Para compensar esta situación, el consistorio le concedió en 2011 otros terrenos por valor de 22,7 millones de euros. La investigación independiente que abrió Bruselas para determinar si la cantidad adjudicada al Real Madrid se ajustaba a la norma cifró esa indemnización debida en tan sólo 4,3 millones, por lo que obliga al club a devolver a las arcas públicas los 18,4 millones restantes. Entre los equipos castigados, la mayoría son valencianos: Valencia, Hércules y Elche, que entre los tres deben a las arcas públicas la friolera de 30,2 millones de euros. Otro tema es el de las fundaciones: tanto Real Madrid, como Barcelona, Athletic de Bilbao y Osasuna, llevan desde 1990 tributando como fundaciones, en vez de acogerse al régimen de sociedades anónimas deportivas, y tributaban al 25% en vez de al 30%. El Gobierno ya corrigió este “trato discriminatorio” en enero de 2016, pero Bruselas reclama ahora la restitución de lo ahorrado durante más de 20 años.