Esta es la receta de canelones de carne de la abuela
La receta de los canelones de carne de la abuela es sencilla, rápida y riquísima
Los canelones son un plato emblemático que ha dejado una marca indeleble en la gastronomía mundial. Originarios de Italia, específicamente de la región de Emilia-Romagna, estos rollos de pasta rellenos han conquistado los corazones y paladares en diferentes partes del mundo. En España, y particularmente en Cataluña, los canelones han adquirido una personalidad propia, convirtiéndose en un plato tradicional que se sirve en ocasiones especiales, como las festividades navideñas.
El término «canelones» proviene del italiano cannelloni, que significa «tubos grandes». Estos tubos de pasta se rellenan tradicionalmente con carne, queso, espinacas u otros ingredientes, y se cubren con una salsa, generalmente bechamel o tomate, antes de ser horneados. Aunque su origen es italiano, los canelones se popularizaron en Cataluña en el siglo XIX, cuando los cocineros italianos emigraron a España y compartieron sus recetas. En la gastronomía catalana, los canelones se convirtieron en un plato típico de San Esteban (26 de diciembre), aprovechando las sobras del pavo de Navidad para el relleno, convirtiendo así los canelones en una receta de aprovechamiento.
Ingredientes
Para preparar los canelones de carne de la abuela, necesitaremos los siguientes ingredientes: 16 láminas de pasta de canelones, para el relleno emplearemos 400 gramos de carne de falda ternera picada, 400 gramos de pechuga de pollo, 200 gramos de carne de papada de cerdo picada, 200 gramos de foie (si se quiere una farsa de sabor más intenso), 80 gramos de panceta curada, una cebolla grande, dos dientes de ajo, una zanahoria, un pimiento verde, un tomate grande, 100 mililitros de vino blanco, 100 mililitros de caldo de carne, un buen chorro de aceite de oliva virgen extra, una pizca de sal y un toque de pimienta negra molida al gusto.
Si queremos que nuestra receta sea más natural haz tu propia bechamel casera. Para hacerla te harán falta un litro de leche, 60 gramos de mantequilla, 60 gramos de harina, sal, pimienta y nuez moscada al gusto. Para gratinar nuestros canelones de la abuela utiliza 100 gramos de queso rallado, te recomendamos comprar una cuña grande de queso y rallarla tú mismo, ya que así tendrá más sabor que los de bolsa que ya vienen rallados. El queso granapadano es ideal si te gustan los sabores intensos, aunque el clásico parmesano también es una buena opción.
Receta
Comenzamos preparando las verduras para hacer el sofrito para la farsa o relleno de nuestros canelones. Para ello hay que pelar y picar finamente la cebolla, los ajos, la zanahoria y el pimiento verde. El tomate lo dejamos aparte ya que vamos a rallarlo. Una vez preparadas las verduras, hay que coger una sartén grande y calentar un chorro de aceite de oliva para sofreír la cebolla y el ajo hasta que estén dorados.
Entonces se añaden la zanahoria y el pimiento verde y se deja a fuego medio hasta que estén blandas. A continuación, hay que incorporar la carne de ternera y cerdo y asegurarse de que la carne está completamente hecha (ya que es peligroso tomar la carne de cerdo cruda, no te preocupes por si queda seca, como vamos a añadir bechamel, no se notará). Después salpimentamos al gusto y procedemos a desglasar y reducir, en este paso hay que agregar el vino blanco y poner a fuego alto hasta dejar que se evapore el alcohol.
En ese momento, se añade el tomate rallado y se deja en el fuego durante unos minutos más, mientras incorporamos el caldo de carne y dejamos que reduzca hasta obtener una mezcla jugosa pero no líquida. Podemos poner un trozo de foie para aportar un sabor más intenso a nuestro relleno. Si lo hacemos, hay que dejar que el foie se funda con la farsa, se retira del fuego y se deja enfriar en un bol aparte.
Por otro lado, tenemos que poner a cocer las láminas de canelones en abundante agua con sal siguiendo las instrucciones del paquete. No las pases, sino se romperán al formar los canelones, es preferible que queden al dente, ya que terminarán de hacerse en el horno. Cuando las saques del horno, ponlas a escurrir colocándolas sobre un paño limpio.
En una cazuela aparte prepararemos la bechamel. Es muy sencillo, hay que derretir la mantequilla y añadir la harina. Se remueve durante unos minutos para eliminar el sabor a crudo de la harina. Y poco a poco, se va añadiendo la leche caliente sin dejar de remover para evitar grumos. Se cocina a fuego medio hasta que espese y se salpimenta al gusto. También le ponemos un toque de nuez moscada.
Cuando montemos los canelones, ponemos sobre cada lámina de pasta una cucharada generosa del relleno y enrollamos. Una vez que tengamos todos los canelones colocados en una fuente apta para horno, los cubrimos con la bechamel. Y espolvoreamos el queso rallado por encima. Hay que gratinar los canelones en el horno precalentado a 200ºC durante unos 15 ó 20 minutos, o hasta que estén dorados.
Beneficios para el organismo
Los canelones de carne aportan beneficios nutricionales muy necesarios para nuestro organismo. Como las proteínas de alta calidad de la carne de ternera y cerdo, que son esenciales para la reparación y crecimiento de los tejidos. O el aporte de las vitaminas A, C y K del sofrito de las verduras, así como minerales como el hierro y el potasio.
Además, la pasta es una fuente importante de carbohidratos complejos, que no proporciona energí. Y la bechamel y el queso son fuentes de calcio, vital para la salud ósea. Incluso el aporte graso de este plato contiene beneficios para nuestra salud, puesto que el aceite de oliva y el foie aportan grasas saludables que benefician al corazón.