Íñigo Onieva, ni triste ni fuera de España: ha estado de fiesta con sus amigos en Madrid
Este miércoles ha trascendido nueva información sobre el paradero del ex de Tamara Falcó, que se encontraba ‘desaparecido’ desde la ruptura
Hasta ahora, no se sabía nada de Íñigo Onieva, pues no ha sido captado por los paparazzi ni ha tenido actividad alguna en redes sociales desde que el pasado domingo 25 de septiembre, 48 horas después de negar su deslealtad a Tamara Falcó emitía un comunicado admitiendo todo.
Desde entonces, nada se sabía del empresario. Ni dónde está ni cómo ni con quién. Numerosos reporteros llevan apostados desde hace diez días a las puertas tanto del piso que compartía con la marquesa de Griñón como de la casa de la madre del ingeniero, Carolina Molas, pero nada.
Este miércoles, sin embargo, ha trascendido nueva información sobre el paradero del empresario: no ha estado ni fuera de España ni llorando, pues ha sido visto de fiesta en Madrid con sus amistades más cercanas. Al menos eso es lo que asegura la revista Semana en su publicación impresa.
Íñigo Onieva, celebrando con sus amigos que ya no va a casarse
El hombre más buscado del momento, Íñigo Onieva, ha estado de juerga con sus amigos en Madrid. Según la citada revista, el pasado fin de semana, el ex de Tamara Falcó y sus más cercanos celebraron una peculiar «despedida de casado», tal y como la definió el propio ingeniero.
El grupo de amigos fueron vistos dándolo todo en una fiesta en el Imposible Club, un local exclusivo de la capital al que llegaron hacia las once y media de la noche y donde permanecieron hasta altas horas de la madrugada, cuando cerraron.
Lo que es evidente es que Íñigo Onieva o está haciendo de tripas corazón tras su mediática ruptura o que le importa más bien poco a estas alturas. Sigue siendo un misterio, no obstante, dónde está pernoctando, pues, como decíamos, hay numerosos reporteros tanto a las puertas de casa de su madre como a la que compartía con la marquesa —quien el pasado fin de semana, por cierto, mientras su ex estaba de fiesta, se encontraba en México hablando de la importancia de la familia—.
Capítulo cerrado: ya no vive con Tamara Falcó
Este martes, a media mañana, un camión de mudanzas llegó al piso en el que vivía la pareja en el madrileño barrio de Las Salesas y sacó todas las pertenencias del joven, tal y como te contamos en THE OBJECTIVE.
Una decena de cajas de tamaño mediano, numerosos portatrajes e incluso un llamativo casco de moto color amarillo flúor fueron sacados por los operarios para trasladarlos, rápidamente, a la casa de Carolina Molas en la exclusiva urbanización de La Moraleja.
Un paso al frente por parte de Íñigo Onieva que llega días después de que Tamara Falcó le exigiese que sacase todas sus cosas del que fue hogar durante los dos años que duró su relación.
De vuelta a casa de su madre, que está sobrepasada
La ruptura no solo ha sido dramática para los dos miembros de la pareja, sino también para las familias de ambos, en especial para Carolina Molas, quien estaba muy unida a la marquesa y a quien los reporteros llevan asediando durante días.
Hace unos días, de hecho, la madre de Íñigo Onieva no pudo contener las lágrimas ante la prensa, a la que pidió que por favor la dejasen en paz, asegurando que no iba a hacer declaraciones sobre la vida privada de su hijo y pidiendo que por favor se la dejase al margen de la ruptura.
Poco después, trascendía que Carolina había puesto tierra de por medio y se había ido de viaje para huir de las cámaras que se han convertido en una constante a las puertas de la casa familiar, intentando captar la primera imagen del ingeniero tras el escándalo.
De regreso en Madrid, la madre de Íñigo Onieva, sobrepasada pero más tranquila que hace unos días, hizo otra desesperada petición a la prensa cuando le volvieron a preguntar por el escándalo. «No me saquéis, por favor, no me saquéis», rogó, cabizbaja.
