El perfil de la segunda mujer primera ministra de Reino Unido es más conservador si cabe que el de su predecesor en el cargo, David Cameron, el gran perdedor del Brexit. Tras aceptar su cargo y su papel como lideresa del viaje que el país debe emprender para salir de la UE, May -que se había posicionado en contra de la salida en la campaña del Brexit- se ha mostrado tajante a la hora de defender la decisión del 52% de los electores británicos. Durante su gestión como ministra del Interior, May se caracterizó por su política dura en materia de inmigración, y como primera ministra ha mostrado una actitud reticente hacia los inmigrantes, que se prevé serán los más perjudicados por el Brexit. Entre otras cosas, la primera ministra ha coqueteado con un «sistema de visados objetivo» para reducir la inmigración, además de asignar a un grupo de ministros la tarea de reducirla.
Además del Brexit, otros asuntos han estado en el centro de la polémica en los escasos 6 meses que lleva May al mando: ahora se enfrenta a la acusaciones de encubrir escándalos de abuso infantil.
En 2017 se activará el engranaje del Brexit, con Theresa May capitaneando ese barco difícil de llevar: ¿Habrá un segundo referéndum? ¿Brexit duro o Brexit blando? ¿Qué pasará con los inmigrantes comunitarios? ¿Cómo serán las negociaciones con Bruselas? Theresa May es la mujer que, seguramente, tenga la respuesta a estas preguntas, y es sin duda uno de los personajes del año que dejamos.