Seis restaurantes italianos en Madrid que no hay que perderse
Hablamos de una cocina que da gusto a los gustos más variados, por lo que cuenta con un beneplácito generalizado
A las puertas de la celebración de la Semana de la Cocina Italiana, que tendrá lugar entre los próximos días 13 y 19 de noviembre en catorce ciudades españolas, hoy traemos en THE OBJECTIVE un recorrido por varios de los restaurantes italianos imprescindibles de Madrid para acercarse a la auténtica culinaria italiana desde algunos de sus recetarios más aplaudidos y reconocidos. Direcciones de referencia, alguna con larga trayectoria en Madrid, y a las que es un gusto ir, repetir y combinar, pues las seis no requieren el mismo desembolso.
Seis restaurantes italianos en Madrid
Boccondivino
Cocina y vinos de Italia es su carta de presentación. Boccondivino (Poeta Joan Maragall, 17-19) es restaurante que hace pocos meses arrancaba su segunda etapa. Con Ignazio Deias al frente, convertido en poco tiempo en referente de la culinaria italiana a finales del siglo pasado, cuando abría por primera vez las puertas de Boccondivino, en 1999, posicionado en la alta cocina y con la que recibiría el favor del público y la crítica.
Deias lo cerraba en 2011, tras poner en marcha en la capital diversos restaurantes con diferentes conceptos, pero ahora, en marzo de este año, Boccondivino ha vuelto a Madrid en esta nueva localización pero con la misma filosofía. Un espacio para no más de 28 comensales en el que volver a disfrutar de la alta cocina italiana (la tradicional de distintos rincones del país), casera, elaborada con mimo y tiempo, a partir de un producto seleccionado, gran parte de él procedente del país natal de Deias. En la bodega, más de 800 referencias italianas, a excepción de la burbuja, siempre francesa.
Don Giovanni
Don Giovanni (Pº de la Reina Cristina 23, posterior) es otro imprescindible en la ciudad regentado por el singular (y único, diría yo) Andrea Tumbarello, siciliano de nacimiento al frente del que es para muchos el mejor italiano no sólo de Madrid sino incluso del país. Un espacio acogedor donde disfrutar de la Italia auténtica.
Tradición y creatividad son los ingredientes esenciales que están presentes en cada plato, atractivas exquisiteces a la vista –en la carta– y luego, sin duda, al paladar. Además, Tumbarello es el rey de la trufa por lo que invierte en ella y porque en su casa nunca falta. Entre las propuestas, un original wagyu tonnato, sabrosos tagliatelle, el ya famoso huevo millesimé con trufa negra, por supuesto la carbonara, siempre un acierto, algún risotto o una de sus pizzas…entre otros muchos, pues el repertorio de pastas es infinito. En la bodega, selección de referencias italianas.
Da Giuseppina
En el castizo barrio de Chamberí encontramos Da Giuseppina (Trafalgar, 17), otra de las direcciones “verdaderamente italianas” fundada por Ignazio Deias. Una trattoria de ticket bastante más asequible que el de la casa madre y donde, de nuevo, se disfruta de una auténtica culinaria casera, tradicional, de elaboración lenta, ¡la de la mamma!, con especial atención a la gastronomía sarda (Cerdeña), zona de procedencia de Deias, y restaurante con el que rinde homenaje a su madre, Giuseppina.
El espacio es acogedor, coqueto, cual comedor familiar típico de aquellos lares, y aunque recoleto incluye tienda de productos gourmet y vinos italianos. Entre sus populares, platos como el carpaccio de ternera con rúcula y parmesano, la lasaña clásica a la boloñesa, su pasta corta de Cerdeña con boloñesa de salchicha de cerdo, la pizza sarda, que hay que probar.
Noi
De los más recientes abiertos en la capital, Noi (Recoletos, 6) es una dirección de cocina italiana ‘contemporánea’, como ellos mismos apuntan y que ofrecen en un decorado en sintonía. El proyecto lo firma el grupo El Pradal y aquí no esperes tradiciones ni clásicos porque su objetivo es sorprender con recetas novedosas, arriesgadas, atrevidas, con productos del Mediterráneo de aquí y de allá. En Noi (‘nosotros’ en italiano) hay bases reconocibles sobre las que aplican técnica y creatividad. Eso sí, todo resuelto en elaboraciones comprensibles para todo comensal, además de vistosos en cuidadas presentaciones. A los mandos de los fogones, el tándem que conforman el italiano Gianni Pinto junto al español Javier Gassibe. En su haber, la distinción Bib Gourmand (cocina de calidad a precios contenidos) de la Guía Michelin.
Ozio Gastronómico
Ozio Gastronómico (Aviador Zorita, 37) es una casa de comidas siciliana con platos difíciles de encontrar en otros lugares y de nuevo una dirección con pizzas reseñables. El planteamiento, un recetario tradicional con toques actuales y de modernidad. Entre sus atractivos hay que reseñar que la materia prima con la que trabajan procede de Sicilia al igual que los elementos decorativos (azulejos, mesas, esculturas…incluso el jabón de los lavabos). Pero es que su propietario y cocinero son también sicilianos, Alberto Antolina y Darío Génova, respectivamente. Bodega en sintonía, no podía ser de otro modo. Para una primera vez, buena la opción de los menús degustación.
La Tavernetta del Pirata
También vecina del barrio de Chamberí, La Tavernetta del Pirata (Santa Engracia, 26) en su caso abre las puertas a una llamativa trattoria marinera desde la que el viaje que proponen lleva hasta la costa amalfitana, al sur de Italia. Porque de la isla de Ischia parten los orígenes de Bebi Poerio, al frente del restaurante y cuyo recetario tradicional napolitano está inspirado en lo que aprendió de su abuelo, Il Pirata… ¡sobra explicar el nombre! Y es que la familia Poerio, hosteleros por varias generaciones, son un referente de la gastronomía local. La que ahora ha traído Bebi a Madrid. En su caso, pasta, mariscos y pescados son los principales protagonistas, un producto de calidad y una cocina ante todo casera. Llama la atención además que trabajan con su propia vajilla, artesanal, donde presentan todo el recetario.
Los locales referidos responden exclusivamente a un criterio profesional y de calidad.