en su trono de líquido amniótico capaz de desplazar al Rey del centro mediático. Del mío, por supuesto, y si a usted aún no le ha seducido es porque no se fijado bien. Es un príncipe preocupado, cierto, con la mano sobre la boca y los nudillos apretados.